Cap. 38 Un día agitado

En Arx había una inusitada actividad la mañana de Valborgsaften, porque siendo que cada año recibían más aspirantes de diversos puntos de la geografía, ese día estaban todos en el patio despidiéndose, ya que marchaban a sus casas para pasar la semana de Valborgsaften con sus familias.

Algunos Arzhaelíes como Sam, Amy, Elar y Daira, aunque no formaban parte del grupo que impartía instrucción a los aspirantes, se habían ofrecido para organizar la partida de los chicos, porque, en cualquier caso, no habrían podido hacer nada de lo que acostumbraban con tantos chicos invadiendo el patio central.

Una vez que todo había concluido, Sam se acercó a Garlan y a Alaric que conversaban cerca de las escaleras.

• Pues si no te das prisa otro lo hará  --  estaba diciendo Alaric en tono burlón
• ¿Y qué te hace pensar que me interesa?
• Pues es linda ¿no?
• Puede ser la más bella del mundo, pero una criatura que habla tanto no es el sueño de mi vida  --  dijo Garlan con su habitual mal humor
• Pero tal vez tú seas el sueño de la de ella, aunque aun no entiendo cómo  --  dijo Sam al ver hacia donde se dirigía la mirada de Alaric
• Métete en tus propios asuntos, Niña  --  dijo Garlan y Sam sonrió
• Por eso estoy aquí, vine a preguntarles si vendrán a casa esta noche
• Lo siento Sam, pero iré a Baradwyss o mi padre terminará por cumplir la amenaza que lleva haciéndome todo lo que va de año  --  dijo Alaric, Sam asintió y miró a Garlan
• Olvídalo Niña, ya te veo lo suficiente en el trabajo como para hacerlo también en mis ratos libres
• De acuerdo gruñón, pero recuerda que mañana debes estar en la terminal a menos que quieras que tus niñas vayan personalmente a tu departamento e interrumpan inconvenientemente tu posible diversión
• ¡Niña!  --  exclamó él mientras Sam se alejaba riendo  --  Baldr debe considerarme un pésimo sujeto para mandarme semejante castigo
• Dudo que ninguno de nuestros dioses pierda el tiempo en algo así  --  dijo Alaric y también se alejó antes de sufrir las consecuencias del mal humor de Garlan

Los Arzhaelíes se marcharon casi todos temprano para preparar la celebración de la noche y alistarlo todo para recibir a los niños al día siguiente. Sin embargo, Dan, Giulian y Jonathan se habían quedado incordiando en Arx y supuestamente esperando a Iván que debía dejar todo preparado para que los Krigers que estaban de guardia tuviesen también una celebración apropiada. Elar también se había quedado para ayudar a Iván, pero una vez que terminó de hacer lo que él le había asignado, se detuvo a conversar con un grupo de compañeros de trabajo entre los que se encontraba Bran Pearson.

Todo el cuerpo Arzhaelí sabía que Bran había hecho hasta lo imposible por atraerse la atención de la callada Elar, pero siendo que ella nunca en la vida había tenido ojos para nadie más que no fuese Iván, todos los esfuerzos del Arzhaelí habían resultado inútiles, y cuando se enteró del compromiso entre ella e Iván, se dio dignamente por vencido y ahora salía con otra Arzhaelí. No obstante, y aunque Iván era el ser más pacífico del planeta, cuando salió y vio a su mujer hablando con el Arzhaelí y que este por algún motivo, que a los ojos de Iván adquirió la categoría de crimen, había sujetado el brazo de Elar mientras le decía algo al oído y ella reía, avanzó hacia ellos con expresión tormentosa.

• Tenemos problemas  --  dijo Jason y sus compañeros se giraron a tiempo para escuchar a Iván
• ¡Pearson, quítale las manos de encima a mi mujer y aléjate de ella!
• ¡Demonios!  --  exclamaron Dan y Giulian cuando le vieron los ojos a Iván y corrieron hacia el grupo

Sin embargo, habría sido mucho esperar que alguno de ellos fuese tan rápido como Iván que ya los había alcanzado y había lanzado a Bran a varios metros.

• ¡Iván!  --  había exclamado Elar y al mismo tiempo había corrido hacia Bran que intentaba incorporarse
• No de un paso más, señora Natchzhrer  --  dijo Iván que siendo más rápido ya le había bloqueado el camino

Aun sabiendo que era suicida, Dan y Giulian se acercaron y sujetaron a Iván mientras Jonathan sacaba a Elar de escena.

• ¡McKenzie!  --  exclamó Iván, pero ya Jonathan había se había desmaterializado con Elar
• Vamos hermano, cálmate  --  le dijo Dan

Jason había corrido a buscar Armel o a Waleska que después de Ivan y en ausencia de Samantha, eran los que tenían más dominio sobre las mentes ajenas, de modo que se presentó cuando Dan y Giulian hacían esfuerzos por tranquilizarlo.

• Iván  --  le dijo Armel y arriesgándose del mismo modo que lo estaban haciendo Dan y Giulian, se plantó frente a él e ignorando el carmesí de sus ojos lo miró directo a ellos  --  Iván escúchame

Sin embargo, lo que le dijo suponiendo que le hubiese dicho algo, nadie lo escuchó, pero unos minutos después sus ojos comenzaron a aclararse hasta adquirir su color habitual.

• Llévenlo a casa  --  les dijo Armel