Capítulo 18

Abrió sus ojos en medio de la oscuridad, por un instante creyó que solo era una consciencia en medio de la nada, en medio de una profunda oscuridad, hasta que el dolor fue recobrando poco a poco su lugar hasta hacerle saber que aún conservaba su cuerpo y como dolía, cada musculo y articulación y sobretodo su mano izquierda, por un segundo se preguntó en donde estaba, hasta que recordó lo que había pasado minutos antes, tal vez horas, quizás días, no podía estar seguro de nada; respiraba y (de momento) para él eso era una buena señal. Yacía en el suelo, según creía, trató de moverse lentamente, de manera que no le doliera tanto, sin embargo no obtuvo el resultado deseado y al mover sus brazos, pesaron como si cargase toneladas, pensó que era por el dolor de su cuerpo, luego se percató de que estaba encadenado, nada bueno le presagiaba eso…