Resiliencia

Capítulo 29. La boda

Alejandro

Victoria tenía razón, el sonido de las olas y el sol tibio de la mañana son el marco perfecto para un nuevo comienzo, decidimos casarnos junto a la playa en una ceremonia íntima acompañados solo de nuestros familiares y amigos mas cercanos. Están mis padres, mi hermano y su esposa, Trent quien es mi socio en la constructoria , los padres de Victoria,  sus amigos  del bar y nuestros amigos Julian, Sandra y Fiorella junto a quienes he compartido alegrías y tristezas y han jugado un papel muy importante en mi vida y en la recuperación de Victoria.
Los acordes de Until the last moment me sacan de mis pensamientos y llevan mi mirada al frente donde se topa con la visión casi mágica de la mujer que encarna mis sueños y deseos. Lleva un vestido blanco, etereo y ramilletes de flores trenzados en su cabello, su piel reluce con un suave brillo y mis manos ansían sentir su calor y textura. El hombre inmaduro que en el pasado rehuia el  matrimonio es cosa del ayer, hoy mi corazón late desbocado, preso de la emoción por unir su vida con la de esa mujer que aceptó ser suya y a partir de hoy será su tesoro más  preciado, la joya más excelsa que cualquier hombre pueda tener, mi esposa, mi compañera, mi amiga, mi amarte y mi solaz. Los caminos de Dios puedes parecernos confusos e ilogicos cuando los examinamos a través de nuestros esquemas mentales pero sí fuésemos capaces de verlos con el corazón y la confianza absoluta de un niño, acogeriamos cada designio con esperanza y no con zozobra. Sabiendo que detrás de un si o un no de Dios hay un propósito.

El pastor inicia la ceremonia, por momentos siento que transcurre a cámara lenta y luego aprisa cuando nos acercamos al final. Dentro de nuestro corazón  muchas veces anidan sueños y anhelos  desconocidos que solo esperan el momento propicio para salir a la luz, cuando estamos listos para tomar la promesa.

Beso a Victoria ya con convertida en mi esposa, perdiendome en la dulzura de sus labios, tomo  la mano de mi esposa y la conduzo al area donde se celebraremos una pequeñarecepción. Recibimos las felicitaciones de nuestros amigos y familiares y damos paso a nuestro primer baile como esposos.

—Victoria, sé que el matrimonio está lleno de retos y surgirán diferencias como ocurre con cualquier matrimonio pero quiero que ambos nos comprometamos a resolverlas a través del diálogo y no permitir que el orgullo o la terquedad nos lleve a perdernos. No quiero un matrimonio con fecha de vencimiento. Los juramentos que te hice fueron para toda la vida y quiero que sepas que por muy enojado que esté jamás me olvidare de las promesas que hice junto al altar. Mi lugar es a tu lado y al lado de los hijos que nos conceda Dios. No sabes las ganas que tengo de ver tu vientre hinchado con un hijo nuestro en tu seno.

—Te amo, Alejandro y al igual que tú, yo me case para toda lavida, tú eres mi presente y mi futuro.


 

Victoria 

Veo a mis padres bailar junto a nosotros y la dicha que siento por mi boda, se incrementa al verlos tan felices y compenetrados, he de  admitir que realmente no apostaba mucho por las promesas de papá de abandonar Washington y renunciar a su trabajo, pero lo hizo, vendio su penthouse y compró una casa en San Francisco junto a la playa  donde vivirá  con mamá después de  su boda. 

El bar y la fundación marchan sobre ruedas, especialmente, después del empujón que Sandra nos dió al contactarnos con varias empresas y postular algunas de nuestras chicas para varios puestos de trabajo.Tengo la cabeza llena de  planes que pondré en acción después de mi luna de miel.

Planeamos partir de luna de miel después que se revelen los resultados de la licitación y a pesar de que Alejandro  tomó la decisión de rechazar  el proyecto si llega a ganar, qué es lo más seguro, decidimos estar presentes para demostrarle a Sergio que a pesar de sus maquinaciones no consiguió separarnos. Pude comprender la traición de Erick y  Camila, pero las jugarreta de Sergio no tienen ninguna excusa, esto fue la gota que derramó el vaso y es hora de ponerle un hasta aquí.

 

 

Dos días después llego con Alejandro al salón donde serán revelados los resultados, nuestra entrada deja sorprendido a Sergio, su madre y hermana, en el primero la consternación deja paso a la rabia que trata de disfrazar rápidamente mientras su madre y su hermana no hacen nada por disimular su sorpresa.

Empiezan a dar la lectura de los resultados y tal como lo prevismo la propuesta realizada por mi esposo resulta  ser la ganadora, Alejandro da un paso al frente llevándome consigo y frente a todos renuncia al proyecto. 

—Buenos días, es un honor para mí y mi empresa haber sido escogido para llevar a cabo unos proyecto de semejante envergadura pero he decidido rechazarla por motivos personales, el más importante, mi reciente boda con mi amada Victoria —pronuncia Alejandro, para luego besar una de mis manos frente al resto del auditorio. Ofrezco disculpas por cualquier inconveniente o atraso que mi renuncia pueda generar, pero estoy seguro que cualquiera de las propuestas presentada por el resto de competidores estará a la altura de la obra a construir. Gracias.

Empezamos a abandonar el salón cuando somos detenidos por Sergio.

—¿Qué locura, es esta, Victoria?, ¿realmente te casaste con este tipo? —susurra Sergio con ira tratando de no llamar la atención del resto de asistentes.

—Sí, lo hice y no es tu asunto, Alejandro y yo estamos al tanto de tus maquinaciones para separarnos y por ello decidimos venir para dar punto final a tus triquiñuelas. No dudo de las habilidades de mi esposo como arquitecto pero es obvio que desde el principio planeaste elegirlo como ganador con la esperanza de alejarlo de mi, pero te equivocate, no lograste separarnos y es hora de que entiendas que lo nuestro terminó hace muchos años, no te amo y no lo volveré a hacer.

—Victoria...—Sergio, trata de asir mi brazo pero es detenido por mi esposo quien se coloca frente a mí, a modo de barrera entre Sergio y yo.




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