XLII

-Hola Unnie ¿Cómo estás?- su tono de voz volvió a hacer ese amable que usaba los primeros días, me quedo viendo al enfermero que la acompaña.

-¿Min Re? – ellos caminan hasta uno de los muebles, ella se sienta mientras que el enfermero se queda parado al lado de ella como a la espera de algo - ¿Cómo te sientes?- pregunto con cuidado, no sea que se le te por atacarme.

-Bien Unnie – ella baja la mirada – Ayer me entere de lo sucedió, no sabía que mi padre era esa clase de persona-

-Lo lamento mucho Min Re, yo real...-

-¿Por qué lo lamentas? Él fue quien me dejo aquí encerrada, no usted - ¿Ah?

-¿Perdón?- creo que no estamos hablando lo mismo.

-Mi padre me dejo aquí sola, me dijo que se iba de viaje, que cuando regresara nos veríamos de nuevo – las alarmas de mi cabeza se encienden, algo no está bien.

-¿Cuándo te dijo eso?-

-Ayer por teléfono –

-¿Tu padre te llamo ayer?- asiente - ¿Estas segura?-

-Si unnie, dijo que lo de mi madre fue muy duro y que realmente necesita estar solo y lejos – esto no puede ser.

-¿Dónde está la Doctora Yong? –

-Debe de estar en su consultorio – me paro de la cama y tomo el atril.

-Discúlpenme, debo de ir a hablar con ella – estoy por llegar a la puerta cuando vuelve a hablar.

-Vayamos por un paseo detective, nuestro último paseo – la sangre se me congela en las venas, volteo a verla mientras el cuerpo me tiembla.

-¿Qué acabas de decir?-

-Qué tenga un buen paseo detective, un...-

-Eso no fue lo que dijiste Min Re, repite lo que dijiste favor –

-Tenga un buen paseo detective, un buen paseo, ¿Qué escucho?- esta niña tiene que estar jugando con mi mente.

-Por favor llévela de regreso a su habitación – le digo al enfermero que está a su lado.

-Si detective Kim – el hace una reverencia y le coloca una mano en el hombro – Joven Min Re, se acabó el paseo – ella se coloca de pie y camina junto al enfermero.

-Adiós unnie – su sonrisa es tan extraña.

Salen de la habitación y me siento pérdida y desubicada.

-¿Qué acaba de pasar? – no creo ser capaz de salir caminando, tengo miedo. Busco el celular que había dejado en la cama y marco el número de Mi Sung.

-¿Nat?-

-Necesito que vengas, por favor- me empiezo a morder el dedo pulgar.

-¿Qué paso? ¿Estás bien?-

-Min Re estuvo aquí, y si, o no, no sé, por favor ven –

-Voy para allá - cuelga la llamada y yo dejo el celular en la cama, empezó a caminar de un lado al otro, parezco animal enjaulado.

-Toc Toc – brinco y doy un grito mientras coloco mi mano en el pecho - ¿Estas bien? –

-No, me asustaste – el camino hasta donde estoy – Min Re estuvo aquí – él me toma por los hombros y me analiza completo.

-¿Min Re? – Asiento - ¿Te hizo algo?-

-No es lo que hizo, si no lo que dijo –

-Nat...- alguien carraspea y yo miro atrás de do Hyun y no creo lo que ven mis ojos, grito de emoción.

-NO PUEDE SER, KWAN HEE ESTAS EN COREA – Do Hyun se quita del medio y las dos caminamos y nos abrazamos en cuento nos encontramos, para mi ella es mi hermana mayor – Dios, ¿Cuándo llegaste a Corea?-

-Llegue ayer por la mañana, Dios Nat que bueno es verte de nuevo – me abraza con más fuerza – Do Hyun me conto lo del accidente, me alegro que este bien – se aleja y me mira mientras me acomoda el cabello.

-¿Por qué no me habías dicho?- le reclamo – Si tranquila, estoy bien – la miro completa – Estas hermosa, Italia te cayo de maravilla, estas hermosa como siempre – su acento sigue intacto y eso me alegra.

-Porque te quería dar una sorpresa y bueno ayer llegue directo a resolver unas cosas – ¿es que esta mujer no le afecta el cambio de horario?

-¿Cuánto tiempo te vas a quedar? Dime que por un largo pero muy largo tiempo – ella sonríe.

-Me mudo de regreso a Corea Nat, vuelvo a casa –

-¡¿QUÉ?!-

-Sí, de hecho voy a trabajar aquí, seré el nuevo jefe de psiquiatría-

-¿Quién será el jefe de psiquiatría?- ella voltea a ver a la dueña de esa voz.

-Young Mi Sung te luce la bata – mi amiga la ve por un momento, incluso inclina la cabeza y cuando entiende quien es abre los ojos, tanto que siento que se le van a salir.

-Oh por Dios, LEE KWAN HEE ESTAS EN COREA – ellas se abrazan tan cariñosamente, ¿será que kwan ya sabe?

-¿Cuándo llegaste? ¿Cómo que jefe de psiquiatría?-

-Llegue ayer, y si, seré la jefe de psiquiatría, en la clínica que estaba en Italia llego el comunicado que estaban haciendo evoluciones para ese puesto acá, y aplique bueno, quede –

- Ahora si estamos completos – sonrió feliz a las palabras de mi mejor amigo.

-¿Cuándo empiezas?- le pregunto.

-En enero, el contrato es para empezar con el nuevo año, así que solo pedí en mi trabajo que me dieran este mes de vacaciones ya que no tengo unas desde que estudio, desde Italia fui arreglando lo de la casa y unos papeles –