Capítulo XXXVI

Conociéndonos un poco más.

No puedo creer que también hoy domingo tuve que salir con Aike, lo bueno que de nuevo mi prima nos acompañó, si no hubiera indo ella quizás me mato, sé que no puedo escapar de estas citas, a fuerza tenemos que realizarlas. Porque de nuevo mi amigo no pudo ayudarme, con amigos como Mark que me mete en líos y luego ni me ayuda a salir. Su excusa barata la misma que la del sábado, la diferencia que ayer fue entrenamiento y su celular descargado, por eso no pudo acudir a socorrerme, que se le había olvidado. Hoy era el partido, que fuéramos apoyarlo, ni que estuviera loco, sí, para que todos sepan en el salón que soy novia del azabache, sí, sé que el sol no se puede tapar con un dedo, y tarde o temprano lo van a saber, pero espero que aun no. Le en pasado por alto su falta de ayuda de Mark, lo en perdonado, se que me ayuda siempre, pues es cierto no todo gira a mi alrededor, Mark también tiene derecho a vivir su vida.

De nuevo fuimos al cine, pero también paseamos por la plaza, fuimos de compras, la única feliz era mi prima, yo solo disimulaba, eso de fingir ya se me da un poco más. Las miradas curiosas no faltaron de nuevo, lo bueno que no nos encontramos con nadie conocido, me imagino que están en el partido de la escuela, conociéndolos son muy fanáticos, además, también son muy unidos y para apoyar siempre se cuenta con ellos.

Tuve que recibir un consejo innecesario, cuando estábamos comprando helados, mientras mi prima y Aike eran atendidos por una de las chicas, a mi la otra chica que me atendió, me dio su consejo, me dijo que está bien que seamos amigos y nos apoyemos, pero que yo estaba siendo un muy mal tercio, que buscara una excusa para que yo dejara a mis amigos, para que ellos disfrutará su momento como la pareja de novio que son. No lo podía creer, le agradecí, que lo tomaría en cuenta y me alejaría, si como si pudiera zafarme tan fácilmente de mi cita, que al parecer piensan que es la cita de mi prima y Aike.

Nos alejamos de la heladería, seguimos caminando, ellos iban muy cómodos charlando, entonces les puse más atención, en efecto ellos parecen una pareja, van alegres y cómodos, mientras yo que soy la novia y debo estar haciendo lo que mi prima hace, no lo hago. Ya veo que la persona que sobra soy yo, claro que por eso nos ven de esa forma. Seguimos con el paseo, parece como si se hubieran olvidado de mí, tal vez pueda huir y ni en cuenta.

Fuimos a comer pizza, charlamos los tres, mencionábamos algunas cosas personales, al parecer Aike, si estaba al pendiente de mí, entonces me he dado cuenta, que él es muy detallista, parece que no pone atención, pero en realidad está al pendiente.

 Eso es algo raro, pues no todos los chicos somos así, pero él es diferente, puede ser que, ya que no es de todo un chico, y su preferencia tenga algo que ver. Puede ser eso, pues ya otra cosa no se me ocurre, si no tuviera presente mi prima, le preguntaría un poco más sobre ese asunto.

Entonces entendí que tal vez, él trata de ser mi amigo, que como yo solo quiere llevar las cosas en paz. Si es, así las cosas, pueda llevarme bien con Aike, claro siempre y cuando yo este siendo Kai la chica, no quiero que se enamore de mi como Kai el chico, amigos sí, pero más allá nada de nada. El resto del domingo nos la pasamos increíble, me relajé un poco más, esta no era cita de enamorados, esta era una cita de amigos. Conocernos como amigos, para poder estar mejor. Todo el tiempo me agobié, pues estaba viendo las cosas desde la perspectiva de una cita de novios, por eso no me sentía cómodo. Pero desde un principio era para conocernos como simples amigos, por eso él se preocupaba por mí, Aike solo quería hacerme sentir bien.

Por eso él siempre estuvo relajado, nunca nervioso. Yo con mis malas interpretaciones, claro con las sartas de tonterías que Mark me dijo, por eso yo me sugestioné ante estas salidas.

No puedo negarlo, salir con Aike son salidas inolvidables, quizás mas adelante le pida algunos consejos, para cuando yo tenga una verdadera cita con esa chica que me robó el corazón. Pero de todas formas no pienso bajar la guardia, pues es un Tremblay, tal vez nosotros terminemos con toda riña pasada, pero no quiero ser traicionado, por eso tendré mucho cuidado con Aike Tremblay. No se que nos depara el futuro, pero espero que pasé rápido los años, y termine esta pesadilla, ya quiero dejar de ser una chica, quiero volver hacer yo, Kai Anderson, un chico que se pueda casar y tener su propia familia, si es con ella mucho mejor.