Las 4 Diosas de los elementos

Un amor que desafía la eternidad. Una guerra que se niega a terminar.

En la Antigüedad, la paz del Olimpo se rompió por la brutal Guerra de los Dioses, orquestada por Hades y las fuerzas oscuras. Para proteger a sus cuatro hijas —Ignia (Fuego), Aura (Aire), Marina (Agua) y Gala (Tierra)— de un destino de tortura eterna, Zeus tomó la decisión más desgarradora: matarlas él mismo, asegurando su reencarnación en una nueva era.

Al presenciar este sacrificio, los ocho Caballeros, conocidos en los reinos celestiales como los Amantes de las Diosas, juraron ante Zeus reencarnar junto a ellas. Su única misión: protegerlas en el mundo mortal y guiarlas para que recuperen la Divinidad que les fue arrebatada.