Capitulo 25: Cristian

Me tienen agarradas las manos con una esposas mientras el policía me lleva a mi celda, no sé qué hare aquí pero me siento una mi****, no he matado a mi amigo y me siento mal porque lo involucre en esto pensando que no pasaría nada sin embargo ahora está muerto, cuando ya estamos en la celda el policía me quita las esposas para introducirme en el lugar que está muy oscuro, cierra la reja colocándole llave, lo único que puedo hallar de bueno aquí es que me toco solo, sino me hubiera metido en problemas.

Me siento en el suelo recostándome en la pared, me siento muy mal, dejo que las lágrimas salgan, extrañare mucho a mi amigo, a mi fiel amigo, en las buenas y en l malas me apoyo sin ningún problema, soy el culpable de todo esto, ahora me doy cuenta de tal peligrosos que son de matar a personas inocentes.

Me oculto en mis brazos dejando salir el llanto, Harrison fue un buen amigo cuando más lo necesitaba, no sé qué hare ahora sin poder verlo, solo Dios sabe cuándo saldré de aquí sino comprueban mi inocencia, aunque prefiero estar aquí ya que aunque yo no haya sido me siento muy mal que no quisiera regresar.

¡Carajo! ¿A quién engaño?

Extraño a Glenda, no sé cómo estará y sin duda debe estar asustada, como quisiera estar con ella y decirle que todo está bien, Liam me prometió que la cuidaría en su casa pero no es lo mismo cuando no puedo verla y decirle cuanto la necesito en estos momentos.

Y ahora estoy aquí cuando me prometí protegerla, lo peor de todo es que no se dé cuanto son capaces esas personas o esa persona, ¡Ni siquiera eso sabemos! Tengo pensar de una forma resolver esto, mi caso iniciara mañana con las pruebas necesarias, tuvo que ver alguien que entro antes que yo lo hiciera porque como yo lo analizo creo que lo asfixiaron, no miraba ninguna bala en ninguna parte de su cuerpo y la secretaria de Harrison no vio nada.

Todo me parece tan confuso y creo que las cosas no resultaran bien si no salgo de aquí, aun no sé si sobreviviré tantos días aquí, cuando los prisioneros marcan territorio no hay nadie que los detengan.

Hable por última vez con Liam pidiéndole que cuide de mi Glenda, se la dejo en sus manos, como quisiera verla y besarla; algo nos decía que disfrutáramos de aquel momento.

Solo espero que hallen pruebas de que yo no fue el causante de la muerte de mi amigo, como lo extrañare.

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Pasan las horas y apenas pude dormir, no sé qué horas serán, lo único que sé que ya llevo una noche, nos han dado el receso de ir a comer, la comida de prisión puede ser la peor, todos se me quedan viendo, sin duda porque soy el novato, cuando me dan la comida en una bandeja me voy a un asiento que está solo, empiezo a comer lo que veo que puede ser comida, miro solo mi plato, ya que puede ser peligroso mirar a todos.

Es ahí donde colocan una bandeja llena de comida encima de la mesa donde me encuentro no lo volteo a ver y solo observo cuando se sienta, este parece buscar problemas conmigo.

-¿Eres el novato cierto? – Pregunta quien sea el que está en frente de mí, no le contesto y sigo comiendo - ¿te comieron la lengua los ratones?

Prosigo comiendo esperando que se retire de aquí, conozco de estas cosas, se demasiado porque he estado rodeado de gente mala, sin embargo no debo confiarme, este al ver que no le contesto agarra la bandeja de comida la que tenía y la lanza al suelo, solo miro a donde callo.

-¡Te estoy hablando – grita enojado, me levanto lentamente para alcanzar la bandeja que cayó al suelo es ahí cuando el sujeto me agarra y me golpea la cara con un golpe de su nudillo, caí al suelo limpiándome el labio donde la sangre se hacía presente, miro desafiante al hombre quien me golpeo este solo son ríe - ¿Estás enojado?

Observo arriba donde los policías se encuentran y no hacen nada contra esto, solo intento levantarme mientras todos los prisioneros me observan, escupo y arreglo mi ropa, estaba decido a irme cuando este se acerca de nuevo e intenta empujarme pero lo esquivo en seguida para luego darle una patada en su trasero.

-Ohh – exclamaron todos al ver lo que hice, el hombre enfurecido se levanta en seguida para golpearme pero soy más rápido para esquivarlo agarrar su mano y doblarla para colocarla atrás de su espalda - ¡Suéltame bastardo!

En seguida lo hago pero no porque él me lo ordeno, la policía estaba ahí, agarraron al hombre para que no viniera hacia a mí a darme duro, de repente atrás de los dos policías viene un hombre y no logro conocerlo.

-¿Cristian Walker? – Pregunta el hombre, en seguida asiento dando a conocer que soy yo – venga conmigo.

Hago caso cuando se da la vuelta y camina, los dos policías se van atrás de mí para que no me atreva a huir, sin embargo no lo haría, si saldré de aquí tengo que ganármelos a todos de que no soy malo, sin embargo se dieron cuenta que lo único que hice fue defenderme, aún seguimos caminando hasta que llegamos a un habitación donde me piden que entre con este hombre, el señor se sienta en una silla que está a la par de una mesa.

-Te puedes sentar – me ofrece, le hago caso sentándome mirándolo en frente de él, sonríe como si lo que pasa estuviese muy bien – sabes defenderte.

-Solo cuando lo necesito – responde sin ponerle tanta importancia - ¿viene a interrogarme?

-Asi es…soy el detective Jacob, estoy a cargo de tu caso, quiero interrogarte… pero antes quiero preguntarte – dice cuando une sus manos en la mesa - ¿te crees inocente?

-Dependiendo de las pruebas – respondo con inteligencia – lo único que puedo decir es que es mi amigo… - digo cortando la voz de solo recordar que murió – lo quería bastante y… no sería capaz de hacerle eso.