Capítulo 25

El viaje de nuestra luna de miel, llego a su fin me da algo de sentimiento, extrañare estar en esos países tan hermosos, suspiro al bajar del jet privado, Ethan toma mi equipaje y dice,

—No te preocupes, podemos volver cuando quieras.

Lo vos sorprendida, estiro mi meñique y digo seria,

—¿Lo prometes?

El se ríe por mi forma de actuar,

—¿Eres una niña?

Cruzo mis brazos y hago un puchero,

—Para mi la promesa de meñique es muy importante, así que para creerte debes prometerlo con una promesa de meñique.

El toma mi meñique, mientras sonríe de forma dulce,

—Está bien, esta bien, te lo prometo, pero no llores niñita.

Niego,

—Te lo dije, no soy una niña.

El se encoge de hombros,

—Lo que tú digas.

Al llegar a casa fue un poco extraño, porque no regrese con mis padres, regrese con mi esposo, es extraño aún decir que tengo esposo.

Ethan deja mi equipaje en la habitación que supongo ahora es mi habitación, el se dirige a su oficina, llamo a mis padres para decirles que ya llegamos a casa, mamá rápidamente contesta la llamada,

—Hola Aurora, ¿cómo te fue en el viaje? Viendo sus fotos, puedo asegurar que se divirtieron mucho.

Sonrió al recordar nuestro viaje,

—¿cómo has estado mamá?¿cómo está papá? El viaje fue muy lindo, Ethan y yo logramos llevarnos mejor.

Ella suspira,

—Me hace muy feliz escuchar que Ethan y tú se llevan mejor, tu padre y yo, no hemos estado muy bien, las amenazas no han parado, pero Chris ha comenzado a ayudarnos, aún no conocemos quien las envía, pero pronto lo sabremos.

Me siento en la cama de mi habitación,

—Mamá todo saldrá bien, yo también haré lo posible por ayudarlos, mamá creo que irte de viaje con papá ayudaría a que se relajen.

Mamá se queda un minuto en silencio y dice,

—Sabes, tienes razón, tu padre y yo necesitamos relajarnos, deberíamos viajar y olvidarnos un poco de todo esto.—Ella habla emocionada, pero luego suspira y dice,

—Pero con todo esto que está pasando, no tenemos quien se encargue de los restaurantes, no podemos confiar en nadie.

Aun no debo volver a mi empresa, podría encargarme de los restaurantes por algunas semanas,

—Sabes que mamá, yo me encargaré de los restaurantes por algunas semanas, mi empresa puede estar sin mi un tiempo, dejare todo en manos de Martha.

—¿Estás segura Aurora? Los restaurantes no son muy fácil de manejar.—Dice algo preocupada.

—No te preocupes por mi, yo me encargo de una empresa de moda por mi misma, creo que puedo con los restaurantes.—Digo con mucha confianza.

Mamá duda por un momento,

—Hablaré con tu padre, si necesitas ayuda puedes llamarnos y regresaremos de inmediato.

—Si mamá, no te preocupes, tienes a una hija muy capaz.—Digo sonriendo.

Mamá ríe,

—Lo sé, mi hija es la mejor.

Antes de poder responder, escucho que alguien toca la puerta de mi habitación,

—Espera un momento mamá.

—Aurora, necesito que te vistas formal, saldremos a un evento.—Dice Ethan al otro lado de la puerta.

Termino la llamada,

—Te llamaré luego, te amo.

Abro la puerta de mi habitación, veo que Ethan me ve con el ceño frunció,

—¿Qué sucede?—Pregunto confundida.

El solo niega,

—En la empresa tendremos un evento, necesito que te veas presentable.

Sonrió,

—Está bien, ¿a qué horas saldremos de aquí?

El me da la espalda,

—En dos horas.

¿Por que de pronto es tan frío? Lo sigo y pregunto curiosa,

—¿Te encuentras bien? Estás un tanto extraño.

El pone sus ojos en blanco,

—No deberías terminar las llamadas por mi, nuestra relación es falsa.

Ahora estoy más confundida que antes,

—Estás molesto porque termine la llamada, entonces, ¿te haría feliz que hable por teléfono mientras tú me hablas?

El niega,

—Sabes que, olvídalo.

Tomo mi celular,

—No si te hace feliz llamaré a mamá justo ahora.

—¿Tu madre?—Pregunta confundido.

Asiento,

—Si, hablaba con mi madre.

El se sonroja y me da la espalda,

—Continúa, debo cambiar de ropa.

Acabo de comprender lo que sucedió, Ethan creía que hablaba con un chico, lo sigo y digo molestándolo,

—¿Estás celoso?

El se pone serio,

—¿Por qué estaría celoso de tu madre?

Me acerco a su rostro y lo veo fijamente a los ojos, esos ojos grises que atraparían a cualquier chica,

—Quiero que me digas a la cara, ¿realmente no estás celoso?

El acerca su rostro al mío, me ve fijamente a los ojos y dice con su voz más ronca de lo habitual,

—No, no estoy celoso, la persona que te interese, le haré saber que estás casada.

Mis mejillas se sonrojan, ¿por qué esta tan cerca de mi? Puedo sentir su respiración, mi corazón está acelerado, lo alejo con mis manos y digo sonriendo, para disimular mi nerviosismo,

—Espero que no seas celoso, porque nuestra relación es falsa, debo ir a vestirme.—Termino y salgo corriendo a mi habitación, cierro la puerta, llevo mis manos a mi pecho, mientras me deslizo hasta el suelo, ¿Qué me pasa? Me prometí no enamorarme de Ethan.