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Peyton

Mientras hablábamos esperando la comida había sonado el teléfono que me había comprado recientemente, aun nadie sabía de ese teléfono. Lo bueno es que tenía el mismo sonido que los otros dos teléfonos que nadie noto la diferencia.

–Si me disculpan –dije levantándome de la mesa retirándome, ellos asintieron. Rápidamente me perdí entre la gente. Había sentido las miradas de todos cuando me levante, en especial la de Bruno y Scott.

–Preston –conteste modo saludo.

–Peyton soy Matt –hablo desde la otra línea – Tengo ya información –dijo orgulloso de su logro. Me sorprendí, no esperaba eso tan rápido.

–El viernes paso por tu casa Matty –respondí tratando de soñar normal. No sabía cómo sentirme, había encontrado información. Respire profundo.

Matt lo conocí de años, era como mi mejor amigo. Él sabía todo de mi todo. Mi pasado, mi presente. Él fue uno de los testigos de lo que ocurrió hace cuatro años. También estuvo cuando ocurrió el accidente hace dos años, él fue un apoyo para mí igual que Dominic.

–Ya te diré todo de los papeles que tengo en mi posesión –dijo con alegría.

–Bueno, está bien –accedí – Te dejo Matty, estoy con mis hermanos y con los hermanos Collins. No quiero que hagan preguntas y peor aún, que sospechen algo –dije haciendo una mueca. Escuche un carraspeo desde la otra línea.

–Bien, hasta ahora princesa. Cuídate –dijo despidiéndose mientras colgaba

Me quede un momento pensando en todo esto. Aun no era hora que le pueda decir a mi familia lo que estoy dispuesta hacer por ellos, porque quiero que vivamos en paz y felices.

Tengo un mar de emociones en mi interior que no sé cómo actuar, mejor será que me tranquilicé un poco. Regresé donde mis hermanos que no habían quitado el ceño fruncido desde que me fui. Reí.

– Lamento la demora –dije disculpándome mientras me sentaba.

–¿Porque demoraste? ¿Paso algo? –pregunto Tyler preocupado. Negué

-No, nada de eso. Me avisaron sobre unos desfiles y sobre los premios que tengo que asistir. Ya saben, lo de siempre –dije mintiendo descaradamente, aunque lo de los premios si era verdad.

Al parecer con lo que les dije quedaron satisfechos, nadie volvió hablar del tema. Seguimos con la cena y hablaban todos sobre las empresas hasta Bruno y Scott estaba conversando de ello. Yo hablaba con Jake sobre temas de las pandillas y mafias.

–Sé que no era de desfiles de moda lo que te ha llamado –dijo Jake de repente. Me quedé en silencio– ¿Tú también crees que ese bastardo no murió? –asentí cohibida sin saber que responder. No esperaba que el dijera eso.

–No es un tema de hablar aquí Jake –susurre. El resopló negando con la cabeza.

–Tú sabes que estarás haciendo. Confío en sano juicio que las hagas decisiones que tomes sean con la mente fría y calmada –dijo, asentí. No volvimos hablar de eso, síguenos hablando de otros temas menos animada que los demás.

La noche transcurrió normal, como era de esperarse después que se fue la tensión que había en el ambiente. Cada uno se fue despidiendo después de decirles que me iría a dormir a la casa de Dominic, no había hablado mucho con él en esta semana y lo extrañaba mucho. Mis hermanos solo asintieron ante mi repentino cambio y loa menores me dijeron que cualquier cosa los llame.

–Hola papá –salude a Dominic dándole un beso en la mejilla entraba a su casa. Lo abrase, el me correspondió de la misma manera.

–Hija ¿Cómo estás? –pregunto mientras nos sentamos en los sillones de la sala.

–Te he extrañado mucho papá tanto que algunas ocasiones he querido quedarme a dormir siempre aquí –admití avergonzada. Él sonrió

-Sabes que esta casa es tuya también hija. Y por supuesto que puedes quedarte a dormir –respondió mientras señalaba me sostenía la mano.

Después de comentarle lo que paso en la semana que no lo había visto, el hiso unos cuantos chistes. Nos reímos a carcajadas, no por el chiste sino de los malos que eran.

– ¿Has averiguado algo sobre eso, hija? –pregunto refiriéndose a las investigaciones que estoy haciendo con Matt.