Capítulo X

Pasado un tiempo, Antonella, ya esta mas tranquila, respira de manera normal, los síntomas han pasado, gracias a Andrew, que acaricia su cabello, mientras la abraza con ternura, y le da pequeños y delicados besos por su cabeza y cara.

- ¿ya te sientes mejor amor, quieres algo, agua o algo de comer? - pregunta Andrew

- sí, gracias, ya me siento mucho mejor, me ayudó mucho que tu estuvieras aquí, no se que hubiera hecho sin ti, y no, no necesito nada, gracias -

- Antonella, lo he pensado mucho y si lo que querías era tenerme en tu cama, solo tenias que pedirlo amor, yo soy un novio muy complaciente - dice Andrew moviendo sus cejas a modo de juego

- ¡Andrew!, no juegues con eso - dice ella, esbozando una sonrisa

-creo que ya voy a dormir, no te preocupes por mí, puedes ir a tu casa, Andrew-

- no, no pienso dejarte sola, eso que pasaste hace un momento, fue un ataque de pánico y si estas sola, puedes tener otro -

- de verdad ya estoy mejor, te agradezco mucho que te preocupes por mi y me encanta que me mimes, pero no puedes quedarte aquí -

- ¿porque no?, tu y yo estamos comprometidos, dentro de muy poco estaremos casados, además si tu papa se entera de que te deje sola, seguro me reclamara mi falta de sensibilidad para con mi prometida, así que decide, ¿dormimos aquí o en mi casa? -

- eres muy terco, esta bien futuro marido, mejor nos quedamos aquí, te preparare el cuarto de invitados -

- no, Antonella, no quiero que tengas pesadillas u otro ataque, me quedare contigo, puedo dormir en el sillón, si así lo prefieres, pero, en la misma habitación -

- está bien, tu ganas, pero, dormirás en el sillón, iré por unas almohadas y unas colchas para ti -

-t e acompaño -

- no te preocupes, están aquí a la vuelta -

Mientras Antonella fue por algunas cosas, Andrew hizo algunas llamadas y se quito el saco y la corbata.

- Antonella, te das cuenta de que, vamos a dormir juntos! –

- eres imposible, siempre logras lo que quieres de una u otra manera -

- ya te lo había dicho, siempre mi vida, siempre consigo lo que quiero - dijo Andrew antes de ir hacia las escaleras

Antonella acomodo algunas colchas y almohadas en el sillón, después busco un cambio de ropa, entre esos su pijama, para darse un baño rápido, mientras Andrew regresaba. Cuando salió lo vio sentado en el sillón, con un pequeño maletín a sus pies.

- mi chófer me trajo algo de ropa y artículos personales, me daré un baño, para dormir - dijo Andrew

Antonella solo asintió, algo nerviosa, después que el entrara al baño, ella no supo que hacer, se recostó un momento, pero, no lo creyó conveniente, después tomo un libro y se sentó a leer, pensando que eso era lo más tonto si ya era de madrugada, se sentía como si lo planeara para no dormir y esperarlo, sin embargo, era cierto quería verlo dormir. Por estar tan ensimismada no se dio cuenta del tiempo hasta que Andrew abrió la puerta del baño, para salir solo con un pantalón de pijama.

Antonella nunca imagino verlo así en su cuarto, por un momento no puede quitarle la mirada de encima, pero, reacciona al escuchar y ver a Andrew reír.

- espero que no incomode mi atuendo, pero, así duermo siempre, es más cómodo -

Antonella solo asintió, esta segura que su cara esta roja como un tomate, abochornada, se va hacia su peinador, no se sienta solo se mira en el espejo, toma su cepillo para peinar su cabello, no cree que pueda dormir después de ver esa imagen.

Andrew se acerco a Antonella, que en ese momento detiene el cepillo que pasa por su cabello, subió su mano hasta tomar un mechón de cabello de ella para olerlo.

- hueles delicioso - dijo pegándose más a ella, y retirando el resto del cabello hacia el otro lado, mientras paseaba su nariz de un lado a otro por el cuello de Antonella, respirando aceleradamente, hasta erizar su piel.

Ella cerro sus ojos y disfruto de su roce y el cálido aliento de su boca, que tenía olor a menta. Andrew acaricio sus brazos delicadamente mientras le daba besos en la mejilla y bajaba hacia el cuello. Antonella se sintió muy atraída por Andrew, quiere abrazarlo y besarlo, tirarse a sus brazos, pero, también tiene miedo de lo que podría pasar si no lo detiene, ella se giró y como pudo le dijo

- que creo que es hora de dormir -

Le costó mucho separase de él, pero sabe que no esta lista y que no quiere que sea de esta manera, además su primera vez tiene que ser algo especial, no algo del momento, después de un susto como el que paso y recordar siempre los dos sucesos juntos. Ella piensa que Andrew poco a poco la va queriendo y que para la noche de bodas es posible que sienta algo mas fuerte, realmente lo espera así.

Andrew respira profundamente, se nota que no le gusto, que Antonella se alejara, se sintió humillado y rechazado, después de salir casi sin ropa del baño. El, sabe que es muy atractivo, un imán para las mujeres, ha tenido en su cama a decenas de mujeres y no de cualquier clase, solo las mejores, las más bellas, y esta niña se negó a dormir con él, eso es algo que lo está alterando de varias formas, jamás lo habían rechazado y menos una chica como Antonella, que a pesar de ser hermosa, es muy sencilla y sumisa, sin aspiraciones amorosas, ni vida social, su cabeza es un torbellino de emociones, sin embargo, no se lo hará saber a ella, ya vera después como se desquita.

Enojado se acuesta en el sillón, maldiciendo en su mente por la incomodidad y la humillación, pasan los minutos y se siente todavía mas frustrado, se levanta y esta por mandar todo a la mierda, pero, voltea furioso a verla a ella y esa imagen lo desarma, es muy hermosa y se ve tan inocente, sabe que ella lo desea, el negarse solo fue un acto de protección de parte de ella y eso la hace admirarla, el, ha podido sentir como Antonella se estremecía entre sus brazos muchas veces, lo besa con pasión y deseo, solo que no es tonta y sabe que el no esta enamorado de ella, no puede estarlo, ella es tan simple, de hecho su coraje es porque ella no es mas que una niña soñadora y romántica, esperando que alguien la saque de su insípida vida.