43.

⊷⊶⊷⊷⊶⊷《 KATHERIN 》⊷⊶⊷⊷⊶⊷

Subí rápidamente al cuarto, no quería que Matthew se despertara y no me encontrara en la habitación, para mí buena suerte Matt aún dormía cuando entre a la habitación.

Me senté a su lado y con mi mano peiné su cabello, me encantaba su cabello azabache medio largo, era sedoso.

— Amor despierta — le susurré en el oído.

— mmmm —

— Pedí el desayuno para los dos — el siguió durmiendo plácidamente, estaba segura que se encontraba bastante agotado con todo lo que hicimos.

Me levanté de la cama haciéndome un poco lejos de él y saqué mi celular para grabarlo.

— Oh, muchas gracias por la invitación, también me encantaría salir contigo hoy, eres muy guapo — ha le en voz alta y lo vi levantarse de un salto de la cama.

— Tu no vas a salir con nadie — no aguante más y comencé a reír a carcajadas.

Él se veía desconcertado mirando a cada rincón de la habitación a ver si encontraba a alguien.

— ¿Con quién hablabas? — tome su rostro uniendo nuestros labios.

— con nadie señor celoso, solo quería que despertarás, no debe demorar nuestro desayuno —

— Estúpida, me asustaste, tú eres mía entendiste, mía y solo mía —rodé los ojos.

— No hagas eso con tus ojos o tendré que castigarte —

— ¿A si? ¿Y cómo me castigaras? — me mordí el labio sabiendo como terminaría esto, pues sentía a su amigo muy despierto contra mí.

Se lanzó a tomar mis labios con brusquedad y menos de nada ya me encontraba cabalgándolo.

Caí agitada sobre su pecho, justo cuando la puerta de la habitación se escuchó.

— Mierda, ¿Quién viene a molestar justo en este momento? — me reí un poco por su frustración.

— Debe ser el desayuno que pedí, iré a recibirlo —

— Tu no te vas a mover de aquí — se sentó mientras aún estábamos unidos. — solo yo puedo verte desnuda y recién follada — con cuidado me ayudó a bajarme de su regazo y envolviendo sus caderas en la sabana salió a recibir el pedido.

Tomamos nuestro desayuno, desnudos en la cama, sentía que este viaje era la luna de miel que no tuvimos.

Cerca al medio día ya nos encontrábamos en la sede de la empresa, teníamos que terminar de organizar los diseños a presentar.

— Katherin, me siento muy feliz de tenerte en mi equipo de trabajo, tus diseños fueron sublimes — me encontraba con Lucían en el taller.

— Muchas gracias Lucían, que me diera está oportunidad es algo que no me voy a cansar de agradecerle, aunque fuera por Matthew —

— Fue tu talento lo que te puso en este puesto. La verdad es que yo ya te tenía presente como diseñadora desde hace algunos años — lo mire interrogante, ¿cómo sabía de mí? El me miró y pareció leer mi mente.

— Steven me mostraba los diseños que realizabas desde la adolescencia, algunos eran muy buenos, excelentes diría yo —

Definitivamente Steven siempre había velado por mi como un padre, como no llamarlo papá ahora, lo único por lo que aún tenía un poco de resentimiento fue el hecho de que lo ocultaran tantos años.

— Mañana tendremos que llevar todas las piezas de la pasarela y dejarlas en el salón que nos asignaron, se hará la presentación durante la pasarela y luego se exhibirán los conjuntos — le asentí con la cabeza.

Debía hacer dos pares iguales de cada conjunto, sin embargo, yo decidí confeccionar tres de cada uno, por si se presentaba alguna emergencia con alguno de los conjuntos.

Mire la hora en mi reloj, eran la tres, debía salir ahora para el hotel o no podría encontrarme con Joseph.

— Amor, debo ir al hotel donde nos hospedamos — le comenté a Matthew, que se encontraba sentado en el suelo luego de la práctica de la pasarela.

— Nuestras cosas ya no están en el hotel, mientras veníamos para acá la gente que trabaja para papá llevo todo a nuestra casa — ¡mierda! 

— Quedé de encontrarme con alguien allí —

— ¿Con quién? — no estaba segura de decirle, sin embargo, tampoco quería tener secretos con él.

— Tengo una pista de Maggie, quiero ir a revisar — abrío los ojos desmesuradamente

— No irás sola a ningún lugar, esa mierda puede ser peligrosa, ¿Con quién mierda vas a ir? —

— Primero que nada, bájale a tu tontito, y segundo, claro que iré sola — le tome sus manos mientras lo miraba a los ojos.

— Por favor confía en mí — cerro sus ojos y apoyo su frente contra la mía.

— Está bien, confiaré en ti, vamos te llevaré al hotel — tomo mi mano y caminamos solo unos pasos antes de detenerse en seco.

— ¿Con quién te encontrarás? —

— Con un conocido, trabaja para Drake — asintió con la cabeza y me extendió el buzo que usaba en ese momento.