Patrulla nocturna

La ciudad dormía bajo la luz de la luna, pero para La noche de la muerte, la tranquilidad era solo aparente. Sonic y su grupo avanzaban por las calles vacías, vigilando cada rincón, atentos a cualquier indicio de problemas.

—Recuerden, chicos —dijo Kaito en voz baja—. Mantengamos la discreción. Nadie debe sospechar que estamos aquí.

Sonic se adelantó ligeramente, sus pasos silenciosos sobre el asfalto. Sus ojos carmesí brillaban apenas bajo la luz de la luna, un destello que solo él notaba, reflejo de su entrenamiento y habilidades especiales.

De repente, un par de figuras sospechosas comenzaron a forzar la puerta de un pequeño comercio. Sin hacer ruido, Sonic corrió hacia ellos, usando su super velocidad para interceptarlos antes de que pudieran escapar.

—¡Alto ahí! —exclamó, deteniendo a uno de los ladrones con un movimiento preciso, apenas dejando que la fuerza sobrehumana y su resistencia sobresalieran de manera controlada.

Mientras los demás miembros del grupo se encargaban del segundo ladrón, Sonic evaluaba la situación. Con un rápido vistazo, copió un pequeño movimiento del ladrón para inmovilizarlo, demostrando su habilidad de adaptación sin revelar demasiado.

—Buen trabajo, Sonic —susurró Ren, observando cómo su compañero controlaba la situación con frialdad y eficacia—. Eso fue rápido.

El equipo aseguró la zona y se retiró antes de que alguien más apareciera. Caminando de regreso por las calles silenciosas, Sonic respiró profundo, sintiendo la adrenalina del encuentro, pero manteniendo su calma habitual.

—Cada misión nos hace más fuertes y más unidos —murmuró Kaito—. Bien hecho, equipo.

Sonic sonrió levemente, mirando a sus compañeros. Aunque mostraba solo una fracción de su poder, su presencia y habilidades ya marcaban la diferencia. La ciudad estaba segura, al menos por ahora, y La noche de la muerte continuaba siendo un misterio para todos.

Mientras regresaban a su base temporal, Sonic pensaba en lo que vendría. Sabía que esta patrulla nocturna era solo el comienzo, y que su verdadero potencial tendría que esperar para el momento adecuado, manteniendo el secreto intacto, mientras protegían la ciudad en las sombras.