The Girly

23. Graduación: Parte 1.

Parte 1

“Es tiempo de decir adiós y de decir la verdad…”

Y llegó el día de graduación, finalmente saldríamos de esa escuela. Lo había deseado por un largo tiempo, pero después ya no lo sentía así.

En la mañana teníamos la ceremonia formal, en un salón de eventos lindo y adornado con candelabros brillosos; a ella debíamos ir con nuestro uniformes escolares viejos y rasgados por estos tres años, un par de familiares podían acompañarnos y se sentarían en la parte trasera mientras enfrente solo se sentaban los alumnos para subir al estrado cuando fueran nombrados. Después de odiar ese uniforme, me di cuenta mientras me lo ponía que tal vez no se veía tan mal; junto a mi closet estaba el vestido que me pondría en la noche para la fiesta de graduación, uno de rojo carmesí largo hasta los tobillos que moría por usar, aunque muriera de pena por el escote trasero. Todos estábamos más emocionados por la fiesta de graduación para poder usar nuestra ropa genial que por la ceremonia principal.

Estaba afuera del salón de eventos a punto de entrar, me acompañaban Lizzy y Hanna, esta última no dejaba de quejarse por tener que haberse quitado el maquillaje por orden de la directora mientras que Lizzy y yo solo nos mirábamos con una sonrisita cómplice.

Una profesora se acercó a Halsey y Annie, luego se paró frente a toda nuestra clase para darnos un aviso que al final no presté atención porque Halsey se acercó apurada a nosotras.

—Debo ir a cambiarme para la presentación —nos dijo rápido—, si preguntan por mí y Annie díganles eso por favor.

—Seguro.

Había olvidado que Annie y Halsey estuvieron ensayando por días al igual que Garret y Tom para presentar junto con otros alumnos un número de baile.

—Ya hay que entrar, andando.

— ¡Moriré de pena si me equivoco! —Mascullé preocupada— Siempre pierdo el paso.

—Ni que lo digas, la maestra de danza lo puede confirmar —bromeó Aria riéndose.

—Ja-ja, que graciosa.

Por alguna razón jamás había podido tener una buena coordinación motriz, eso hizo que en los ensayos de bailes que nos asignaba para su clase yo siempre me equivocase y que muriera de nervios al tener que pasar delante de ella.

Vi a Spencer frente a mí apretándose constantemente los puños junto a sus caderas.

— ¿Estás bien? —Le susurré— Ya ni yo que perdí el paso hace un metro de la entrada estoy así.

Intenté hacer una broma sobre mi desgracia personal para animarla, pero no funcionó.

—No quiero que mi madre me vea con Jeremy —me susurró muy bajo—. El otro día me dijo que vio a un chico bebiendo cerca de nuestra calle y me advirtió que no saliera con un tipo así…

—Déjame adivinar, el tipo con el alcohol era Jeremy.

Arrugó su frente y juntó sus labios para hacer una mueca que mostraba lo preocupada y quizá un tanto desilusionada con la situación.

—No planeas ocultarle tu relación siempre, ¿verdad? —La miré seria— ¿Y si duran diez años? ¿Piensas que olvidará su rostro en la calle?

—Tal vez…

Una de las profesoras que caminaban junto a la larga fila de alumnos entrando, nos vio hablando y nos calló molesta así que obedecimos…hasta que la perdimos al llegar a nuestros asientos.

— ¿Qué pasó con Peter? —Me preguntó intrigada— Le gustas, ¿él sabe que piensas lo mismo de él?

Entonces fui yo quien la callé para que no hablara de eso tan alto.

—Imagino que leyó la nota adhesiva que dejé en su libro, pero no me ha dicho nada.

—Aún.

—No me alientes —regañé abatida—. Peter es un chico agradable, en comparación del resto de chicos con los que me he relacionado él parece decente…además es mejor amigo de Emily, no creo que sea amiga de un patán, pero…

Desde hacía un par de semanas venía pasando más tiempo con Peter y empecé a creer que quizá me gustaba; él era un buen amigo y compañero de mi clase, también conocía a Ben así que él fue algo así como intermediario entre ambos, en ocasiones me daba consejos cuando tenía algún lío amoroso y me hacía reír cuando me veía desanimada, además como dije era el mejor amigo de Emily por lo que pasaba más tiempo con nosotras que el resto de chicos a excepción de Garret. Teniendo todo eso en cuenta me atreví a escribir una nota y dejarla pegada a su libro de historia el último día de clases, su mejor amigo Luka, fue quien mencionó que yo le gustaba a Peter y eso lo escuché accidentalmente el día anterior a la nota.

—Creo que te está viendo. —Señaló disimuladamente hacia atrás.

Miré de reojo y se me cortó la respiración cuando crucé la mirada con Peter que estaba a dos filas de asientos atrás de mí.

—Demonios, ¿hice bien en decirle? —Regresé mi vista a mi amiga— Quizá Luka bromeaba…

—Es Luka, no Sid o Tom, ni Freddie…tampoco Garret —mencionó seria—, Luka no bromearía con eso, sino pregúntale a Emily.

Luka era más serio y reservado en cuanto a sentimientos personales de lo que eran esos chicos, por eso su confesión amorosa a Emily fue importante para ambos, aunque no haya tenido un final.

—Sé que tienes miedo, Aly. —Me miró fijo—. Tus relaciones pasadas no acabaron bien, tampoco tus flirteos —añadió jocosa—, dejaste de demostrar tu afecto por miedo a que te rechacen como Caleb, porque crees que jugarán contigo de nuevo como lo hizo Edward o Barry…tal vez Tom o porque crees que no mereces ser feliz y te pierdes esa oportunidad hasta que terminas con el corazón roto como con Ben…

Era una suerte no haber usado maquillaje en ese momento porque sus palabras me causaron un nudo en la garganta, no sabía que me dolía más de ese momento, si lo que Spencer decía fuera cierto o que después de ese día quizá jamás volvería a tener a una amiga como ella.

—Aly, tomas el amor que crees que deberías merecer y es muy poco a lo que es en verdad porque tú mereces todo el amor del mundo. —Me sonrió y apretó mi mano con las suyas—. No tengas miedo a sentir, dices que Hanna lo tiene y por eso es tan fría, pero…¿no te referías a ti también?




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