El destino que nos eligió

CAPITULO 16

Llevo sentada en el suelo abrazando a Andrea y Lía por lo menos una hora, no se quien ha llorado más pero me podría hacer una idea cuando soy yo la que he acabado con un ataque de ansiedad. Y el motivo de que yo esté más atacada que la propia hermana es que esto me está superando, nunca imaginé que esta etapa no iba a ser solo estudiar y crecer académicamente, no pensé que sería tan duro.

Pero una vez más me estoy dando cuenta lo equivocada que estaba, entrar en la universidad significa hacerse mayor, significa afrontar los problemas de la vida tu sola, pero luego llegan las personas que te desestabilizan, esas que no sabes que serán para ti una gran familia y son los que te acompañarán en el camino de la universidad por que es encontrar primeras veces en todos los sentidos, ahí es cuando el miedo viene de verdad, de cómo afrontarlo y de cómo luchar. Por eso se que debo recomponerme, ellos estuvieron junto a mi cuando los necesité, estuvieron con Lía cuando lo necesito y por eso ahora nos toca estar con Ethan.

Somos una familia, una que se ha creado en escasos tres meses y medio, porque la vida no entiende de tiempos sino de sentimientos y esa es la razón por la que me encontraba ahí estaba llorando por el dolor que debe estar sintiendo la persona que estoy empezando a querer, persona de la cual no sé absolutamente nada, entiendo perfectamente su dolor pero esta no es la mejor manera de afrontarlo.

¿Cómo se supone que debo estar para él y ser su apoyo si huye en el momento que debemos estar unidos?

Los minutos van pasando y con ello mi cabeza va explotando por segundos.

- Debo ir a buscarlo.- Me levanté rápidamente pero antes de llegar a la puerta Lía se encontraba abrazándome y haciendo fuerza para retenerme, ella es algo más fuerte que yo pero si hiciera fuerza podría soltarme sin problema pero en el fondo se que no es eso lo que quiero.

- Debes relajarte, ¿cómo puedes ser tú la que esté tan alterada?.- Me pregunto Lía, entendía la incertidumbre, si la situación fuera al revés le hubiera preguntado lo mismo

- Por que estoy cansada de que cada vez que se supone que alguien debe confiar en mí huye y parece que no me necesite.- Las dos me miraron impactadas pero entonces me dirigí a Andrea.- Si, puedo parecer una cría porque sois vosotros los que nos necesitáis pero es que no entiendo que he hecho para que no pueda confiar en mí, sé que no somos suficiente maduras todavía y que hay cosas que nos quedan grandes pero como se supone que debemos ayudar y crecer si no dejamos que eso suceda.- En ese momento mi cuerpo falló y entonces volví al suelo, a abrazar a la chica que nos necesitaba de verdad.

Podía sentir que respiraba cada vez más rápido pero entonces de repente escuche como la puerta se abría de golpe, Ethan entró corriendo como si buscara algo cuando de repente frenó en seco, me vio abrazada a su hermana en el suelo y no lo dudo, se tiró hacia nosotras. Intenté apartarme, era un momento que necesitaban pero él me agarró de la cintura y los tres nos abrazamos, y justo en ese momento yo sentía como si el golpe me lo dieran a mi.

Sentía el dolor de los hermanos Morgan en el fondo de mi corazón, sentía que esto iba a ser el principio de mi relación con esta familia.

Transcurrida una hora por lo menos desde que todos nos habíamos relajado un poco Ethan decidió por primera vez quedarse a esta noche a dormir conmigo, él tenía claro que necesitaba de mi para pasar esto y así dejaba a Andrea su habitación, y yo encantada de pasar más tiempo a su lado ahora que me necesita.

- Ethan, siento el ataque que he vivido antes, eres tú quien debería sentirse mal y me he comportado como una cría.

- Shh, es lo más normal del mundo, tu misma lo has dicho, solamente tenemos 18 y 21 años, estamos pasando demasiadas cosas y para sumar nos estamos enfrentando a la universidad.

- Menos mal que no hemos empezado una relación.- Su cara se transformó, se suponía que debía ser una broma pero obviamente no sonó así y mucho menos era el momento para hacerla- Lo siento, no sé lo que digo, estoy demasiado nerviosa.

- Te he entendido pequeña, pero debo pedirte una cosa.

- Lo que necesites.

- Acompáñame a casa.

- Vives aquí al lado, además pensé que querías quedarte a dormir.- Él me puso la mano en la mejilla y me miró a los ojos.

- Me refiero a Montpellier, a casa, a ver a mi madre y afrontar todo. Tu y los chicos.

No hacía falta que contestara, me tiré a sus brazos y se lo demostré, ahí estaría si me necesitaba, así pase toda la noche abrazada a el dandole todo mi apoyo y amor que necesitaba.

Dos días después nos encontrábamos preparando todo para ir a Montpellier, aprovecharemos las vacaciones por acción de gracias que empezaran en un día solamente por tanto no perdemos clases casi. Los chicos no se lo pensaron ni una vez si venir o no, Denna fue algo más complicado pero cuando Ethan habló con ella algo cambió, no era la más feliz por tener que venir pero estaba dispuesta a hacerlo para estar junto a su amigo.

Lo bueno es que el viaje no era largo ni mucho menos, solamente duraba una hora, éramos ocho y decidimos dividirnos en dos grupos, como mi coche era el más grande junto al de Ethan por qué eran los jeeps, fueron los que decidimos utilizar.

Le estaba dejando mi vida a Liam porque desde luego yo iba a ir en el coche con Ethan, le hice prometer mil veces que lo cuidaría.

- Por dios hermana cuántas veces te lo tendré que repetir, vas a ir detrás o delante del coche todo el trayecto, solo es una hora, no lo voy a matar.- Yo lo miré entrecerrando los ojos pero en el fondo sabía que tenía razón.

- Esta bien, pero que sepas que por que no hay otro motivo es por lo que te lo dejo.- Él asintió y se fue, a él todo esto le daba igual, claro no era su jodido coche.

Volví a la habitación e intenté acabar de hacer la maleta, se supone que íbamos una semana, aprovechamos y celebramos ahí acción de gracias, al menos esa era la idea pero teníamos que tener claro que puede pasar cualquier cosa una vez lleguemos allí.




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