De Nuevo Tú

Capítulo 1

El certamen de belleza de la universidad, estaba siendo trasmitido por televisión era la primera vez que eso sucedía. Pues no habían tenido, ha patrocinadores tan ilustres que tomaron la oportunidad, para dar a conocer sus nuevos productos de belleza. Y que mejor haciéndolo con señoritas jóvenes y hermosas.

Las candidatas de cada facultad, debían lucirse en cada acto en la pasarela luciendo elegantes trajes de gala. Demostrando sus habilidades y talentos siendo el desfile de traje de baño el más destacado, dejando ver los finos y curvilíneos cuerpos de cada participante.

–¿Díganme? Están disfrutando de la noche –pregunto el animador.

Los presentes gritaron apoyando a las participantes de su facultad.

–Kimberly…

–Alejandra…

–Lizbeth…

Gritaban estudiantes de cada facultad, de cada carrera. Adelante en la tercera fila del escenario Derek se encontraba vestido de manera casual con sus vaqueros negros, la camiseta blanca y una cazadora negra de cuero, con el cabello alborotado miraba atento que saliera alguien especial para él.

–A continuación, por la carrera de gastronomía. Tenemos a la señorita Nora García. 

Las barras se escucharon. Él a pesar de ser de otra carrera de otra facultad también se levantó aplaudir, sin impórtale que le digan sus compañeros de carrera. Nora salió a la pasarela luciendo espectacular con aquel traje de baño, portando la banda de su carrera. Su larga cabellera negra sedosa ondulada, era lo que más le atraía de ella, además del ligero maquilla portando en su rostro, la hacía destacar su belleza natural.

Se mantuvo de pie aplaudiendo con más fuerza, y como no hacer si era su chica la que estaba modelando.

–¡Bravo! –dijo emocionado. Ella lo encontró con la mirada enviándole un beso volando –¡Te amo! –grito con más ánimo.

….

Lejos en una gran mansión estarían viendo, el concurso de belleza una familia rica en el ámbito de hoteles y turismo. Se encontraba un hombre de unos cuarenta y cinco años sentado junto a sus dos hijas la mayor llamada Ana Salvatierra y la menor Jenny Salvatierra. Su padre un rico y poderoso hombre de negocios, miraba con interés aquella jovencita de cabellera negra. Quedando cautivado por cada fino y suave tono de ella.

–Papá, papá –llamo Ana.

–¿Qué pasa hija? –dijo el hombre.

–Tu dime te quedaste congelado –contesto ella.

–Nada hija. Solo quede impresionado con este desfile, que realizo la universidad –respondió.

Su hija lo miro.

–Ana ¿Por qué no participantes? –hablo Jenny su hermana menor.

–Si. Hubieras ganado hija –comento su padre.

–No me gustan esas ridiculeces –contesto ella.

–Estoy de acuerdo con papá. Eres muy bonita, hubieras ganado –hablo su hermana tomándola del rostro.

–Bueno ya. Sigamos viendo, quiero ver si gana mi carrera de administración hotelera.

El concurso continuo hasta llegar a la parte final de coronación, el animador con los resultados en mano como todo animador ponía el suspenso manteniendo a todo el público en trance.

–Esta ha sido una gran noche. Muchas señoritas muy talentosas, y hermosas se han lucido en este escenario, pero solo puede haber una ganadora y es… –las luces se movieron aumentando la tensión con música de suspenso de fondo –la carrera ganadora de nuestra universidad es… –más suspenso –la reina de nuestra universidad es… la señorita Nora García –aplausos de los estudiantes y presentes –de la carrera de gastronomía.

Ana refunfuño decepcionada de que su carrera no haya ganado. Mientras su padre aplaudía, encantado de que ella haya ganado.

–Sabía que ella iba ganar –dijo su padre el señor Lucio Salvatierra.

–En serio papá –dijo Jenny.

Él asintió –desde que salió note un gran potencial. Es bella y tiene mucha personalidad.

Ana percibió interés de su padre por Nora –papá –dijo con seriedad mirándolo atenta.

El señor Lucio se limitó a sonreír a su hija, poniéndose de pie –bueno niñas es mejor ir a dormir –les dio un beso en la frente a cada una de ellas retirándose de la sala.

Ana lo siguió con la mirada donde su padre se dirigió directo a su estudio ella lo siguió tras sin que se diera cuenta se acercó a la puerta del estudio de su padre. Escuchando.

–Alberto. Por favor envía unas flores, para la ganadora del concurso de belleza que se realizó en la universidad de mi hija.

–….

–Gracias –colgó la llamada.

–Papá. –Ana entro al estudio.

–Hija –dijo sorprendido.

–Cancela ese pedido –pidió ella.

–Hija es solo un regalo. Recuerda que yo también colabore con este evento –soltó su padre tranquilo.

–Papá. No creas que no note como la mirabas –hablo ella.




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