Veinticuatro

Micaela

Canción: Bring Me To Life / Evanescense
 

Me sentía bien las cosas con Xavier están avanzando, si hace 10 años me la iba a jugar por lo que sea que teníamos en ese momento, hoy me sentía más atraída a él y obvio iba como volador sin palo a apostarle a una relación más estable y madura con él, sin miedos y sin ataduras de contratos ni nada, hoy somos él, yo y un terremotico andante.

No había recibido llamadas de auxilio de Xavier, eso quiere decir que la están pasando bien, y la chiqui terremotico se estaba portando a la altura; después de almuerzo me tome un descanso, estaba todo limpio y las vitrinas surtidas con todo tipo de pasteles, postres, galletas y de todo un poco, me senté con Gina a tomarme un café. La tarde paso con una tranquilidad pasmosa, rara para el sector.

Gina se fue temprano porque tenía que reunirse con unos compañeros y como no había movimiento en el local, se fue y me quede sola, sopese ir hasta la empresa de Xavier, pero me eche para atrás, no teníamos nada formal, aparte me daba pena.

Me voy a verificar en la parte donde tenemos los hornos, y siento que se quiebra los vidrios del ventanal, salgo y veo unos chicos en motocicletas con bates y piedras, lanzándolas hacia el local, uno de ellos me ve y se baja y entra por los ventanales rotos, trato de esconderme en las cocinas de la parte de atrás, siento que están reventando todo, las vitrinas, los mostradores, todo; ahora vienen hacia las cocinas, también hacen lo mismo, busco mi teléfono y recuerdo que lo deje en el mostrador, siento que me jalan del cabello

- ¡La encontré! – se ríen de como me saca del cabello-

- ¡No les he hecho nada! ... ¡AYUDA! – me da una patada en el costado –

- Cállate mujer – no me interesa y vuelvo a gritar -

- ¡AYUDA!

Me jala hacia el área de mostradores, y ahí me tiran en medio de los vidrios y los pasteles destrozados, me da con el bate en los costados y por último me da con algo que tenía en la mano en el rostro, sentía algo caliente que me corría por la cara

- Vuelve a desaparecer Micaela Mendoza

No levante la vista, me quedé quieta porque sentía que si me movía los vidrios se clavaban más en mis brazos y piernas, cuando sentía que no había nadie, levante un poco la cabeza, me dolía horrores, percibí que había anochecido y escuchaba voces, pero lejanas; trate de aclarar la vista y la ultimo que vi fue la flor que me regaló Xavier intacta, con esa imagen en mi cabeza caí en un pozo negro.

Siento movimientos de aquí para allá, trate de moverme y no puedo, abro los ojos y voy en una ambulancia, distingo el sonido tan característico y la velocidad que lleva, trató otra vez de moverme y un paramédico me dice "quieta, ya vamos a llegar" cierro los ojos y siento que frena y me sacan y corren por toda la estancia y por lo que veo es un hospital. Me pasan de camilla y ahora siento el dolor en mis costados, las costillas las tengo bastante resentidas, pero estoy consciente y alerta a cualquier movimiento extraño.

Me inyectaron algo y vuelvo a caer en un sueño, pero ahora lo sentía más tranquilo, aunque luche caí otra vez.

Trato de moverme y ahora si puedo, miro hacia todos lados y escucho a la gente del hospital conversar y la gente quejarse, estoy en el área de urgencias, una voz me llama la atención, es Xavier, me quedo quieta y entra hacia el área donde estoy al verme se le iluminan los ojos.

- Bonita ... - se acerca, me toma del rostro y me da un beso en las comisuras de los labios –

- ¿Martina dónde esta?

- Esta con Carmen en mi casa, ¿Cómo te sientes? – trato de sentarme y no puedo –

- Me duele todo...

- Allá afuera esta la policía, quieren saber que paso, la pastelería quedó totalmente destruida – asiento-

- No fue un robo, el dinero no lo tocaron, fueron a destruir todo y a dejarme una advertencia – cierro los ojos – que desaparezca otra vez

Se toma el rostro con desesperación, tanto él como yo sabemos quien fue, estamos seguros, en su rostro no lo logró descifrar hay miles de expresiones, dolor, rabia impotencia, con todo el dolor que pueda tener me siento en la camilla

- Quiero denunciar ... hace años me llene de miedo y actúe por ese mismo miedo, hoy no quiero y no puedo dejarme llevar por el, tengo a dos personas que amo y no las voy a perder – me abraza con cuidado -

- Vamos a denunciar ... no estas sola en esto; menos mal que la niña estaba conmigo, no quiero imaginarme estando ustedes dos ahí solas

Entran los oficiales y repito lo que le dije a Xavier y relato lo que pasó en años atrás, con ellos mismos, observo a Xavier esta tenso y me duele que pase por esto, porque es su familia directa, sus padres.

Carmen llega y él se va para la casa y verificar que todo esté bien, me dicen que en unas horas me dan de alta del hospital, estoy en términos generales bien, golpes en los costados, las costillas están resentidas, tengo un traumatismo grande en esa área, me ponen como una venda para aliviar el dolor, el diagnóstico es fisura en las costillas, 6 semanas de incapacidad y quietud total en casa, en el rostro fue un golpe certero, tenía una herida en el cuero cabelludo, pero sanara con los días, eso si me iba a quedar por días los moretones por todo el cuerpo.

Carmen camina de un lado a otro, me entrega una frazada grande y vuelve a caminar de un lado a otro

- ¿Qué te pasa Carmen? – me mira y se está comiendo las uñas –

- Se metieron también en la casa y destruyeron todo, no robaron nada

- Ay no ... esa señora que se cree, no me va doblegar, esta vez no Carmen, no me va a quitar mi familia, esta vez no – me quiebro y lloro por todo lo que me ha ocurrido –

Los oficiales hacen aparición otra vez y Carmen es la que habla con ellos, mandan a dos oficiales a la casa a corroborar todo lo que esta pasando.