CAPÍTULO 4

Si, lo sé, soy una estúpida, pero que puedo hacer, me enamore de Matt. A pesar de que la primera vez que salimos juntos solamente me gustaba, por alguna razón le di otra oportunidad en la cual comencé a tener sentimientos más fuertes por él, y como idiota seguía aceptándolo cada vez que se me declaraba y con cada regreso me fui enamorando más y más de él. A pesar de todo el daño que me causo no podía sentir nada más que amor por él y no podía hacer nada para terminar con ese sentimiento, después de todo de alguna u otra forma el siempre regresaba a mí, así que decidí esperar por él. Pero en esta ocasión toda esperanza se desvaneció cuando apareció Jean, en esta ocasión sentí que Matt nunca más regresaría a mí, y de esa forma me comencé a arrepentir de todas las cosas que no pude hacer por él. No sabía qué hacer con lo que sentía, cada vez era más doloroso verlos juntos, pero después de todo nunca quise dar a conocer mis verdaderos sentimientos, creía que me haría más daño el hacerlo, así que trate de parecer la persona más feliz ya que, a mi amigo le estaba yendo bien en su nueva relación.

Para aliviar el dolor que sentía, Carter me propuso que realizara algo distinto a lo que solía hacer, ya que Matt de alguna u otra forma se involucró en mi día a día cuando solíamos estar juntos, así que todas las cosas que me gustaban hacer se convirtieron en algo doloroso para mí, de todas las opciones que habían sin pensarlo mucho, tome el empleo en donde solicitaba a una mesera en una cafetería, es muy tonto ya que no me gustan los lugares concurridos, pero creí que allí disminuiría el dolor que sentía.

Con el tiempo me fui dando a la idea de que Matt al fin había encontrado a la persona con la cual quería pasar el resto de su vida, y esa mujer era Jean, aun me seguía doliendo, pero podía seguir mi día a día como si no me importara, así que Matt nunca se dio cuenta de lo que sentía de verdad. Después de todo nunca se dio cuenta de mis sentimientos cuando salíamos mucho menos ahora que ha estado embobado con Jean.  De esa manera comencé a ser más positiva y a tratar de olvidarlo, aunque para ser sincera, no tenía confianza en mí misma que lo lograría.

Puede sonar sorprendente, pero me comencé a adaptar a mi trabajo en la cafetería ya se me facilitaba el atender a las personas, incluso Ren me decía que ya lo hacía de forma natural, lo cual me alegraba escuchar eso, después de todo el recibir a los clientes con una sonrisa no era para nada difícil. Ya un año y medio de trabajar ahí, de alguna u otra forma tenía que tener un progreso. Aunque fuera solo en el trabajo.

Cuando finalice mi jornada de trabajo y regrese a casa, por alguna razón decidí buscar entre mis cosas y encontré la caja en donde había guardado los regalos que me dio Matt durante el tiempo que fuimos novios, el collar en forma de lirio, la tarjeta con el dibujo de un lirio, un clavel y un tulipán, la pulsera con figuras de manzanas, los aretes en forma de gatos, los listones para mi cabello, la playera de pareja que me entrego  lo cual me quede anonadada cuando me la dio y vi que él ya la tenía puesta, al ver todo esto simplemente me di cuenta que nada estaba bien, que a pesar de todo  el tiempo transcurrido aún seguía enamorada de él, y aun me seguía doliendo, así que, pensé “si solo me traería más dolor tener cada uno de esos recuerdos sería mejor deshacerme de ellos”.

Decidí ir al lugar donde nos conocimos, para ser exactos fue debajo de un gran árbol, el cual llamo mi atención cuando me mude aquí, me encanto el paisaje que visualice en ese lugar que fui allí sin siquiera pensarlo, de esa manera me topé con él. Pensé que sería mejor deshacerme de estos recuerdos en donde comenzó, tome las cosas y opte por quemar la caja con todo dentro, al momento de hacerlo creí que había comenzado a llover pero no, eran las lágrimas que brotaban de mis ojos, las cuales ya no pude contener más, el dolor que sentía en ese momento era muy grande que no me importo dar quejidos y caer en llanto mientras  todo se quemaba, todos los momentos que pasamos juntos, todo lo que vivimos juntos, era muy doloroso el pensar que él ya lo había olvidado así de fácil, al parecer los cielos decidieron unirse a mi llanto y de esta manera la lluvia comenzó a caer repentinamente, algunas gotas se filtraban en las hojas de ese gran árbol que me acompañaban en mi dolor, disimulando así el llanto que no quería mostrar a la persona que iba pasando en ese momento, gracias a las gotas de lluvia filtrándose en ese gran árbol pude encubrir mi dolor.