Mirage: El Secreto de Zed

Cuando lo vi por primera vez supe que en sus ojos azules había un gran secreto oculto. Supe que era diferente al resto, que había algo en él que lo hacía resaltar de entre todos los que lo rodeaban y que no sólo se debía a su aspecto tan diferente con su piel pálida y su cabello blanco; había algo más que me era difícil de descifrar. Lo que nunca imaginé es que mi atolondrada vida se cruzaría con la suya y que gracias a eso descubriría su secreto de la forma más estúpida posible. Y por supuesto, nadie me advirtió que tal secreto cambiaría mi vida radicalmente. Pero el secreto de Zed solo fue el inicio de una red de mentiras y secretos que deseé nunca haber descubierto, porque allí cambió todo lo que conocía y todo lo que solo creía conocer. Ahora todo parece ser solo un espejismo.