Mentiras, una y más mentiras....

La cita "perfecta"...

¿Bueno ustedes no han tenido una idea estupenda y la ejecutan, pero después se dan cuenta de que era una idea pésima, terrible? Bueno eso es lo que me está pasando a mí en estos momentos, les contare de mi ´´grandiosa´´ idea que se me ocurrió, espero y que hallan notado mi sarcasmo, lo que pasa es que después de encontrarnos con Sebastián en su cita a ciegas, nos lo topamos después en una plaza comercial y nos contó como ocurrió su cita, en resumen, fue un desastre descomunal según él, bueno a partir de eso se me ocurrió de que podría salir con mi mejor amiga, ya saben Amanda y pues arregle para que se encontraran, aiden me advirtió que podría ser una idea pésima e insistió para que no lo hiciera, pero como soy un poco-demasiado-terca pues lleve a cabo mi plan, para que no se pusieran un poco incomodos con la cita, también propuse que fuera una cita doble y pues aquí estamos, con Sebastián y con Amanda, peleados, por culpa de una estupidez, según mi parecer ya que eso me parece una estupidez, bueno para mi amiga no verdad porque ahora está mirando con un poco de odio, o bueno con un odio puro al hermano de mi ´´novio´´, aunque no sé si lo sea ya que no hemos hablado del tema hasta ahorita, pero actuamos como tal, pero bueno ese no es el caso, lo que pasa es que el problema es que mi amiga se encontró con Sebastián en una fiesta de un amigo que tienen en común, bueno lo que paso es que mi amiga piensa que Sebastián es un patán, por cómo había tratado a una chava que está un poco loca o bueno realmente si está loca porque necesita pastillas para el problema que tiene, pero yo no soy quien para juzgarla, aunque bueno yo también la conozco porque estaba en la misma área que yo cuando estaba en el hospital, pero ese es tema aparte y yo estoy empezando a divagar demasiado, bueno pues la loca lo confronto en la fiesta en que lo había seguido, le reclamo el por qué no la amaba y todo el royo, porque ella desarrollo como una especie de obsesión con él, pero mi amigo como buena persona que es pues le dijo delicadamente que no la quería y pues ella enloqueció un poco, mi amiga al no saber que la loca estaba loca, pues pensó que era un patán de lo peor, y pues ahora está enojada conmigo,  con aiden, con él y con el mesero, con el mesero porque le trajo mal su orden y por qué en todo el momento que hemos estado aquí la ha estado acosando, no la culpo del todo ya que ha estado haciendo lo mismo conmigo, pero ya Aiden se está dando cuenta y creo que va a hacer un espectáculo en estos momentos, porque el mesero está viendo mis pechos descaradamente, lo cual me puso incomoda.

  • Mira amigo o dejas de ver a mi chica y a su amiga, o te dejo tu linda cara deformada. - menciono aiden un poco o bueno muy molesto.

El mesero nada más se quedó pensando, como si estuviera opción de escoger, lo cual me puso un poco en alerta, ya que era más que obvio que aiden, no le estaba dando a escoger.

  • Amigo, si entendiste, ¿no?  - le secundo Sebastián a su hermano.

Eso basto para que se fuera el mesero pervertido.

  • Sabes que, ya no soporto esta situación, me voy. - menciono un poco irritada Amanda.
  • No, espera. - trate de que no se fuera Amanda.
  • ¿Por qué quieres que me espere? - se cruzó de brazos.
  • Por qué te tengo que explicar un malentendido.
  • ¿Cuál malentendido? Si todo está más que claro.
  • No, claro que no Amanda, te tengo que explicar muchas cosas.
  • No, a mí no me tienes que explicar nada.

Con esto último se fue, Sebastián fue de tras de ella, también yo trate, pero aiden me lo impidió, agarrándome del brazo.

  • ¿Por qué no me dejaste ir detrás de ellos?  - le reclame a aiden.
  • No tienes por qué meterte, es su asunto. – esto lo dijo un poco molesto, lo sé ya que note como se tensó.

Lo que dijo me dejo pensativa, ya que parecía que le molestaba ese asunto, tan solo lo deje pasar ya que a lo mejor y estaba exagerando.

  • Bueno ahora tu y yo tenemos una cita pendiente. - lo dijo tan feliz y esa sonrisa suya tan moja bragas, como diría Amanda. Aunque me saco un poco de onda, debido a su repentino cambio de humor, mas no le di tanta importancia.
  • Ah, ¿sí?
  • Sí, tenemos esa cita pendiente.
  • Perdón, pero yo no recuerdo tener una cita pendiente contigo. - se lo dije tan burlona como él.
  • Pues yo si me acuerdo de que me debes una cita.

Quería borrarle esa sonrisita suya, pero sabía que después me arrepentiría ya que también me gustaba a veces.

  • Ándale pues, vamos a esa dichosa cita.

Al decirle esto último, sonrió como niño en navidad con su juguete en navidad.

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Pasaron dos semanas, desde de la supuesta cita que le debía a aiden y la verdad fue una terrible cita, creo que la peor desde que tengo memoria, se preguntaran que por qué digo eso, bueno les contare, primero empezó bien, me llevo a un pequeño restaurante muy lindo, al cual volvería a ir pero sin él, desde que llegamos una mesera se le quedaba viendo con la baba de fuera, se le insinuó en toda la jodida cena, incluso en mis narices y el estúpido de aiden no le dijo nada, también me ofendió la zorra/mesera ¿y que creen?, el imbécil tampoco me defendió, después cuando estábamos comiendo el postre llego una ex del estúpido la cual también se le insinuó y también me ofendió, y como adivinan tampoco me defendió, tan solo se carcajeo con la zorra número dos, harta del asunto le dije o más bien le ordene que ya me quería ir a mi casa, pero el muy pendejo, tan solo me dijo que regresara con cuidado a mi casa y  se regresó con la zorra número dos, con la poca dignidad que me quedaba me regrese a mi casa, llame a Sebastián y a Amanda para contarles lo sucedido, como buenos amigos que son, fueron de inmediato a mi casa, les conté todo, llore con ellos, me aconsejaron y por increíble que parezca ellos no pelearon ni nada en lo que estuvieron conmigo.




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