Capítulo 13

Hola chicos, discúlpenme la demora en subir capítulos, no he tenido mucho tiempo para poder escribir ya que el liceo me consume mucho tiempo y, cuando tengo el tiempo libre también se me presentan problemas, pero voy a tratar de dedicarle un poco de tiempo al libro, gracias por ser pacientes, sin más que contar los dejo con mis otros capítulos.

Esteban

Había llegado el sábado muy rápido, y la verdad es que no me llamaba la atención salir con Laura, pero ya no podía retractarme, ya que había aceptado salir con ella. Así que me arreglé y fui a verla.

Llegando al sitio donde me encontraría con ella, la vi y estaba junto a un chico, supuse que era su novio. Y así era.

-Hola Esteban – dijo Laura levantándose de su silla para abrasarme - ¿Cómo estás? –preguntó

-Bien, ¿y tú?

-Bien. Te quiero presentar a Sebastián mi novio- dijo señalando al chico que estaba a su lado. Me presentó con él, y después de un rato se había interpuesto un silencio incómodo.

-¿Llevan mucho tiempo siendo novios?, claro, si puedo saber –pregunté al no saber que decir en un momento así.

Ella me miro, y me dio una risa burlona a lo que había preguntado.

-Claro que puedes saber, llevamos seis lindos meses- Los dos se miraron y se sonrieron. En ese momento me sentí mucho más incómodo de lo que ya estaba. Quería pararme de la silla e irme a mi casa. Pero mi realidad era otra, ya que parecía una lamparita alumbrándoles a ellos dos, yo sólo me limité a mirarlos.

-(Carraspeé)- para que supieran que todavía estaba allí. Ellos voltearon a verme, y se sintieron un poco avergonzados.

-Disculpa Esteban- dijo Laura y Esteban le siguió:

-Sí, no queríamos ignorarte, fue una falta de respeto de los dos, lo que pasa es que esta bella chica me trae loco -dijo Sebastián sonriéndole a Laura.

-Descuiden, no pasa nada- dije.

-¿Y ustedes de dónde se conocen?- preguntó Sebastián.

-Amor, nosotros nos conocemos de la prepa- respondió Laura.

-Sí, nosotros estudiamos juntos en la prepa, hasta que me fui del país con mis padres, y hace un mes regresé –dije.

-Fueron muchos años sin vernos- me siguió Laura- ¿Y por qué te fuiste? Todos en la prepa nos impresionamos al saber que te irías.

-Me fui, porque a mi papá le habían ofrecido un nuevo puesto de trabajo. Pero ustedes no fueron los únicos en sorprenderse, a mí también me sorprendió mucho- dije.

Y sí que me llegó con sorpresa. Mi papá había llegado un día a casa y nos contó sobre su nuevo puesto de trabajo, a mi familia y a mí nos había encantado esa gran noticia, pero mi sonrisa se borró cuando dijo que era en Italia. Y la verdad es que no me quería irme de mi país, estaba triste de tener que irme y sobre todo dejar todo lo que conocía (mis amigos, familiares, y sobre todo mi “Pequeña Alejandra”).

Sentía miedo ya que tenía que adaptarme a otro país, y escuela que no conocía. Un día estaba feliz con mis amigos y al otro me estaba mudando de país.

-Ah- dijo Laura- ¿Y cuál fue tu motivo para regresar?- preguntó tomando un sorbo de su malteada

-A mi papá le propusieron la idea de volver al país, pero tendría el mismo cargo- tomé de mi malteada- Y la verdad es que nos alegró a toda la familia esa gran noticia, y no lo dudamos y regresamos- dije con una sonrisa recordando a Alejandra- ¿Y cómo te enteraste?, pensé que nadie sabía.

-Cómo te había dicho antes, todos en la prepa estábamos impresionados con esa noticia, y surgieron muchos rumores (como que te habían expulsado, o te irías de la ciudad), pero Alejandra fue la que nos aclaró todo- suspiro- Creo que ella le afecto mucho, ustedes siempre se la pasaban juntos, hasta yo llegué a creer que eran novios- dijo Laura.