DE REGRESO A KONOHA

Madara los atacó pero los tres no solo eludieron dicho ataque sino que también contra-atacaron con todo. El antigüo Uchiha era un misterio aún para el mismo Itachi quien fue su aliado mucho tiempo. Podía traspasar los objetos sólidos como si de un fantasma se tratara y solidificarse a la hora de atacar. Ningun ataque funcionaba con él pero sus contrincantes también eran expertos por consiguiente no le resultaba nada fácil dar en el blanco y obtener la victoria. 
Itachi estaba a la cabeza del enfrentamiento protegiendo a Naruto junto con su hermano.

Ambos contrarrestaban los genjutsu de Madara generando un escudo protector en Naruto. Pero ese enemigo estaba dispuesto a secuestrarlos a los tres por tal razón algo debían hacer para escapar. Sasuke no tenía suficiente chakra como para abrir el portal con su Rennigan. Naruto contaba con el apoyo de Konoha hecho que al saberlo Sasuke se molestó.
- ¡Te dije que no quería que lo sepan! - rugió indignado el ninja emo.

- Ahora no es momento para pelearse chicos - intervino Itachi - Dejen eso para después
- Yo no soy como tú Sasuke, ellos tenían derecho a saber dónde estábamos.
- Veo que nunca podré confiar en ti Naruto
- Sabes que te estás mintiendo ¿Verdad? - en ese momento Madara le había lanzado un poderoso ataque al ninja rubio pero Sasuke lo salvó arrastrándolo a su lado
- Por poco - murmuró el ninja emo.
- ¡Sasuke! ¡Naruto! ¡Concentrense! - exclamó molesto Itachi
- Lo dejaremos para después ¿Te parece...Sasuke? 
- Si

El enfrentamiento siguió y con cada segundo los tres perdían más y mas chakra debido a las habilidades de Madara quien contaba con agotarlos para poder llevárselos fácilmente. Por tal razón al percatarse de ello Itachi empleo el poder de Mankekyo Sharingan e hizo aparecer a Susanoo con quién consiguió  explotar parte del lugar pero protegió a Naruto y a su hermano a la vez. Aquello lo agotó bastante ya que consumió gran cantidad de chakra. Cuando salieron a la superficie vieron que Madara estaba intacto. 
- Vaya que poderoso eres Itachi - se burló el enmascarado. 
- Maldito - murmuró furioso Itachi
- Hasta te recuperaste de tu enfermedad. Qué interesante 
- No volveré a Akatsuki ni permitiré que te lleves a mi hermano ni a Naruto.
- No estás en posición de impedir tales cosas Itachi
Madara desapareció bajo el suelo del lugar donde estaba para reaparecer detrás de Itachi pero Sasuke lo atacó con su Chidori aunque pudo eludirlo al desaparecer nuevamente para reaparecer junto a Naruto. Este lo atacó con un Kunai, sin embargo solo rasgó el aire porque Madara volvió a desaparecer. Las voces de los otros empezaban a oírse.

Esto molestó a Madara quien dijo
- Maldición, los de Konoha ya están aquí. Ni modo, serás un traidor nomás Itachi. En cuanto a tí Naruto Uzumaki, ten por seguro que te capturaremos. 
Instantes antes de que Kakashi y los demás aparezcan Madara desaparecía del lugar. Itachi aprovechó para pedirles a Sasuke y a Naruto que no dijeran nada sobre lo que les hubo contado ya que no era algo que se pudiera decir a la ligera. Solo hablaría de ello con la Hokage y determinadas personas. Los dos aceptaron mantener la boca cerrada. Segundos luego aparecieron los demás. Las diversas expresiones que los rostros de los shinobis mostraron causaron risas en algunos de los allí presentes. Sakura miró perpleja a Sasuke quien le devolvió la mirada arrepentido. Hinata se acercó a Naruto y lo abrazó 
- Menos mal que estás bien Naruto
- Itachi - dijo Kakashi - Tu...¿En serio vendrás a la aldea? 
- Si

El clon de Naruto solo les dijo donde estaban y que sucedió en el combate. No les contó nada de lo que Itachi les dijo ni lo que ocurrió entre Sasuke y Naruto en el bosque. Salvo lo de los poderes nuevos y extraños.
- Hablaré con la Quinta para que no vayas a prisión - Dijo Kakashi
- Él no irá a prisión - Intervino Sasuke molesto
- Sasuke - exclamó Itachi - Recuerda lo que hablamos. Gracias Kakashi
Sasuke había reunido el suficiente chakra como para abrir la puerta dimensional y así poder ir todos a la aldea lo más rápido posible. No quería seguir exponiendo a su amigo al posible peligro. Aunque todos tenían infinitas preguntas sabían que habría tiempo para hacerlas y oír las respuestas. Instantes luego todos aparecieron en la entrada de Konoha. Sasuke respiraba entrecortado. Había abusado de ese nuevo poder quien le consumía gran cantidad de chakra, pero Naruto lo sujetó.

- Bienvenidos a casa hermanos Uchiha - dijo feliz él ninja rubio
Sasuke miró esa entrada y recordó el momento en que se fue, lleno de angustia y odio. Envuelto en la oscuridad total, solo buscaba venganza y eludía todo sentimiento. Quería dejar todo eso atrás, olvidarlo y empezar una nueva vida. ¿Podría lograrlo? ¿Konoha en verdad se lo permitiría? Se aferró a Naruto  con fuerza intentando encontrar parte del valor que él tenía. De todas maneras estaba decidido a cumplir su palabra
- No volveré a alejarme de ti...Naruto - le susurró en el oído de forma tan sensual que el aludido sintió un ligero estremecimiento recorrerle todo el cuerpo. 
- Eso espero...Sasuke - respondió en un leve susurro mientras lo sujetaba con fuerza como temiendo que escapara si lo soltaba.

Ninguno de los dos podía entender aquel sentimiento que había empezado a florecer en ambos y cada vez se intensificaba más. Pero si tenían en claro que no querían alejarse, más bien necesitaban pasar más tiempo juntos y a solas. Sasuke temía que pasando el umbral sería separado de Naruto irreversiblemente debido a su accionar en el pasado. Pero la intensidad con que él lo llevaba podía sentirla dándole así fuerzas para aceptar lo que sea que tuviese que pasar. Solo esperaba que no se vuelva un verdadero infierno para Itachi. Anhelaba volver a ser esos hermanos cercanos y unidos que fueron en el pasado.

La Quinta estaba en la entrada esperandolos, esto produjo cierto recelo en Sasuke pero Itachi no se inmutó y la miró a los ojos. 
- Mis respetos a uds Quinta Hokage - Itachi le hizo una reverencia - Quiero volver a la aldea aceptando el castigo que sea que ud decida. 
Sasuke quiso intervenir pero Naruto se lo impidió sujetándole con fuerza la mano derecha, el ninja emo se mordió los labios de la impotencia