Capítulo 15 "Ser tu misma"

Ser tu misma

Golpeo la puerta y me ordeno a no sonrojarme cuando el maestro me mira. ¿Quién ha llegado tarde? ¿Por qué dicen Cristina?

-Tarde, Bowen.

-Lo siento.

-¿Razón o justificación?

Me quedé dormida.

-Me tarde arreglando.

Muchos escuchan mi respuesta y ríen, mientras que la cara del maestro es una carta del rey de póker. Igual de inexpresivo.

-Última vez-suspiro aliviada-Pasa, pero pasaré esto a inspección.

Ay, su buen corazón no se debió conmover con mi respuesta. Aunque nadie lo haría, ¡por dios! Sonaba muy superficial.

Me siento junto a Lara y ella me sonríe poniéndome al corriente de la clase. Mientras lo hace, me es inevitable no sonreír. ¿Así que esto es tener una compañera? No se siente mal.

No bromeo como con Darwin pero es agradable como me trata.

***

Muevo mis pies mientras Gregory lee lo que escribí y me gusta como mueve la cabeza mientras la tararea, pero muy lindo que sea eso, no lo veo. Mi corazón late contra mi pecho con fuerza y mis manos sudan mientras mi vista está en la puerta.

Tengo vergüenza de que lea lo que yo escribí y piense que es extraño o feo. O que algo no está bien, que no le guste.

Así que prefiero no verlo y tratar de reprimir mis ganas de salir huyendo con el cuaderno.

-Solo tengo algo que decir.

-¿Qué es genial?-pregunto en broma.

Por favor que diga que sí. Me moriré y no reviviré donde diga que no le gustó.

-Me gusta, es genial ver cómo incluso combinaste inglés.

-Te dije que sabía el resto de materias-presumo y río.

¿Qué las porristas somos torpes? Bah, boberías. Somos multitareas y si algo nos olvidamos es porque hay mucho en la cabeza.

Como a cualquiera le puede pasar. Sin excepción, todos, todititos nos hemos olvidado algo. Incluso en medio camino nos quedamos quietitos y luego no sabemos a qué íbamos.

Pero después regresas al lugar de donde venías para acordarte, ¿verdad? Un clásico.

-Aunque tengo una duda. ¿No te molesta responderla?

-Adelante.

-¿Qué milagro paso en la noche que acabaste?-pregunta en broma.

Como que no debí dejar que preguntara...

Sonrío y me encojo de hombros poniendo reproducir en la música

-Uno que la verdad no quiero repetir-respondo parándome-Venga, arriba. Debemos ahora saber qué pasos le pondremos.

-Creí que eso querrías verlo tu sola.

-¿Qué? No, no señor, aquí seremos dos-tomo su mano mientras lo llevo al centro-Los dos bailaremos y pasaremos la vergüenza juntos.

-Debes estar bromeando.

-No-sonrío-Lo haremos juntos. Tú pensaste en la canción, ¡fue tu idea!-grito riéndome.

-Creo que no debió pasar de ser eso-bromea y río negando-No fue una buena idea. Esto es una locura, no sé en qué estaba pensando.

-Las locuras son las más memorables en la vida, McFly. Eso y las vergüenzas. Es como si tu cerebro tomara un video de eso y dijera “mi precioso” y lo guardara, así el precioso fuera feo-me río-Porque dime ¿acaso recuerdas algo aburrido? No lo creo. Pero si debes recordar cuando te caíste en frente de todos, también cuando te llevaron a inspección por hacer algo que no debías.

-Nunca he ido a la inspección.

-¡Ohhh, te has maldecido solo!-dramatizo.

-¿Qué?

-Nunca digas nunca, o se cumplirá.

Frunce el ceño y luego vira la cabeza viéndome incrédulo. Me río y niego.

>>No te asustes, solo es un decir antiguo. No es real.

Eso no lo relaja, creo que por el contrario, se tensa más.

¡Vaya! Parece que alguien tiene de verdad miedo a estar en la inspección.

-¿Empezamos con los pasos?-pregunto para cambiar de tema-Tengo algunos pensados.

Mi intento por cambiar el tema funciona y me alegra. Nos sacamos risas mientras hacemos los pasos y bromeo con él. Nunca creí bromear con Gregory pero parece que hoy es él día para hacerlo.

¡Y yo no voy a desaprovecharlo!

Me río fuerte cuando hago un paso con los pies rápido y a él le sale gracioso.

-Claro, ríete. Solo querías que lo hiciera contigo por eso ¿verdad? Para reírte de mí-me acusa ofendido y río negando.

-¡No, nunca creí que bailaras así! Creí que no bailabas tan mal.

-¿Así que bailo mal?

Me encojo de hombros.

-Algo-alza una ceja, hago con mis dedos un especio reducido-Un poquito.

Niega la cabeza.

-Bueno, tal vez en eso podrías ayudarme.

Sus palabras me sorprenden pero me hacen feliz.

-No lo dudes McFly, lo que no sepas, yo te enseñaré. Pero...tampoco hago milagros ¿eh?-bromeo y me río cuando veo su cara.

Se acuerda cuando él me lo dijo y sonríe de lado. Parece querer decir algo pero mi teléfono suena.

-Es hora de irnos-digo sabiendo que es la alarma.

Tomamos nuestras cosas y salimos del lugar sin olvidar cerrar la puerta. En el camino mi teléfono vuelve a sonar y lo enciendo.

¿Nos vemos?

Hace mucho que no sé de ti.

Te extraño.

Dejo de ver los mensajes y no me hace falta ver quién es pero de todos modos lo hago. Mark, asoma de nombre del contacto y aprieto el teléfono. ¿Amores no correspondidos? Él y yo somos un claro ejemplo de aquello.

Miro a Gregory y muerdo mi labio inferior. ¿Me hubiera fijando en Mark si no me hubiera topado con Gregory?

Si de niño él no me hubiera...

¿Puedes?

De verdad quiero verte.

No respondo, solo apago el teléfono y suspiro mirando hacia otro lado. No quiero tener contacto con él, no de nuevo. ¿Soy mala por no responder?

¿Debo ser buena con él y hacerle ver que lo quiero como amigo?

Ya lo he hecho, y no, no ha funcionado. Además, no creo que él sienta amor por mí. Es más como una obsesión. Porque el amor no es así, no es dependencia. No puedo decir que es el amor con claridad, pero sé que no es aquello.