INTRODUCCIÓN. Un nuevo comienzo

— ¡Última llamada a Buenos Aires!— la voz femenina del altavoz seguía resonando en mi cabeza mientras me acomodaba en el asiento del avión.
Mi vida estaba a punto de dar un giro inesperado, mi padre fue ascendido en su trabajo y le exigieron que se trasladara a la ciudad de Buenos Aires, obviamente como era menor de edad no podía quedarme allí y debía ir con él.
Nuestro plan se adelantó un año, la idea era que yo terminara el secundario allí, en mi ciudad y el siguiente año iríamos a vivir a la capital para que pudiera tener mejores oportunidades. Mi hermano hizo lo mismo, hace dos años que él estaba viviendo allá con nuestros tíos, papá viajaba cada tanto para poder conseguir una casa donde mudarnos. Cuando nos avisaron que debíamos trasladarnos, automáticamente viajó de emergencia a Buenos Aires a señar una de las tantas casas que había visto. Me dijo que era muy bonita y muy cómoda para los tres, ya que mi hermano iba a volver a vivir con nosotros.
Y aquí estábamos, a punto de que despegara este avión, nos esperaban casi dos horas de vuelo donde aprovecharía a dormir un poco y calmar la ansiedad.
— Todo irá bien. — me dijo mi padre agarrándome la mano y mirándome fijamente. Lo único que puede hacer en ese momento fue esbozar una sonrisa lo más forzada posible. Sinceramente quisiera creerle, quisiera pensar que todo irá bien, pero las cosas estaban por cambiar y no soy una persona que se acostumbre rápido, todo lo contrario, me cuesta horrores, y más si se trata de alejarme de toda mi vida y principalmente de mis dos mejores amigos, las dos personas que estuvieron a mi lado desde los 3 años hasta este momento. Será muy difícil manejarme sin ellos, no suelo ser una persona muy sociable y amigable que digamos.