Capítulo 9

★ Bajo tus estrellas ★

★ Capítulo 9 ★

Charlotte

¿Recuerdan mi lista de cosas por "hacer" durante la fiesta? Bueno, ya no sé si la estoy cumpliendo.

La primera era averiguar acerca de Alejandra...

¿Lo recuerdan?

Saber porque me mintió dos veces en un día, porque estaba con Rodrigo a la salida cuando ni si quieran se hablaban y que yo sepa Alejandra no era del agrado de él, ni el del agrado de Alejandra.

Y ahora, no tengo la menor idea de donde están ellos. Alejandra dijo que iría al baño, bajo la mirada a mi reloj de mano:

Hace 45 minutos...

¿Tan rápido pasó el tiempo?

La segunda cosa era vigilar a Rodrigo, tal vez oír por "casualidad" conversaciones sobre Alejandra con los amigos borrachos de Rodrigo, o ver si él le dirige la mirada a mi amiga o cosas por el estilo que confirmen o realicen en mí teorías.

¿Y saben qué?

También lo perdí de vista.

Él estaba con su círculo de amigos, y ahora el ya no está entre ellos.

Esto no me huele bien.

Pienso, cuándo llega hasta mis fosas nasales el olor de la bebida del chico que está a 2 sillas de mí.

¿Saben dónde estoy sentada?

Adivinaron, si pensaron que en una silla.

Del mini- bar de la casa.

¿Cómo termine acá?

Después de buscar por toda la casa a Alejandra y a Rodrigo, me canse demasiado. Espere afuera del baño de chicas y nadie salió.

Y mi primer consejo para todos ustedes:

Jamás, caminen mucho si andan tacones y menos si no están acostumbrados a ellos.

Yo, no estoy acostumbrada a los tacones y los que yo ando puestos son de tacón bajo. Me duelen los pies, no tuve éxito en cumplir las cosas para "hacer" durante la fiesta, de mi extraña corta lista.

Y para descansar, me senté en una de las sillas del mini bar, aprovechando que no había muchas personas en esta zona de la fiesta. Poco a poco venia y se iban personas, solamente yo y este chico no nos movíamos de nuestros asientos.

Él ya estaba antes que yo viniera, y no ha bebido mucho por lo poco que he notado.

Solamente lleva 4 copas, de lo que sea que le este dando el señor que esta atendiendo. Y muchas veces se queda viendo fijamente a lo que este en frente de él.

La Tercera cosa que no cumplí: Mantenerme alejada del alcohol.

Y acá estoy, pero por suerte no he tomado nada.

Aun.

Cada momento le doy un vistazo rápido a la fiesta, tal vez veo a mi amiga.

Que te abandonó.

Cruel, muy cruel por parte de mi subconsciente... pero es la verdad.

- Señor, dale uno a la chica. –Dice el chico, mirándome. Puedo ver en sus ojos azules, unos muy profundos ojos azules, una inmensa tristeza. El señor me coloca un vaso frente a mí.

- No, gracias. –Digo sonriéndole al señor, quien amablemente retira el vaso y lo aleja de mí.

- ¿No tomas? –Me dice, el chico que está a la par mía.

- No. –Digo sin ningún gesto.

- Sabes –Dice mientras su posición se gira, dejándome verlo mejor.

- ¿Sí? –Digo sin mirarlo a los ojos.

- Ya te he visto antes, pero jamás te he hablado y no se tu nombre, pero –Hace una pausa, y se sienta sobre la silla que está a la par mía. Ahora es mi turno de verlo...

- Eres muy linda. – Dice, mientras tiene una sonrisa en sus labios, una muy corta.

- Gracias, supongo. –Digo dudosa.

- ¿Cómo te llamas?

- No sé si debería decírtelo.

- Si, lo sé, bueno yo soy Alex.

- ¿Alex?

- Alex Morales, para servirle chica.

- Es muy rápido para darme tu nombre y apellido.

- ¿Por qué?

- Soy una desconocida.

- Vas a mi escuela.

- No sabes si soy mala persona.

- No lo eres.

- ¿No puedes seguro estar?

- Por eso hay que conocer a las personas.

- ¿Y si quiero conocerte?

- ¿Por qué querrías conocerme?

- Se ve que lo linda no solo lo traes por tu físico. También tienes linda personalidad.

- ¿Cómo? –No me dejó terminar mi pregunta, me interrumpió:

- Te he visto buscar a tu amiga, por toda la fiesta. Y estoy seguro que ni si quiera la has disfrutado. –Hace una pausa- ¿O sí?

- Sí. –Miento, Alex tiene razón, no planeaba pasar así la fiesta del 14.

- Atrévete a negarlo otra vez.

- No. –Digo volviendo la vista al frente, jugando con las puntas de mi cabello castaño ondulado.

- Yo tampoco. –Dice triste, pero con una pequeña sonrisa.

- ¿Por qué no?

- Eso no importa, pero divirtámonos ¿sí?

- Yo... -No termino, me tomó de la mano y me jala al centro de la fiesta. Nos detenemos, frente a un grupo muy feliz de amigos, y digo muy feliz porque al parecer ellos no necesitan estar borrachos para estar haciendo bromas y riéndose muy fuerte.

- En esta vida solo una vez, se es joven si no lo aprovechas lo lamentaras. Así que diviértete.

- Está bien. –Logro decir, cuando el suelta mi mano y se dirige a sus amigos, llamando la atención de estos.

- Chicos ella es –Hace una pausa, él no sabe mi nombre- Una amiga que quiero presentarles. –Improviso muy bien, al no saber mi nombre.

Su amiga... Jamás me había hecho "amiga" de una persona tan rápido como con él.

- Hola. –Digo tímidamente.

- Ey, pequeña. –La primera en venir a mí, y darme un enorme abrazo es Emily.

Y se las presento: Emily Rivera. Ella es una de las "chicas populares" de mi instituto. Chica rubia, piel trigueña, ojos verde esmeralda, estatura media, no es delgada ni gorda, es intermedia, y es en edad y estatura más grande que yo. Ella ya tiene 18 años y yo apenas los cumpliré en Julio. No dudo en corresponderle el abrazo.