19. Besos Interrumpidos

**Paz

No digo o pienso que sea bipolar, porque no lo es; pero me da miedo que se quede sola y siendo infeliz por no saber cómo acercarse a un chico, descubrí que ese chico que me dijo Marcos que estaba frecuentando a mi hermana, resultaba ser nada más y nada menos que él, Kilian Horton, amante empedernido del Hockey; y sobre todo vi algo bueno en él, "ella le gusta de Verdad".

Ahora mismo no quiere saber de él, por la idiota de la hermana menor de su mejor amigo Troy alias “Casanova” Rawley, quien por  cierto no se ve nada mal, pero es un completo idiota y mujeriego.

- Oh, vamos Paz, ya déjalo, - me dice ella colocándose la almohada en la cabeza, la muy terca a los dos días de que le quitaran el yeso volvió a su residencia.

- ¡No! no, no, no, no, - le digo inclinándome para hablar en su oreja; - vamos levántate, es el día de tu cita y quiero ponerte hermosa, ella suelta un grito de frustración en la almohada.

- ¡Está bien! – grita una vez se quita la bolsa de la cara y me mira, - No lo dejaras hasta que te diga que si ¿Cierto?

- Sabes que si hermanita, - le doy un beso en la mejilla para que sepa que tiene razón; -vamos es tu primera cita en la vida, no pensarías que te dejaría ir como toda tú.

- y ¿Cómo es eso? – me mira con el ceño fruncido.

- ¡Que vayas con el cabello en esa horrible cola que siempre cargas y con algún jean todo roto! – grito Summer entrando por la puerta.

- ¿Qué dices? A mí me gusta mi cola.

- Claro siempre la has llevado, - arremeto yo contra ella, quien está frente al espejo. – así que, Summer y yo seremos tus asesoras el dia de hoy, ¿No es así primita?

- ¡Claro que sí! – dije y chocamos las manos, sabe que no tiene otra opción.

A remilgos la llevamos a un centro comercial, le compramos un lindo y encantador vestido nada primaveral , más bien casual y relajado pero en tela de gabardina, de color durazno y una chaqueta de cuero negra.

- No pagare eso, - dice yéndose hacia la puerta de la tienda.

- No te preocupes lo pagare yo, - le dice nuestra prima y su mejor amiga; Summer y yo no nos llevamos mal, pero congenio más con Sky, ya que son polos muy opuestos.

- Pero tú pagas los zapatos, - le digo; - aunque los escojamos nosotras.

Horas después de buscar unos preciosos zapatos, que fueran acorde con el vestido y la chaqueta tres horas después de buscar casi infructuosamente los zapatos adecuados los vi resplandecer como iluminación divina frente a mí en un escaparate de aquella tienda.

En los pies de Cenicienta, es el nombre de la tienda y bien que se merece el nombre, me paro halando a Sky para que venga conmigo, le muestro los zapatos - ¿Te gustan? – ella asiente con una sonrisa.

Volvemos a su residencia y la ayudamos a arreglarlo.

Sky**

Este día ha sido abrumador, tener a Paz y Summer todo el día de tienda en tienda es agotador, se volvieron locas comprando algo, solo por una simple cita, si puede ser que suene muy poco interesada, pero la verdad es que estoy muy emocionada incluso nerviosa, la vez que salimos fue algo informal; nos topamos en una fiesta a la que yo en primer lugar no quería ir y el al parecer tampoco quería estar en ella.

Luego que fue a casa y estuvimos platicando me sentí muy cómoda con él, la verdad es simpático y le pude preguntar cosas sobre el Hockey, más todavía sobre su palo, antes de la cita le pedí a mi loca y tormentosa hermana ir a comprarlo.

Fuimos hace tres días a la tienda de deportes Just Hockey Source For Sports que queda en 900 Don Mills Rd, North York, ON M3C 1V6, Canadá, aunque no estaba todavía a caminar rápido mi huracán estuvo muy paciente conmigo. Encontramos la marca que me había mencionado la warrior covert qr edge sl stick y estuvimos viendo en las páginas de internet de la tienda, Paz me enseño tres de los cuales ninguno era de los que él quería hasta que le pregunte al dependiente si tenía un palo de Hockey de Wayne Douglas Gretzky firmado.

Si señorita, pero es algo caro. – dice.

No importa, - le digo; - tráigalo pagare lo que sea, - vuelvo a hablar y el me mira incrédulo.

Anda nene, le dice Paz con mirada de cachorrito.

Está bien, deme un momento, - nos dice y se va.

Gracias, - le digo a mi hermana. - ¿Cómo sabias que no se negaría? – le pregunto realmente interesada.

No se niega porque vengo aquí casi siempre y le traigo alguno que otro chocolate.

Eres increíble, lo estas enamorando, - le digo incrédula; - ¿Sabe Alan de esto?

Ella se encoge de hombros y su respuesta me sorprende. – Es para conseguir cosas para él y el equipo que vengo, siempre dice que consigo lo mejor para el equipo porque el chico que atiende a los clientes está enamorado de mí, así que no me reprendas y espera ese palo. – dice mirando un juego de palo y puck que esta frente a nosotras.