FINAL

Nos encontramos en el lugar que me citó, llego primero y sigo sin poder contener las lágrimas desde que salí para encontrarme con elos

Siento un nudo que me ata la garganta, no me sale la voz, solo lloro, tengo la cara roja de tanto llorar, no logro soportar el peso de la presión que está en mi pecho, araño mis brazos fruto de la frustración, me halo el pelo y pataleo, caigo de rodilla, en el piso me hago un ovillo y grito el nombre de Carmen

Tengo el corazón en la boca, no logro distinguir que es lo que me empaña la cara, sin son lágrimas, sudor o mocos, me aferro fuertemente a mi pecho, quiero a través de la piel arrancarlo

– ¡DEJA DE SENTIR! -

me ordeno, no doy para más, la ira me avasalla y me desquito con las flores que traigo para Carmen, los aprietos, las estrello contra lo que tengo frente a mí, la tiro al piso y las pisoteo, pero nada me quita el dolor

Sin que las lágrimas dejen de salir, la falta de oxígeno me hace tomar grandes bocanadas de aire, siento como me pican los ojos la nariz y la siento llegar tras de mi

-Carmen-

-Key-

-amor, me arrastro gateando hacia ella, me aferro de su cintura y en silencio sigo llorando, no puedo detenerme, trato de decir palabras, pero el llanto me lo impide, ella trata de calmarme acariciando mi cabello

-Te amo Carmen-

Sigue en silencio, limitándose solo a acariciar mi cabello, me aferro más a ella apretando sus caderas

-no me dejes amor-

Sigue en silencio

Pasan minutos, horas, me atrevo a pensar que días, sigo aferrado a ella más que al oxigeno que me permite respirar

-no me dejes Carmen-

-debo hacerlo-

Se me comprime el pecho, algo me obstruye la garganta, siento que me voy a desmayar, no puedo respirar, pruebo el sabor de mis lágrimas y la aprieto aún más hacia mi

-ven- me dice, vamos a sentarnos debemos hablar-

Me rehúso a ver su rostro, no puedo, no quiero, me voy a partir si lo hago, niego con la cabeza, mientras las lágrimas siguen inundando mi rostro, las quiero contener, pero no puedo, quiero parecer un hombre firme, fuerte, listo para lo que debemos hablar, pero me es imposible, la amo tanto, no la puedo perder, no la dejaré ir

-Key…- vuelvo a negar

Hace el intento de apartarme para conectar su mirada a la mía, verla a los ojos será mi fin

me aparto de ella sentándome, abrazando mis piernas y enterrando mi cara en ella, me niego a tener contacto visual

La escucho suspirar y sentarse a mi lado

-No te quiero escuchar, vete y déjame con mi dolor-

-no me puedo ir, si no me dejas hacerlo-

mis hombros empiezan a temblar, más lagrimas llegan, mis pantalones se mojan y siento sus manos acariciar mi pelo y mi espalda, intento controlar la respiración, pero nada logra detener los llantos que se avecinan tomando largas bocanadas de aire, intento hablar, pero los sollozos no me dejan, mi respiración entrecortada me obliga a respirar por la boca.

-es que te amo tanto Carmen- logro decir, para luego con una de mis manos cubrir mi boca para que no me escuche llorar

-lo sé, pero, aun así, debo irme, debes dejarme ir-

-también lo sé, pero no puedo, no quiero-

-Key-

-déjame morir de dolor- le grito con rabia -sin ti no puedo vivir-

-estas aquí porque sabes que puedes, solo quieres que sea yo quien te lo diga-

-Key, mírame-

Niego, no puedo y las lágrimas tampoco me dejaran hacerlo

-Key, mírame-

-No puedo Carmen-

-Key mírame-

Me tomo mi tiempo, hago ejercicio de respiración, pero cada vez que avanzo me golpean más llantos, poco a poco voy levantando la cabeza y soltando los brazos de mi pierna, me logro calmar y la miro

-Te amo Key- me dice y me sonríe

-Yo te amo más Carmen-, muerdo mis labios evitando el llanto, pero las lágrimas salen solas, esas no las puedo controlar

-me iré y quiero llevarme contigo ese dolor, necesito que me lo entregues para irme en paz-

Sabía que llegaría este momento y por más que he intentado estar preparado, no lo he podido hacer. Logro calmar el llanto que me agobia, manteniendo la vista distorsionada por las lágrimas, fija en ella

Me sonríe

 – vez lo que acabo de hacer-

Asiento -sonreíste-

-es lo que quiero que hagas, tu risa es mi sol y es así como quiero que me recuerdes feliz, porque es lo que siempre fui mientras estuve a tu lado-

Me besa

- ¿probaste? -

Asiento

-es el sabor que quiero que sustituya el sabor amargo de tu tristeza-