PRÓLOGO

Habían acabo de sellar a Kaguya Ootsutuki, Madara Uchiha estaba derrotado. Solo restaba eliminar el Edo Tensei Infinito. Pero lo cierto era que su cuerpo estaba destrozado debido a esa ardua guerra. Recibió heridas graves y profundas. Él conocía su propio cuerpo mejor que nadie como para saber que de ésta no tenía salvación. Respiraba bocanadas de aire intentando retener lo poco que le quedaba de vida.

Tenía tanto por vivir pero su vida se le escurría como agua entre sus dedos. Parece que su sueño de ser Hokage quedaría en tan solo un anhelo. No podía mantenerse de pie. 
Su mejor amigo lo supo no bien lo analizó pero...no estaba dispuesto a aceptarlo. No aceptaría que él muera de esa forma. Sentía un nudo en su garganta y una poderosa presión en su pecho. Junto a él unieron fuerzas para liberar a todos de esa nefasta técnica. El Edo Tensei Infinito comenzaba a ser inutilizado y las personas despertaban poco a poco. Todos respiraban aliviados aquel aire de libertad y felicidad. Pero no todo era alegría.

Naruto Uzumaki había llegado a su fin, su vida junto a la del Kyuubi casi se extinguía. Sasuke lo sostuvo en sus brazos en un inútil intento por retenerlo. Sus lágrimas humedecieron su rostro desfigurandolo. Pero había tomado una decisión, si su gran amigo moría él se quitaría la vida. De esa manera lo seguiría al otro mundo, tarde pudo reconocer el valor de la amistad y aquel inquebrantable lazo que lo unia a Naruto. Nadie más que ellos dos estaban en esa colina, aún no llegaban los demás.

Podría quitarse la vida tranquilamente luego de verlo morir. Había perdido a su familia, a su hermano y ahora a su amigo. Esto era demasiado. 
- Sasuke - Naruto apenas podía hablar pero conocia las intenciones de su amigo - No...no lo hagas...tu...tú debes vivir...
- Idiota - el ninja emo lo abrazó con fuerza - No viviré sin tí...me niego a tener una vida así. Perdóname Naruto, fuí tan estúpido....
- No..no quiero morir Sasuke...pero...pero nada puedo hacer para evitarlo.

El sentimiento que los unía a ambos era tan intenso que ni siquiera la muerte misma podía separarlos. Fue por ese motivo que el Sabio de los 6 caminos apareció en ese momento frente de ellos. Contemplaba conmovido a las reencarnaciones de sus hijos. Era la primera vez que se entendían y unían así. Tuvo que pasar demasiados siglos para que ambos lograsen entender el significado de ese sentimiento y asimilarlo. Sonrió feliz.

- Hay una opción - dijo finalmente echo que llamó la atención de ambos - Existe una forma de evitar este destino de Ashura...no...de Naruto y lograr que se unan eternamente. Pero es peligroso y ambos tendrán que aceptar correr el riesgo. Sasuke, tú tendrás que ir al país del rayo y buscar el pergamino sagrado. Sabrás encontrarlo por el poder que corre por tus venas. Ese es un pergamino peculiar ya que te ayudará a viajar al pasado de un forma diferente pero podrás ver a Naruto y...
- ¿Y?
- Cambiar su destino. Sin embargo existe un gran riesgo. Si no logras llegar a esa época te desintegraras en el camino y desaparecerás para siempre. En cuanto a tí Naruto, morirás irremediablemente de momento pero tú espíritu no irá al otro mundo. Estará atrapado en una dimensión oscura y fría aguardando a que Sasuke tenga éxito. Si él logra llegar y devolverte el poder que yo te di tu espíritu regresará a tu yo de esa época. Será recién cuando empiecen a cambiar el destino de ambos trazando nuevos caminos. Pero si él no logra su meta tu permanecerás eternamente en esa dimensión oscura y fría sin posibilidad de volver ni llegar al otro mundo..
- Hagámoslo - fue la respuesta conjunta de ambos. Esto despertó una alegre sonrisa en el Sabio de los 6 caminos.
- Sasuke sujeta la mano derecha de Naruto y momentáneamente absorveras su poder del sol. 
Cuando lo vuelvas a ver solo tendrás que sujetar su mano derecha y el poder regresará a él. Recién entonces su espíritu será liberado de esa dimensión y empezarán sus nuevas vidas que serán un continuo desafío al destino

Así lo hizo Sasuke y comenzó a sentir un gran ardor en su mano al tiempo que veía cómo la vida de su amigo lo abandonaba. Aquello lo partía en dos, destrozaba su alma sintiendo que una parte de él mismo estaba muriendo también. 
- Hasta...la próxima...Sasuke...

El brazo de Naruto cayó al suelo al momento que su vida se extinguía. El tatuaje del sol había desaparecido de su palma derecha para reaparecer en la de Sasuke. El dolor del ninja emo era desbastador, al punto que tuvo que usar su voluntad para no quitarse la vida allí mismo y recordarse que tenía una misión. 
- No podrás volver a esta época y realidad - le dijo el Sabio
- Mejor, aquí ya no hay nada que me pueda interesar.
- Apresúrate que esa dimensión genera mucho dolor al que allí se encuentra.

Sasuke tenía heridas por.doquier pero no le importó y partió rumbo al país del rayo. En su mente empezó a dibujarse un mapa del lugar exacto donde se encontraba ese pergamino. Sentía el poder de Naruto recorrer su cuerpo e inmediatamente sus heridas empezaron a cicatrizar. Estuvo lo bastante lejos para cuando encontraron el cuerpo de Naruto. No queria oír lamentos de nadie, no deseaba consolar a nadie ni ser consolado. Solo tenía un deseo y era volver a verlo con vida con urgencia. Cuando recuperó un poco de su chakra utilizo su Rennigan para abrir la puerta dimensional y así poder llegar más rápido a destino.

Las afueras de la biblioteca donde estaba el pergamino tenía unas fachadas muy comunes, no había guardias ni nadie. Sasuke sabía que esto se debia a la gran confusión de estar recién despertando del Edo Tensei Infinito. Era su oportunidad. El interior del lugar carecía de luz ya que solo había velas para iluminarlo. Sentia un gran calor en sus palmas a medida que se acercaba a uno de los estantes llenos de pergaminos cubiertos de polvos. Supo cual era el que buscaba no bien lo vió.

Lo tomó sin dudarlo y lo abrió. Transcurrió una hora y media hasta que al fin comprendió de que se trataba esa técnica. Su mente y su poder junto a su espíritu viajaría a la época que él debía divisar en su mente. Mientras sucedía eso su cuerpo actual se convertirá en polvo junto a ese pergamino. Solo contaba con una única oportunidad. Era suficiente para él. Podría hacerlo porque tenía el poder de ambos hijos del Sabio de los 6 caminos. Colocó sus palmas sobre el pergamino y cerró sus ojos. Mientras mentalizaba la época y el lugar exacto donde aparecería la voz del Sabio retumbó en el lugar como ecos metálicos
- Una cosa más, si tienes éxito no creas que recordarás todo esto. Solo sabrás que viniste del futuro a cambiar el destino y que debes sujetar la mano derecha de Naruto con tu mano que tiene tatuado el sol. Pero no sabrás por qué. Él tampoco recordara nada de esto. Solo sabrá que tiene una nueva oportunidad de eludir su cruel destino. Pero si vuelven a separarse...quien pagará un alto precio será Naruto.  Aunque esto último ni tú ni él lo sabrán. Buena suerte...hijo.