Destiny Moonlight

Destiny Moonlight

CHAPITRE 43...

 

Me levante de golpe al no sentir nada bajo mío, sino más bien el suelo frio y rustico de aquel observatorio, aparte de tener mi cabeza sobe el brazo de Ashton Clark.

-No fuimos casa- musite casi sin poder creerlo llevándome la mano a los labios.

Pero divisando mejor el lugar pude notar los estuches de las golosinas que comimos anoche, las botanas a medio abrir, seguramente dañadas del aire.

Sacudí mi pantalón maldiciendo por lo bajo, Ashton no se había molestado en levantarme para decirme quera hora de irnos, quería reprocharle que no estuvo bien lo que hicimos, que nuestro deber era regresar a casa, antes de que cualquier extraño se le ocurriera venir a este lugar y nos encontrara en esta situación, pero.... Aquella noche en el que las estrellas nos brindaron su resplandor, Ashton Clark, se veía realmente feliz. Suspire pesadamente dándome cuenta que diciendo las contradicciones y las cosas que no debimos hacer estaba de más, al fin y al cabo, lo hicimos, juntos, nos divertimos y fuimos felices por esa noche.

Tanteé a un lado de Ashton adivinando donde debía estar el celular, pero sonreí triunfante cuando lo sentí tomándolo y sentándome a un lado de Ashton, quien permanecía profundamente dormido. Siendo las seis y media... seis...y media...

Han sentido como tu rostro palidece y olvidas como respirar, eso.... Estaba sucediendo, volví a mirar la pantalla del celular con la esperanza de que lo que hubiera visto no fuera una broma... Pero las cosas no eran así, nada estaba en total control, tenía tan solo media hora y cinco minutos para llegar a mi instituto.

-Ashton!- exclame en total desesperación.

Lo sacudí tan fuerte que tuve miedo de que le hubiera golpeado, pero, cuando despertó le grité prácticamente en la cara que estábamos al tope para llegar tarde al instituto y que no era de muy buen gusto llegar tarde en su primer día de clases, pero en aquellas penumbras casi deslumbrantes por los recientes rayos del sol, hicieron que lo que dije no valiera nada, sin embargo, una sonrisa deslumbro el rostro de Ashton y sin más tiempo tomo mi mano y corrió conmigo afuera de aquel observatorio.

Me zafe de golpe al notar que no me había escuchado totalmente enfadada con el ceño ligeramente fruncido.

-crees que esto es un juego, Ashton llegaremos tarde al instituto.... - pero en cuanto termine la oración, la brisa se tornó a nuestro alrededor y por inercia me allegue más a Ashton.

Finalmente, cuando paro este, los rayos de sol nos ilumino, tocando nuestro rostro con delicadeza y dando tirones de rayos solares sobre el pequeño pueblo de Jackson.

-es hermoso- musite casi sin poder creerlo.

-me alegra estar aquí contigo- mascullo de manera ronca, posando su brazo sobre mis hombros y acercándome a él.

-siento... haberte gritado-.

-lo hiciste por mi bien, Alexa, lo hiciste porque es nuestro deber- y aunque me costara creerlo, sus ojos deslumbraron como rubíes en pleno descubrimiento, como aquella mañana cálida y dulce, como la vista de un gran descubrimiento... sus ojos eran como un nuevo descubrimiento.

Las carreteras en Jackson nunca eran tan transitadas, solamente por el bus que recogía a los estudiantes, los autos de los trabajadores de las tiendas o almacenes y por supuesto las bicicletas de los empleados del super mercado, quienes a toda hora transitaban ya fuera de ida o de regreso.

-estaremos ahí en menos de diez minutos- alentó Ashton con seguridad, teniendo en cuenta que era de mañana.

-ni siquiera me he podido cepillar los dientes...-musite para mí misma.

-dentro de las bolsas que traje ahí unos dos cepillos usa cualquiera de los dos, cuando estemos en el instituto cepíllate- miré hacia atrás casi sin poder creerlo.

¿Acaso... él había planeado todo esto? -

-así que... sabias que nos sucedería esto...- acerté con una sonrisa de lado.

-puede ser...- pero sin quitar la vista de la carretera, tanteo su bolsillo en busca de algo que desconocía- toma esto- sin embargo, lo tiro en mi dirección.

Y cuando por fin lo tuve en mis manos divisé una caja de menta.

-insinúas que tengo mal aliento? - cuestione con una ceja alzada.

-tanto como yo- indico satisfecho con su respuesta.

No retuve más conversación con Ashton y me limite a mirar el paisaje de Jackson, desde sus verdes árboles y pinos, hasta sus comerciales en la calle cuarta de Houston, sonreí inconscientemente recordando aquel momento juntos, como las calles de Nueva Orleans parecían tomar formas en nuestro alrededor.

Y cuando finalmente llegamos al instituto faltaba tan solo diez minutos para entrar o al menos eso había dicho Ashton. Con el paso apurado tome camino dentro del instituto sin importar quien o que estuviera viéndome.

-Alexa... espera- tomo mi antebrazo y me obligo a parar de mi trote.

-que sucede ahora? -.

-mi horario, mi número de casillero, he olvidado absolutamente todo- palideció frente a mi llevándose sus manos al rostro.

-Clark, cálmate, puedes ir a casa a buscarlo, le explicare al director tu demora- indique.

-harías eso... por mí? - extraño tomo mis manos y sonrió dulcemente.

-haría cualquier cosa por ti Clark, lo sabes- zafe mis manos de las suyas y las sacudí, con el ceño levemente fruncido.




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