49.

⊷⊶⊷⊷⊶⊷《 MATTHEW 》⊷⊶⊷⊷⊶⊷

Se sentía una falsa calma en el ambiente, el día siguiente que nos entregaron a Mike, fuimos a la estación de policía a hacer la denuncia, con los vídeos que alguna vez nos enviaron de Maggie siendo abusada, la foto que teníamos de ella con un hombre de espaldas que resultó ser William Drake, y todas las pruebas que ella había recolectado.

Papá y mamá fueron a la estación, a pesar de la insistencia de los doctores porque papá no saliera, durante el interrogatorio de Maggie los oficiales nos permitieron quedarnos a ver y escuchar todo lo relatado a través de un vidrio espejo.

Con cada palabra que salía de sus labios más irá crecía en mi interior, especialmente cuando dijo que Ethan la había entregado como moneda de cambio, era un maldito infeliz, tenía ganas de ir y romperle el rostro.

Ahora entendía por qué trataba de estar lo más normal del mundo, como si nunca le hubiese pasado nada, no hablaba mucho de su situación, y al ver lo reacia que estaba habíamos desistido y tratado de que estuviera tranquila.

Mamá lloraba desconsoladamente y papá trataba de consolarla, aunque su mirada vidriosa me hacía saber cuánto le afectaba, aún no podía creer todo lo que había pasado y aun así estaba en pie, aparte de eso me había ayudado a mí, me había puesto los pies en la tierra cuando casi lo arruinó todo, mi hermanita sin duda es la mujer más fuerte que conocía.

Luego de que Maggie termino de dar su declaración fue el turno de Kathe, ella al igual que Maggie conto todo lo que había sucedido en aquel lugar, por suerte el bastardo no había estado tanto tiempo y no había logrado su cometido.

Luego de ello fue el turno de Joseph o Joshua o como se llamará el desgraciado, cuando Kathe lo vio en la mañana lo primero que hizo fue darle una patada en las bolas, ¿Qué les pasaba las mujeres que siempre nos golpeaban allí?

Joseph hablo de su trabajo, del como en aquel club, que era exclusivo para gente de alta sociedad y algunas mafias, y que estaba escondido a simple vista, tenían mujeres que habían sido secuestradas de sus hogares, y que eran obligadas a trabajar en aquel lugar sin protección alguna sin importar que quedarán embarazadas, si eso pasaba las sacaban y eran llevadas a otro lugar, él no sabía cuál.

Se decidió que lo mejor para las chicas era tener una orden de alejamiento para los tres artífices principales de todo, Sarah, Ethan y William.

En ese momento con los contactos de Steven se emitieron las tres órdenes de arresto, a Sarah por trata de blancas, ya que era ella quien se encargaba de buscar las mujeres y venderlas, Ethan por robo y lavado de dinero y William por violación, trata de blancas, lavado de dinero, venta de estupefacientes y algunos más.

Volvimos a nuestro hogar en silencio, mientras mamá volvía al hospital con papá, se quedaría unos días más en observación antes que pudiéramos volver a Nueva York, en el auto Katherin iba pensativa y triste.

— ¿Qué sucede amor? — ella suspiro.

— Lo perdí — frene de golpe haciendo que se fuera hacia el frente con brusquedad.

— ¿Acaso eres estúpido? — la mire asustado.

— Dime que mi bebé está bien — le dije asustado, no podría pasar por ello una vez más, no lo soportaría.

— ¿De qué hablas? ¿Acaso enloqueciste? — resopló enojada.

— Solo dime —

— Matthew, nuestro bebé está bien, no le ha pasado nada ¿Qué te sucede? —

— ¿Que perdiste? — ella me miró comprendiendo a lo que me refería. Tomo mi mano con las suyas y la llevo a su abdomen.

— Nuestro hijo está más que bien, especialmente porque tú nos cuidas, lo que me perdí fue la semana de la moda — hizo un mohín con sus labios. — Quería ver mis diseños en la pasarela —

— Por ello no te preocupes, Michelle se encargó de la pasarela, ya sabes, es la mano de fecha de papá, puede hacerse cargo de todo tranquilamente —

— Oye Matt, es extraño que nos entregaron a Mike, así como así, siento que es una trampa — cuando ella lo menciono recordé la carta que había recibido junto al pequeño.

— Lo es, sin embargo, no vamos a pensar mucho en ello, sabes que los voy a proteger sin importar nada más —

— Gracias Matthew — le sonreí y tomé sus labios en un dulce beso.

— Gracias a ti, porqué ahora me siento mucho más feliz — y no mentía.

— Hay algo que debo decirte Matt — la mire expectante mientras ponía el auto en marcha de nuevo.

— El día que William quiso, bueno, ya sabes — apreté el volante con fuerza, — ese día él dijo algo que me dejó pensando —

— ¿Que dijo? —

— Dijo que quería destruir a Lucían, porque se había robado lo que era suyo, que Alice era su mujer y que iba a recuperarla, que después que terminara conmigo iría por ella — me dejaron muy pensativo sus palabras.

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Una semana después nos encontrábamos volviendo a Nueva York, Ethan había desaparecido de la faz de la tierra al igual que Sarah y William, no había pistas de su paradero y eso tenía algo angustiada a Kathe.