Tic Tac

Asustada.

Es la única palabra que encuentro para describirte parada junto al vehículo, observando como lentamente paso en frente a ti para hacerte perder los estribos.

Sinceramente, amo hacerte sentir así.

Aterrada.

Con ganas de huir.

Amaba verte lastimada, débil.

Y ten por seguro que sigo amándolo, quizá, con mucha más fuerza.

Tic tac, chica. El reloj corre y tu tiempo de pagar cuentas se acerca.

Tú lo sabes, mujer.

Sabes que cuentas tienes.

Sabes que es lo que vengo a cobrar.

Sabes que no estás lista para lo que viene.

Pero, como soy un ser benevolente, te daré tiempo para que lo asimiles un poco.

Cuida tus espaldas, tienes poco para prepararte.

Tic tac, Harper. Corres peligro.

El auto chocando fue una prueba de ello.

Tic tac, Davis. Cuidate y cuida quienes están contigo.

Estaría muy mal que algo sucediera, ¿verdad?

Tic tac, el tiempo se acaba.

Y las advertencias también.

Sabrás de mí pronto, mientras tanto, sigue huyendo, pequeña.