Sasuke Y El Gobi

Menma estaba en el suelo inconciente, aún, mientras que los demás formaron un circulo a su alrededor arrodillados empleando sus chakras para formar cadenas que lo mantendrían inmovilizado.

Sasuke, de pie, empleó su Sharingan para entrar en la mente de Menma y liberarlo de la nefasta técnica del enemigo.

Pero aquello no sería fácil ya que las barreras y trampas mentales que la misma técnica colocó en el ninja eran poderosas.

No obstante Sasuke contaba con la ayuda del Gobi que pudo manifestarse junto a él en la mente de Menma para combatir al enemigo allí.

Aquel era un escenario similar al de un oscuro pantano donde la vegetación se volvía peligrosa. En algún lugar de ese escenario yacía Menma encerrado.

Sasuke junto al Gobi se fueron adentrando más y más mientras enfrentaban a pequeñas y singulares criaturas que iban apareciendo en el camino.

El problema se presentaba cuando, tras vencerlas esas mismas criaturas volvían a aparecer.

Aquello no tendría fin si seguían así.
— Es como Idra y sus múltiples cabezas crecientes — murmuró Sasuke.

— Debemos encontrar el corazón — meditó el Gobi, Sasuke empleó el Sharingan y así pudo ver dónde estaba Menma en verdad.

Yacía en el interior de uno de esos árboles negros pero tenía que avanzar más aún y a medida que se iba adentrando en el pantano sentía cómo éste volvía más pesado su cuerpo.

Debía hacer grandes esfuerzos para avanzar. En un determinado momento, las fuerzas le fallaron y cayó logrando que el lodo cubra la mayor parte de su cuerpo, pero se colocó de pie y continuó con  la marcha.

El frío congelante entumecida su cuerpo al completo.  

Aunque él era conciente de que todo eso no era más que un juego mental, que la oscura técnica del enemigo había colocado, podía sentirlo muy real al punto de lanzar el aliento por la boca en la realidad y tiritar de frío.

El Gobi se hubo corporizándose una vez más junto a Sasuke para que el ninja pueda subirse a su lomo y así seguir acercándose a Menma.

El ninja emo debía hacer grandes esfuerzos para seguir despierto y no sucumbir en la tentación de la inconciencia o estaría perdido para siempre.

El Bijuu en cuestión usaba su poder para apartar en parte al lodo. Así avanzaron más rápido.

Cuando pudieron llegar al fin, tuvieron que enfrentarse a tres seres enigmáticos.

Hechos de lodo, pero tan sólidos como una persona común, y tan poderosos como si fuesen ninjas de alto rango. Sasuke bajó del lomo del Gobi para disponerse a combatir.

Respiraba entrecortado por los efectos del mismo pantano. 
— Sasuke, ocúpate de uno y yo me encargaré de los otros dos — dijo el Bijuu sabiendo el estado en que se encontraba el ninja emo.

Al ninja emo le costó enfrentarse e incluso vencer a su oponente pero al final pudo hacerlo.

Inmediatamente, junto con el Bijuu se ocuparon de romper el árbol negro donde yacía Menma encerrado.

Al cabo de unos momentos, el ninja pelirrojo despertó y tras emplear su poder junto al Gobi desintegraron aquel lugar al completo.

— Eres una criatura maravillosa — le dijo Menma al Gobi — Gracias — luego miró a Sasuke — Gracias a ti también Sasuke. Pronto estarás bien, ya lo verás.

Transcurridos un par de minutos, Menma despertaba al tiempo que Sasuke volvía a la normalidad  pero respirando entrecortado.

En verdad había quedado exausto. Naruto lo sujetó justo a tiempo ya que había perdido el equilibrio.

— ¿Estás bien? — le preguntó Naruto.
— Si, solo que...fue más duro de lo que creí..

Menma quiso incorporarse pero un fuerte mareo lo invadió. Gaara lo sujetó a tiempo.

El ninja pelirrojo cayó inconciente en sus brazos. Sasuke, al ver aquello, calmó a todos diciendo:

— Está exausto, solo necesita descansar. Fue duro el enfrentamiento a esa técnica.

Sakura lo curó, mientras Naruto, junto con Sasuke y Shikamaru, planeaban los últimos detalles del siguiente paso.

Habían tenido un retraso, que les resultó muy beneficioso a todos :
— ¿Acabaste ya Sakura? 
— Si
— Bien ¿Cómo te sientes Sasuke?
— Bien, recuperé mis fuerzas gracias al Gobi.
— Excelente, vamos entonces — Exclamó Naruto con sombría expresión — Rumbo a Konoha.