Capítulo 28: EL PODER DE CREER Y CONFIAR

— Cuando alguien comparte algo íntimo con otra persona tú crees qué se acercan o se alejan — preguntó Xiaowu mientras caminábamos.

— Creo que tan solo saben más del otro. — respondí intentando transmitir confianza.

— Algo tan personal que en toda tu vida… Solo lo conocen 3 personas. — dijo Xiaowu iniciando con su narración.

—¿Quiénes? — pregunté curiosa.

— Zhao Lin, el Sr. Yan y yo. Bueno ahora tú lo sabrás. — cada palabra que decía sentía que nos acercaba un poco más.

— Entonces cuéntame, soy toda oídos. — estaba iba a ser la conversación que nos uniría.

Eso creo.

—Busco a la niña con la que sueño. Realmente sueño con ella, la veo todos los días. Quiero saber si ella también sueña conmigo, si también me busca. Quiero saber cómo se ve ella ahora, como se comporta, qué hace. — dijo Xiaowu tan emocionado.

No, no era emoción. O quizá sí, pero era un conjunto de emociones inexplicablemente dulces que ponían mis sentimientos a flor de piel.

— Solo quiero verla. — dijo, por último.

Después de todo eso, yo solo estaba pasmada. No quería comprender ni razones ni causas.

— Eres un sicópata. — dije.

Mis ojos se entrecerraron, me sentía una tonta por escuchar lo que decía.

Acaso, ¿Él estaba mal de la cabeza?

Solo tome el primer taxi que vi y me aleje de él. Me parecía estúpido, irracional, tonto, casi imposible todo lo que decía.

¿Cómo podía creer ello?

Pero y si es verdad. Quizá siempre busco a esa persona y hasta ahora recién se presenta la oportunidad. Serán como los lazos del destino.

Me volteé a ver por la ventana trasera del taxi, Xiaowu se veía decepcionado, triste y desconsolable.

Pero en mi tonto raciocinio no creí las palabras que dijo. Sé que muy en el fondo de mi corazón si le creía y quería correr y decirle «Te creo» Pero más creí en mis pensamientos incrédulos.

Al día siguiente me la pasé intentando bordar lo más perfecto posible. El primer bordado que hice eran cerezos tan lindos y rojos.

Mis manos estaban llenas de banditas por todas las hincadas que me di con la aguja. 8 de 10 dedos estaban con banditas, aun así, me emociona bordar más cosas como me enseñó la abuela.

Tenía más o menos 20 pañuelos para seguir mejorando mi bordado.

Más tarde la abuela me llamo para que a la mañana siguiente vaya a verla. Accedí, de todas maneras, no tenía trabajo…

Trabajo… Xiaowu…

¿Qué habrá pasado con Xiaowu?

No hablamos desde el día que le dije sicópata.

Realmente siento mal por haberlo tratado así, me siento terrible.

Decidí hacer un bordado especialmente para él, caminé hasta el bazar más cercano y compré un pañuelo color azul noche.

La tela era suave, sonreí y regresé corriendo al departamento. Me senté y empecé a bordar diligentemente un lirio blanco.

Pasaban de las 10 de la noche, por fin había terminado de bordar el lirio blanco, mañana le pediría a la abuela que me ayude a mejorarlo, a menos de que este perfecto.

A la mañana siguiente salí en dirección a la casa de la familia Lu.

Toque el timbre, pero la abuela apareció por detrás de mí.

— Andree, estás aquí. — dijo la abuela.

— Abuela. — dije con un tono cariñoso e inclinando la cabeza.

— Vamos, vamos. Muéstrame todo lo que bordaste estos días. — ella jaló de mi mano y yo la seguí.

Rodeamos la casa y pasamos por un gran jardín. Quería correr y recostarme en el césped no habría impedimento debido a que llevaba jeans anchos un top pegado una chaqueta con manga tres cuartos color beige.

— Abuela su jardín es muy bonito. — dije admirando la belleza de cada flor.

Entre ellas estaban montones de lirios blancos. Me quedé observándolos tan detenidamente que dejé a la abuela mucho adelante de mí.

¿Quién habría sembrado tantos lirios?

También borde lirio para Xiaowu.

— ¡Andree! — dijo ella con voz alta mientras me sacaba de mis profundos sentimientos.

Me volteé y caminé rápidamente hacia la abuela.

— ¿Te gustan los lirios? — preguntó.

— No… Es solo… Borde lirios blancos para Xiaowu. — dije pensando profundamente en su significado.

— El abuelo de Xiaowu plantó todos esos lirios. Cada vez que me hacía molestar plantaba uno. Luego pensó en otra flor y plantó las gerberas blancas y luego las rosas amarillas. — la abuela miraba a las flores con tanta nostalgia.— Usualmente me molestaba cosas super pequeñas pero él igualmente se sentia culpable.

Los recuerdos de un matrimonio feliz siempre están en el corazón de una persona.

— Cada vez que hacía algo malo o bueno plantábamos una flor intentando demostrar nuestros sentimientos. — dijo ella para finalizar. — ¿Sabes por qué es importante creer?

— Realmente no lo sé. — pensé detenidamente. — Pero ¿Qué tiene de importante creer? ¿Por qué es parte del matrimonio? — no entendía, pero hacia un esfuerzo.

— Solo si crees no dudaras. Un matrimonio debe basarse en la verdad, pero también en creer. — dijo la abuela. — El amor es de la misma manera.

Creer…

— Cuando tu gran amor te confíe algo cree lo que dice, porque está confiando en ti. Creer es confiar.

No deje de pensar en lo que dijo la abuela, creer es confiar.

¿Acaso perdí la confianza de Xiaowu después de mi reacción?

Debería disculparme ya.

Llegué a casa de Xiaowu toqué el timbre como loca. Recordé que el Sr. Yan me había dado llaves la vez pasada.

Entré, la casa pudo haber estado en silencio si no fuera por una risa proveniente de una joven.