Pies Descalzos, Sueños Blancos

Cartas

Enero 02 del 2003

Para comenzar a contarte todo, me gustaría poder resumirlo con estas pequeñas cartas que pronto te hare llegar.

Iniciemos por esto; Han pasado aproximadamente dos meses desde que Gonzalo y yo llegamos a la ciudad de México en busca de una mejor vida, teniendo como meta encontrar una meta de vida, más que nada salir de la mierda en la que nos acabamos de meter.

Estaría contándote todo con detalle, pero para no hacerte el cuento largo, me conseguí a una pareja de dieciséis años, que en realidad parece de seis, que ha sido mi rescate en la vida. Me encantaría que algún día lo llegaras a conocer, y lo vas a hacer, espero de todo corazón que lo aceptes por todas sus virtudes que puede llegar a tener.

Sobre el tema de la casa, ha tenido sus remodelaciones, ya no son solos dos cuartos vacíos, ya puedes encontrar una mesa, sillas, un mueble que ocupamos para guardar cosas para la cocina improvisada que hicimos, habíamos ido a una venta de garaje donde encontramos cosas muy buenas a bajos precios, según nos había contado la señora que estaba vendiendo todo, lo hacía con el propósito de sacar dinero porque un familiar suyo estaba en el hospital.

Después de toda la travesía, construimos un lugar donde Gonzalo y yo estuvimos realmente cómodos, cosa que, aunque suene fácil fue una tremenda pelea llena de corajes y risas combinadas, las cosas como yo las hago son muy diferentes a como las hace mi pareja, cosa que nos provocó muchas discusiones, así como muchos sermones por el lado de Esperanza.

Esperanza ha sido otro pilar para nuestra vida, es una amable señora que nos ha brindado un cuarto bajo una renta casi regalada para que ambos pudiéramos construir algo a que llamar hogar, espero que pronto la conozcas, así podrás darte cuenta de que las personas que me rodean no son tan malas, te morirías d un infarto o un coraje si te contara lo que paso con el inútil de Nick.

Saltando al tema de Nick, quiero que sepas perfectamente que nunca me afecto como creí que me afectaría, realmente me sorprende la poca importancia que le he estado dando, las cosas se han estado yendo tan rápido que no me dan tiempo para sentarme y analizar todos los cambios que están pasando a mi alrededor.

Como última parte, quiero contarte sobre una bola de pelos que tuve que adoptar el dieciséis de noviembre, la llame luna, porque ha sido la compañía que siempre me está siguiendo cuando las cosas se vuelven oscuras, me acompaño cuando salí de casa, me siguió cuando escape de Nick, me guio a la escuela donde conocí a Gonzalo, me apoyo cuando Gonzalo y yo estuvimos varados en el parque ese mismo día, fue un nombre que, aunque suene muy común, para mi tiene gran significado.

Algún día te voy a contar todo en persona, yo sé que así será, espero que conozcas a todas estas personas que ahora me dan un orgullo al llamarlas familia, el apoyo que espere de la mía nunca lo tuve, pero el apoyo de quien menos espere fue el que más me lleno.

28 de Agosto del 2003

Lo que paso hace exactamente un año, sigue taladrándome la cabeza... si menciono el tema, ¿aún lo recordaras?, ¿recordaras todas las cosas que me dijiste? Todo lo que me lastimo, y todo lo que no me ha dejado avanzar al cien por ciento. Creo que, sin Gonzalo, todos los traumas seguirían conmigo, no solo los que tú me dejaste, sino los que me han surgido desde que salí de ese lugar. Tanto ha llegado el cariño que me ha entregado, que descubrí una nueva palabra para describirlo.

Zalamero, aquella persona que demuestra mucho cariño, hasta a veces de forma excesiva o empalagosa, muchas veces con la esperanza de conseguir algo, y vaya que Gonzalo lo logra. Aunque puede ser una forma de manipulación, no me importa si viene de la persona que amo. Regresando a lo principal de lo que te quería contar en esta carta, es que todo este año de no saber nada de ti me ha enseñado muchas buenas lecciones de vida, a trabajar, a ganarse las cosas, a chingarle por lo que quieres, por eso me emociona contarte que estaré muy pronto nuevamente de regreso a las aulas de la escuela.

Otro de los bastantes regalos que Gonzalo me dio por mi cumpleaños, fue una carta que me hacía saber que muy pronto estaré de regreso a la escuela, retomando mi carrera de laboratorista químico que tanto me gusto.

Sobre el tema de volverte a ver, no te preocupes, sigo teniendo en mente volver a casa, aun no sé cuándo lo hare, o si será pronto, pero lo que si tengo claro es que sea lo que sea que tenga que hacer para poderme reencontrar contigo, lo hare sin pensarlo, porque vamos, tanta falta me has hecho estos últimos días, que realmente me emociona la idea de volverte a contar mis días como cuando era niño.

Noviembre 14 del 2003

Sobra decir el significado de esta fecha, ¿Cómo olvidarla? Quizás tu no estés al tanto, pero este día voy a cumplir un año con mi media naranja, con mi sol en medio de la penumbra, con mi complemente espiritual... con todo eso cumplí un año, no solo de compartir una vida, sino de compartir un amor que hasta el momento se siente mutuo.

Un mundo sin él es difícil de imaginarlo, así que decidí hacer algo que como a él y como a mí me gustara, como te dije una vez, tenemos ideas muy distintas sobre estas cosas, a mí me gusta ir a un lugar más privado, como un parque o una habitación para poder hablar o pasar un buen rato, pero a él le gustan los restaurantes, los conciertos, los bailes o carnavales para pasar un momento agradable...ves cómo somos tan distintos.

Esta vez avise a mi trabajo que no iba a asistir, es muy raro que yo falte un día, desde que entre a trabajar, el único día que he faltado son los domingos, todos los días me he presentado puntual, sin reproche alguno, cosa que me ha servido para ganarme un aumento no hace mucho tiempo. Sin problema alguno me dijeron que si, todo estuvo a nuestro favor, pues Gonzalo también pidió su descanso, y como fue el sábado, a los dos nos dijeron que no nos presentáramos hasta el lunes en la mañana, vaya suerte que nos cargamos este día. El único problema que se presento fue el mesero del restaurante donde Gonzalo ya había hecho reservación, y tengo la palabra perfecta para describirlo.