C A P I T U L O 4

Phoenix se encontraba reunido con los elegidos.

Una idea había surgido de sus pensamientos y planeaba emplearla lo más antes posible.

—Les expondré lo que tengo en mente- dio un breve repaso con sus ojos hacia todos los elegidos.

Todos observaron a Phoenix con atención.

—He decidido que implementaremos dos de sus elementos— enunció con total seriedad.

Sus rostros se tornaron sorpresivos.

—¿Estás bromeando?— indagó Leander desconcertado.

—No lo estoy Leander.

—¿Por qué mejor no lo oímos primero? Luego podremos decir que pensamos al respecto— sugirió Myron.

Asintieron y Phoenix continúo.

—Como ya están informados, Dion tiene control total sobre su elemento mediante un campo magnético conformado antes de emplearlo, lo que quiere decir que de él depende a que distancia abarca su elemento, sin embargo mientras mantengas fricción sobre él, conseguirás inmunidad.

Hice una pausa.

—Por lo tanto, voy a necesitar de Dion y Myron... Mañana haremos lo siguiente...

Phoenix explicó detalladamente el plan que tenía en mente. Estarían expuestos más de lo necesario, pero seria de ayuda para descartar la Academia.

....

La hora de partir había llegado.

Un largo día quedaba por delante.

Todo marchó en silencio, hasta la llegada a la Academia.

—Recuerden el horario pactado— pidió Phoenix.

—Aquí estaremos— respondió Dion.

Myron se limitó a asentir.

Phoenix ingresó a la sala de clases y luego de una breve introducción hacia el inesperado nuevo estudiante, la clase comenzó.

—Daremos un breve y rápido repaso acerca del concepto de química biológica para su nuevo compañero. ¿Algún voluntario?— pidió el profesor a cargo.

El profesor dio un recorrido con la mirada hacia toda la clase hasta ver una mano elevándose.

—Señorita Dalaras prosiga.

Phoenix quien se había situado al final de la tercera fila, giro su mirada a un lado para observar a la dueña de la voz.

—La química biológica es la ciencia que procura explicar los procesos vitales a nivel molecular y que comprende tanto el estudio de los componentes de los seres vivos como las transformaciones físico-químicas que acontecen en los sistemas biológicos.

—Bien, en grupos de dos quiero un resumen acerca del metabolismo celular y los procesos de síntesis así como la degradación de las moléculas— el profesor a cargo volvió la mirada hacia la estudiante— Señorita Dalaras, pido su colaboración con el nuevo estudiante y agradecería que lo orientara.

Ella asintió con amabilidad. Se levantó de su asiento y corrió su cubículo junto al de Phoenix.

—Soy Phoe Dalaras— estiró su mano hacia Phoenix quien observó su mano con nerviosismo.

A pesar de llevar consigo los guantes, Phoenix temía que a alguien pudiera resultarle extraño y comenzara a indagar hasta descubrir quién era realmente, pero si no estrechaba su mano, eso resultaría aún más extraño.

Con temor Phoenix estiró su mano hacia ella y sin oír palabra alguna acerca del guante, Phoenix tomó la mano de Phoe quien la apartó rápidamente al sentir una corriente recorrer por toda su mano. Ambos habían sentido la corriente.

Phoe sonrió divertida.

—Es algo que sucede rara vez, siento haberme sobresaltado de esa forma— se disculpó Phoe.

Phoenix formo una sonrisa amable.

—Descuida, soy Phoenix Pride.

—Bien Phoenix Pride— colocó entre medio de los cubículos el libro de dicha materia— Podemos realizar la consigna desde esta página— abrió el libro para luego señalar una de las páginas— Allí encontrarás la explicación del metabolismo celular en lo que yo realizo el resumen de los procesos de la síntesis.

Phoenix asintió para luego comenzar con la consigna en lo que duraba la clase.

Cuando la clase finalizó Phoenix se dirigió hacia el patio trasero para luego deshacerse de sus guantes y sobre la marca, llamada por el resto como símbolo representativo ubicado en su muñeca derecha como el resto de los elegidos, apoyó su dedo índice y una leve fuente de luz surgió de ella dando aviso a los elegidos de que había llegado la hora del plan.

Todo alrededor se detuvo, incluso Phoenix, señal de que Dion y Myron habían llegado. Nuevamente el tiempo prosiguió con normalidad.

—Bien, es hora— aviso Phoenix a Dion y Myron— Algo me dice que está cerca por lo que debemos ser meticulosos a la hora de buscarlo.

—Siento que debas quedar inmóvil nuevamente— se disculpó Dion y con Myron sujetando a Dion, emprendieron la búsqueda nuevamente.

Una vez más la Academia quedó inmóvil y ambos recorrieron cada rincón en cuestión de segundos para luego regresar hacia donde se encontraba Phoenix y regresar el tiempo a la normalidad.

—No había nadie que se encontrara en movimiento— informó Myron.

—No lo comprendo, también siento algo cerca y esto debería haber funcionado, pero ¿Es realmente cierto que los elementos no pueden afectarlo?— comentó Dion desconcertado.

Phoenix asintió.

—Lo he leído en el libro de ceremonia. Es el único elemento inmune al resto sin embargo su elemento puede dañarnos a nosotros.

—Tal vez se ha dado cuenta de nuestra presencia— agregó Myron.

—Si los Dambaes no quieren aliarse con nosotros, ¿Por qué lo haría el décimo tercer elemento?

—¿Qué tal si piensa que estamos aquí para deshacernos de él?

—Tienen razón, no podremos hacer esto por nosotros mismos— se quejó Phoenix.

—Déjame ayudarte entonces— sugirió una voz familiar a espaldas de ellos.

Los presentes se giraron hacia la voz.

—¿Tyr? ¿Qué haces aquí?— Phoenix estaba atónito ante su presencia.

—No creías que mi padre se quedaría de brazos cruzados, ¿Verdad?— formo una sonrisa maligna— Estamos aquí por la misma razón que ustedes.

—¿Estamos?— esta vez se oyó la voz de Myron.