Capitulo 10

Lion. 















 

Un delincuente...

Un mal nacido que sólo sirve para meterse en problemas. Un miserable bastardo que sólo se deja guiar por el rencor o por la desesperación.

Un patético, un idiota que hace todo mal, un insensible y un asqueroso asesino.

Eso es lo que soy...

Eso es lo que sigo haciendo y no, esta vez no me he medido con mis víctimas, esta vez he sido un desgraciado que únicamente se limita a accionar para hacer todo estallar.  Ese es mi plan, esa es mi meta...

Quiero ver ahora a todos aquellos que fueron cómplices de ese maldito viejo... arder, quiero verlos a todos derrumbarse y deshacerse en su propia inmundicia. Antes no tuvieron consideración de mí...

Yo tampoco la tendré entonces.

Lo único que he deseado  desde el asesinato de mi hermana... es ver a todo el maldito mundo arder. Al principio era difícil soportar lidiar con todos esos sentimientos y pensamientos, al principio, hace cinco años, cuando estaba recuperándome en la habitación de un hospital... lo único que quería y pensaba era en tomar todo lo que estuviera frente a mí y matarlo... Matarlo cómo lo hicieron con mis sueños y esperanzas, matarlo cómo lo hicieron con mi inocencia, matarlo cómo lo hicieron con los planes que tenía para mí y para mis niñas para el futuro...

Me arrebataron todo, me quitaron lo que más amaba, destruyeron al Lion que ansiaba renovarse, que ansiaba... enmendarse. Ahora ya no me importa qué tanto me condenen al infierno por mis actos. No quiero que me importe, pero de nuevo estoy empezando a ser alarmado por un sentimiento. De nuevo estoy empezando a ser despertado... por una emoción increíble, familiar, antigua.

Sigue estando ahí, sigue viviendo dentro de mí aún después de tanto tiempo acumulando sólo rencores. Entre la espesa oscuridad de dolor y del odio... se ha manifestado una extraña llama, una muy diminuta pero deslumbrante. Una que ha empezado a alumbrar viejos recuerdos, recuerdos que igual me llenan de dolor, recuerdos que han venido acompañados de sensaciones que antes me hacían sentir tan vivo y que ahora... me tienen tan confundido. Asombrado...

¿Por qué aún sigo sintiendo esto por ella?  ¿Por qué el verla me ha golpeado tanto?

Sí, huí cómo un cobarde, preferí mantenerme lejos de ella después de lo que ambos vivimos con Watters... Yo... Carajo, ni siquiera planeaba sobrevivir, no quería hacerlo... Me sentía tan destrozado sin Jannine. Odiaba el mundo, odiaba la vida, odiaba la idea de ya no tenerla conmigo y me rendí... Me rendí esa noche que ví a Lilo escapar del fuego con Dylan. Me rendí... porque sabía que aquel infierno en el que había quedado atrapado... lo tenía bien merecido, pero ya no me quedó de otra más que volver a levantarme cuando Frank me encontró a punto de morir.  Él, desde entonces, ha estado ahí para mí, para ayudarme a seguir. Ha estado en tantos procesos conmigo, que se ha convertido en un buen amigo. Tanto cómo lo era Rj para mí...

Fue lo único bueno que obtuve después de tanta pérdida, un amigo. El único verdadero que tengo ahora. El único... que igual se ha atrevido a correr tantos riesgos por mi culpa. Ya sentía que era suficiente con haberlo involucrado a él conmigo, por eso preferí evitarla a ella... pues sabía que Lilo merecía vivir una vida tranquila. Lo hice también porque ya no podía verla a los ojos después de todo el daño que le había causado.

No... Nunca la dejé de amar, nunca lo haré, no importa el tiempo que pase, pero había creído, estúpidamente, que ya todo había acabado, que nuestros caminos ya jamás se iban a volver a entrelazar. Encontrarla en Nueva York... me ha golpeado tanto, me ha hecho preguntarme si es esto una nueva señal, pues desde que la ví lo único que he deseado es volver a ella. Me ha doblegado, me ha hecho sentir tanto de nuevo, cómo si esos cinco años en los que estuvimos sin saber nada uno acerca del otro... no hubieran pasado en realidad.

No...

No puedo volver a ella. No... debo, pero he empezado a sentir que algo pasa, que algo me ata a ella de nuevo, y lo hace con tanta fuerza que me asusta.  No sé qué carajos es, pero desde que puse un pie en Nueva York, aún sin tener idea de que ella se encontraba aquí..., percibí algo extraño. Algo que me hizo recordarla, algo que me empezó a incitar para que la buscara, y es extraño, pues desde nuestra primera e intensa discusión en el hotel, mis sospechas han aumentado dentro de mí, pues Lilo se ha mostrado más que furiosa conmigo por lo que ha descubierto acerca de mí.

Sabía, que si algún día la tuviera que enfrentar para explicarle la verdad de lo que había sucedido conmigo, iba a recibir este sermon de su parte. Sabía que iba a ser maldecido por ella y que iba a recibir su rechazo y su repudio, pero, además de ya haber demostrado eso, también he notado algo más en ella... Algo que me indica... que está ocultando algo. Algo que de verdad la tiene nerviosa y preocupada.

¿De verdad temerá de mí? ¿O que otra cosa la tendrá tan preocupada? ¿Por qué la última vez se veía tan nerviosa? ¿Por qué la última vez... parecía que quería decirme algo pero no se animaba?

Desde el día que la encontré en Gran Plaza... no he dejado de darle vueltas al asunto, me tiene con la cabeza hecha un desastre y con el corazón hecho un nudo. Algo dentro de él me pide que investigue de lo que se trata, que indague un poco más, al menos para salir de dudas. ¿Será que sólo se ha afectado así por mí? Pero ella me odia, maldición, me debe odiar, yo lo haría, ¿acaso tampoco me ha podido olvidar? ¿Acaso de verdad está ocultando algo?

Miles de conclusiones se crean dentro de mi cabeza pero ninguna me convence. Sé que no estaré en paz hasta averiguar el porqué siempre que me ve... luce tan temerosa, culpable y... desesperada. Sin embargo me digo a mí mismo que no es una buena idea, que debo aprender a... soltarla, porque sigo siendo alguien indigno para ella, porque... el daño que he hecho ya no tiene arreglo y ella... Carajo. Ella es la que más tiene el derecho de desearme la muerte.