Ni en mis sueños mas locos

Capitulo 30: ¿Quién es ella?

Andrew
Suena la alarma de mi teléfono y tengo que ir a trabajar, bajo las gradas de la casa para desayunar, noto que mi padre ya lo está haciendo,
—Buen día papá.

El ni siquiera levanta la mirada de su celular,
—Buen día hijo, necesito que vayas a Londres, tenemos algunos problemas con una de nuestras sucursales, ve y mira de qué se trata y arréglalos.

Lizzy está en Londres, espero poder verla,
—Está bien papá, primero pasare por la oficina a recoger algunos archivos.

—Está bien.

Mi hermana baja las escaleras, se acerca a nuestro papá y besa su mejilla
—Hola padre, ¿Cómo amaneciste hoy?

Mi padre cambia absolutamente su rostro y deja a un lado el celular,
—Hola mi niña, estoy muy bien, ¿tu cómo te encuentras?

Ellos comenzaron a hablar y yo decidí levantarme de la mesa perdí el apetito, no soporto ver cómo mi papá trata de manera especial a Valentina, me encuentro a mamá al subir a mi habitación,
—Andrew hijo, ¿Cómo estás?

Saludo a mamá con un beso en la mejilla,
—Hola mamá buen día, estoy muy bien, ¿tu cómo amaneciste el día de hoy?

—Me encuentro bien, ¿ya desayunaste?

—Desayunaré de camino a Londres.

Mamá me ve de manera preocupada,
—¿Por qué no desayunas en casa? Le diré a la sirvienta que te sirva el desayuno.

—Estoy bien mamá, necesito ir a Londres, no puedo perder más tiempo.

Mi mamá suspira,
—Está bien, cuídate.

—Gracias mamá.

Al estar listo, Arthur me espera en el garaje, abre la puerta del asiento trasero del sedan maybach negro Emperor, subo y nos dirigimos a Londres, en el camino le envié un mensaje a Steven, preguntándole en qué Hotel estaban registrados y que tenían planeado hacer hoy, el no respondió, supongo que ha de estar durmiendo aún.
Al bajar del auto,
—Arthur investiga en qué hotel está Steven.

—Si Conde Lindsor.

—También te pediré que traigas a la señorita Elizabeth Henderson a la oficina en la hora del almuerzo.

—Claro, Conde Lindsor.

Al llegar la secretaria encargada en este lugar se apresura a darme la bienvenida, me pone al tanto de lo que está sucediendo,
—Conde Lindsor buen día, el problema que tenemos es en el área de I.T. (tecnología de la informática)

—Comprendo gracias señorita.

En el área de I.T. Y me doy cuenta que nuestro sistema ha sido hackeado, nos han robado millones de dólares, me siento frustrado,
—¿Quién es el encargado de esta área?

Se acerca un chico, muy nervioso,
—Conde Lindsor, yo soy el encargado, hemos hecho todo lo que está en nuestras manos pero el hacker es muy bueno, no podemos eliminar el virus.

Frunzo el ceño, esto es peor de lo que imagine,
—Muéstrame.

En mi oficina comienzo a revisar el virus y es muy difícil de eliminar, no se cuanto tiempo he estado frente a mi ordenador, toda mi concentración es quitada cuando tocan la puerta,
—¿Quién?

—Soy Arthur, Conde Lindsor, aquí está la señorita Henderson.

—Que esperas, hazle pasar.

El día de hoy salí a caminar y conocer Londres, Alissa se quedó en el hotel, quería descansar un poco, estoy turisteando y noto que un automóvil negro me sigue, me sentí muy asustada así que decidí entrar en una tienda, viendo las cosas de la tienda se acerca un joven, se veía que era unos dos o tres años mayor que yo, tenía el cabello negro y sus ojos eran de color café oscuro, vestía de traje,
—Hola señorita Elizabeth Henderson.

Me sorprendo, ¿Cómo sabe mi nombre?, ahora me siento más asustada que antes, quería salir corriendo pero afuera estaba el auto negro siguiéndome,
—Disculpa, ¿Cómo me conoces?

El sonríe de manera muy educada,
—Trabajo para el Conde Lindsor, el me pidió que la recogiera y que la llevara a su oficina.

Levanto una ceja,
—¿El Conde Lindsor? Pero el está en Oxford.

—No señorita Henderson, el tuvo algunos problemas en la sucursal de Londres y se encuentra aquí.

—Oh comprendo, ¿te molestaría que llame a Andrew para saber si lo que dices es verdad?

—Puede hacerlo señorita Henderson, pero no creo que conteste, ha de estar muy ocupado.

Suspiro sabiendo que tiene razón pero aún así decido llamar, el teléfono suena y al sonar tres veces Andrew contesta,
—Hola Lizzy, ¿Cómo estás?

—Hola Andrew, lamento molestarte, pero un caballero, dice que tu me mandaste a buscar.

—Si Lizzy, estoy en Londres y quería salir a almorzar contigo, el se llama Arthur.

—Oh, está bien gracias por confirmarlo.

Veo a Arthur y el está sorprendido al notar que Andrew me contesto, pero como es muy prudente no pregunta nada,
—Nos vamos señorita Henderson.

Le sonrió,
—Puedes decirme solo Elizabeth.

—Está bien, vamos señorita Elizabeth, el Conde Lindsor la espera.

Arthur me habré la puerta trasera del auto negro el cual me seguía, ahora comprendo y siento menos miedo, es un auto hermoso, se nota que es de una persona importante, luego de una hora llegamos a un edificio, es muy grande, puedo ver las palabras Empresas Lindsor escritas y pienso, si estás es una sucursal como será la empresa.
Arthur sale del asiento y me abre la puerta,
—Muchas gracias.

—Por aquí.

En la entrada hay dos hombres, me imagino que son la seguridad del edificio, Arthur les dice que el Conde Lindsor me está esperando y ambos nos dejan pasar, al llegar una chica con una falda negra y una camisa blanca y un blazer negro, se nos acerca,
—Hola señor Arthur, ¿busca al Conde Lindsor?

El asiente y ella pone la mirada en mi, en ese momento su rostro cambia a uno con desaprecio y en sus ojos azules puedo notar que se siente muy importante,
—"¿Quién es ella?" Seguridad, otra fan del Conde logró entrar a la sucursal, sáquenla.

Me quedo sorprendida por la forma de tratar a las personas que tiene esta chica.




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