Capítulo 15: Descubrimiento.

—¿Quién es Daniel Cañedo? ¿Y por qué tienes fotos de él?...

Ríe. —Veo que por eso tardaste mucho en bajar, ¿revisabas mis cosas eh?—intenta evadir el tema.

—Quería curiosear, pero responde mi pregunta...—la ve a los ojos.

—Ay ya, no hagas drama; son identificaciones falsas, perfiles falsos que nos pidieron en la escuela, eso es todo...—responde ya un poco desesperada por la presión de Nicky.

—Pero, ¿con fotos?—ríe. —Me parece muy real para ser falso, o que, ¿le robaste la identidad a un chico de internet e imprimiste algunas fotos de él?—sonríe mientras ve cómo Nataly se confunde y baila los ojos ante las preguntas.

—¿Pero por qué te molestas?, ¿ocultas algo?—insiste él.

—¡No es eso! Pero ya me enfadé que me estés jodiendo con eso, ya te respondí Nicky, carajo, ¿que más quieres que te diga? Mejor dime que respuesta quieres escuchar y así nos quitamos de problemas...—suspira y mira por la ventana.

—Que curioso... que con una simple pregunta te enojaste...—ríe. —¿Segura que no ocultas nada?—pregunta intentando buscar la mirada de Nataly.

—Fue un proyecto para la escuela, pregúntale a Johanna... ella también lo hizo, las fotos las imprimí también, y solo son 3, así que no exageres, no es como que descargue todo un álbum familiar—contesta Nataly, las preguntas y presión de Nicky la comienzan a molestar.

—Está bien, ¿pero porque tener esto guardado en un cajón? De recuerdo supongo—ríe Nicky.

—Se me olvidó tirarlo, ademas creo que es un buen trabajo, no fue nada fácil imprimir todo eso... ¿ahora sí vas a dejar de joderme con eso?—lo ve a los ojos y cruzada de brazos.

—No entiendo porque te enojas...—dice él.

—Por que no dejas de presionar con tu pregunta, ya respondí, pero como siempre intentas buscar el lado negativo, no, ese no un chico con el que me acuesto o me pienso fugar, tranquilízate...—baila los ojos.

Nicky comienza a reír a carcajadas. —Yo estoy tranquilo, tú eres la que está alterada, loca...

—Ay ya...—abre la puerta del auto y se baja.

—Carajo... ¡Nataly! —le grita desde el auto mientras ve como ella se aleja.

Ella voltea y le para el dedo.

Nicky extrañado por el comportamiento de baja del auto y la sigue.

—Nataly, ¿qué es lo que te ocurre?—la intenta detener.

—No estoy de humor para tus bromas, ve a joder a alguien más—camina hacia su casa y cierra la puerta.

Nicky suspira y sube a su auto, arranca y se va con un sabor amargo.

Johanna ve entrar a Nataly. —¿Qué sucedió? Creí que ya estabas comiendo...—pregunta mientras ve que Nataly sube hacia su habitación.

Nataly sube y comienza a revisar su cajón, revisa sí los artículos de Daniel están en orden, y no se encuentran en su lugar.

—¿Qué carajos está pasando? ¿Ya me explicarás?—Johanna se coloca de pie en la puerta esperando una respuesta.

—Se metió a nuestro cuarto a husmear, encontró los papeles de nuestras antiguas identidades, me hizo preguntas y me enoje... me baje del auto y me vine

—No se yo, pero si no quisiera que me descubrieran no me comportaría de esa forma, sabrá que algo extraño sucede y querrá indagar, lo más seguro es le tomo alguna foto a los documentos, pero será inútil saber si le pertenecen a una persona real...—dice Johanna mientras se sienta sobre la silla que tienen en la habitación.

—Eso se que no pasará, pero me preocupa algo...—Nataly se sienta en la cama y comienza a analizar la situación.

—¿Qué cosa?

—Algunas de las cosas que sabemos que deberían estar aquí, no están...—dice Nataly.

—¿Cómo que?—pregunta Johanna, con cierta incredulidad.

—Para empezar, el árbol que nos debería llevar de nuevo a nuestra realidad, no está...

Johanna ríe. —Se supone que debe crecer, espero que sea eso, y si no lo es, ¿que más da? No volveremos—responde con alivio y sin preocupación.

—¿Segura?—Nataly la mira con una mueca de molestia y confusión.

—Ya lo hemos hablado muchas veces, aquí nos quedaremos, estamos mejor aquí que allá, siempre huyendo y solo esperando a que nos asesinen. Aquí haremos nuestra vida y ya—Johanna se levanta de su silla y toma su laptop.

—Otra cosa es que algunos acontecimientos que debían suceder no sucedieron, nuestras casas no existen, y no sabemos si la bruja está aquí, ¿no te preocupa eso?—agrega Nataly.

Johanna da miedo vuelta. —Eso no lo había notado... pero tal ves se deba porque estamos moldeando esta realidad, la bruja anciana debe estar por ahí y nuestras casas es obvio que no estarán aquí, el que no esté siquiera sus cimientos no significa nada...

Nataly suspira. —Solo espero que no encuentre información de nuestras antiguas identidades, esta realidad es cada vez más extraña...

Johanna sale de la habitación dejando a Nataly sola.

Nataly se sienta cerca de la ventana y medita, siente miedo que de pronto todo salga mal, después ve llegar de nuevo el auto de Nicky y ve que de acerca a la casa. Toca la puerta y Johanna le abre la puerta.

—¡Hola!—Johanna sonríe.

—¿Puedo pasar?—pregunta Nicky con una sonrisa.

—No tengo órdenes de dejarte pasar—sonríe. —Pero pasa...—responde Johanna.