Bajo Tus Estrellas [#1]

Capítulo 19

★ Bajo tus estrellas ★

★ Capítulo 19 ★

Charlotte

Amo el centro comercial.

Uno de mis lugares más artificiales de la ciudad, es mi favorito. Dejamos a Robert en el estacionamiento, e Irene desde que entramos no para de mirar a todos lados.

Estoy loca.

Sí. Contestó mi subconsciente.

Bien, vámonos. Hoy pasaremos un grandioso día de chicas y Robert también.

Uno de mis lugares más artificiales de la ciudad, es mi favorito. Dejamos a Robert en el estacionamiento, e Irene desde que entramos no para de mirar a todos lados.

- ¿Todo bien Irene? -Le pregunto, porque si estará así todo el camino será extraño.

- Solo estoy buscando. -Dice sin dirigirme la mirada.

- ¿Una tienda? -Pregunte.

- No, más bien... no se. -Dice.

Sospechosa.

- ¿Invitaste a alguien más? -Pregunte.

Y sin contestarme, me tomó del brazo terminando agachada y detrás de un arbusto...

Y en estos momentos me siento que estoy vigilando a alguien.

- ¿Por qué estamos escondiéndose? -Pregunte.

- SHHHH!! -Me dijo, sin dirigirse a mí.

La mirada es siempre la que nos delata, y que son pocas personas las que logran detectarlo.

Así que, seguí la mirada de Irene y no me sorprendió pensar en la posibilidad del motivo por el que no venimos en la tarde si no en la mañana.

Es solamente una posibilidad ¿cierto?

Una posibilidad la considero también una duda y la mejor manera de "resolverla" es preguntando de una manera ingeniosa por la que no levante sospechas.

- ¿Es por ese grupo de chicos que no venimos en la tarde? Sabias que ellos estarían aquí, y por eso decidiste ya no venir en la tarde. -Dije de manera directa.

Vaya manera de averiguarlo.

- ¿Qué? Sabes, tienes un don con las personas de tu alrededor... sabes cómo descubrir la verdad.

- Eso era solamente una ligera sospecha que tenía, no creí que eso pasara en realidad.

- Esta bien, es imposible tratar de mentirte. Ven, sentémonos aquí. -Dijo señalando una banca.

- Oye sabes, yo no soy la mejor persona para darte consejos acerca de cómo vivirás tu adolescencia. Pero, Irene estás por cumplir los 15 años. Habrá nuevas amistades, habrá chicos que les dirán las fuertísimas palabras: "Me gustas" y tú les creerás.

- No lo haré. -Asegura.

- Quieras o no así sucederá, porque cuando estás en esta hermosa etapa a la que estás por pasar en menos de unos meses te darás cuenta que no hay nada más por entender.

- ¿Qué quieres decir?

- Chicos, fiestas, amistades que no sabes si son "saludables", probablemente más tiempo en el celular, salidas entre tus amistades, sentirás emociones que desearás jamás haberlas tenido, relaciones de noviazgo y quién sabe si tu primer beso. Es menos de la mitad de todas las cosas, de las que se apoderaran de tu mente.

- Un chico ya está en mi mente.

- ¿Por él venimos en la mañana, cierto?

- Si. Pero dijiste algo muy cierto. Comienzo a pensar en muchas de las cosas que mencionaste anteriormente, creo que fue –hace una pausa- demasiado maduro lo que dijiste. Probablemente lo único.

- Considerare eso como un cumplido. Siendo sincera, creo que sí fue algo maduro cuando piensas lo que vas a decir.

- Sabes tú no eres mi madre.

- Lo sé.

- Pero das consejos increíbles. ¿Cuándo estabas de mi edad, como te la pasaste?

- Te refieres cuando tenía 15 años ¿cierto?

- Si.

- Bien, en esos tiempos todos mis enemigos comenzaron siendo mis amigos. No he tenido novio porque los sentimientos del amor y confianza son difíciles de encontrar en un chico. Era la clase de chica que hablaba pero no con todos y no de todo. Digamos que mi tipo era el tímido.

Siendo sincera, esa fue mi realidad.

- ¿Enemigos? ¿No has tenido novio?

- Enemigos todos tenemos y yo no soy la excepción y si, no he tenido novio. Creo que el concentrarme en mis estudios ha sido la razón de mis logros.

- Si, eres la chica tímida con el promedio más alto de tu grado. Eso no se logra por sí solo. Pero-

- ¿Pero que, Irene? –Le pregunté.

- No eres del chico tímido, creo que eres una de las personas más sociales que he conocido. Y sabes tener un equilibrio entre tu vida llena de obligaciones y tu vida en modo loco. –No pude evitar reírme. Nos levantamos de la banca en la que estábamos sentadas y comenzamos a caminar a la zona de comida. Y hablando de enemigos...

Tienen que saber algo muy importante: yo por ninguna razón creo o llegare a creer en las coincidencias.

Elizabeth y Joshua vienen hacia nuestra dirección... tomados de la mano.

Mi corazón rompiéndose por milésima vez. ¿Cuánto más poder soportar?

Ella le susurra algo a Joshua y se acerca a mí.

- Mira, ¿recuerdas lo que dije de los enemigos?

- Si. –Dice.

- Bien, ella no se si es una... pero quiero equivocarme con ella.

- ¿Con quién?

Ella no la ha visto, pero yo sí.

En todo lugar siempre habrá alguien que acapara la atención. Y ella lo hizo, en estos momentos.

- Hola, Charlotte. - Dijo sonriente.

- Hola, Elizabeth. - Dije.

- Ten, te compre esto. - Dijo mostrándome un libro, lo tomé y de la manera más posible le dije:

- Gracias. - Sonriéndole. Joshua paso por su lado, la mirada entre nosotros fuera rápida... que ni siquiera pude apreciar sus lindos ojos.

- Lo ves, no es mala persona.

Abrí el libro y tenía escrito:

"Si te gusta leer, lee esto. Metete en la lectura, no en MI relación con Joshua. Eli ;) "

Cerré el libro y miré el título: ¿Como sobrellevar una relación duradera de noviazgo?




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