Capítulo 4

Pase el resto de horas sentada a lado del consentido de clase, sin embargo el siguió su curso normal y sólo hablaba cuando respondía las preguntas del profesor. No intento nada contra mí, simplemente me regresó a ver unas cuantas veces, como si le molestará estar a mi lado. Yo tampoco hice nada, al parecer lo que había pasado en la mañana, fue resultado del enojo que sentíamos en ese momento.

Cuando las clases terminaron, tome mis libros y me iba a ir, hasta que alguien tomo mi brazo y cuando mire para descubrir quién es, vi a Theo Collins.

—Espero que hayas disfrutado tu primer día, porque mañana será diferente— me advirtió

—Ya te dije no te tengo miedo y además está es una guerra que ya declaramos, no tienes que advertirme nada— le respondí — Cuídate Collins

Me fui de ahí con una risa victoriosa, al estar afuera visualice a mi compañera Sabrina, ella me miro y me preguntó:

— ¿Qué tal tu día? — preguntó

—Perfecto— dije de manera segura

— ¿Qué hiciste? — preguntó pero no respondí—. Hay un destello en tus ojos que da miedo

—Sólo saque mi parte fuerte y tenaz, como me dijiste y fue asombro

—Me tendrás que contar todo, cuando lleguemos a casa, ahora vamos tenemos que hacer algo

Subimos a su auto y empezó a conducir, sin embargo antes de llegar a casa se detuvo en un supermercado y yo la mire buscando una explicación.

—Esto es lo que tenemos que hacer, mi madre suele decir que una buena historia siempre se cuenta mientras se come helado

Bajamos, entramos y nos dirigimos hasta la sección donde se encuentran los congelados, Sabrina tomo helado de vainilla y yo de chocolate, adicionalmente compramos algunas cosas que nos faltan.

Luego de pagar, tomamos las bolsas y nos dirigimos al auto otra vez. Y esta vez sí nos dirigimos hasta nuestro hogar, cuando llegamos estaciono el auto y subimos hasta nuestro departamento.

Al llegar nos dirigimos a nuestras habitaciones, deje mis cosas y me puse la pijama, de ahí salí y vi Sabrina que me esperaba en el sillón con dos botes de helado y cucharas.

—Primero dime, ¿cómo te fue a ti ?—pregunté

— Fue asombroso al ver mi facultad de inmediato me enamoré de mi carrera, pude conocer a un chico muy guapo, y además me hice amiga de unas cuantas chicas, con las que comparto ciertas horas de clase — dijo muy emocionada, que casi no podía comer su helado—. ¿Ahora dime por qué cuando llegue te vi tan diferente?

—Ya te lo dije saqué esa parte que no había visto nunca

—Pero que hizo que te pongas así, si no lo dices moriré de curiosidad y todo será tu culpa— dijo como toda una reina del drama

—Hoy un chico me declaró la guerra, cuando me empujó está mañana. Para mi mala suerte es el alumno preferido del profesor, sin embargo no dejaré que me trate como un tonto sólo porque piense que estoy loca

—Sabes también había un chico así de odioso en mi instituto, llamado Theo Collins—me empecé a atorar con mi helado al escuchar su nombre—. ¿Qué pasó?, ¿estás bien?

—Así se llama el chico que conocí hoy, ¿qué sabes de él?

—Tiene 19 años, en el instituto lo llamaban misterio Collins, nadie sabe a qué instituto asistía antes, sólo sabíamos que había dejado un año en los estudios y que vive con su hermana Scarleth, nunca conocimos a sus padres y tampoco hablaba de ellos, de hecho no le gustaba hablar sobre nada

—Supongo que es reservado, lo digo porque tampoco era sociable— deduje poniendo mi punto de vista

—No lo entiendes es muy raro, era como un robot, como sabrás él es bastante guapo para ser un nerd y es lógico que le atraiga a alguien

—No me digas que una chica se enamoró de él — dije sorprendida

—Si una chica para nada fea y muy lista, es más pudieron ser una pareja perfecta, pero él la rechazó y a muchas chicas más

— ¿Por qué? — pregunté

—Ni ellas lo saben, simplemente decía que no estaba interesado en ningún tipo de relación

—Como dicen por ahí, todos tenemos un secreto que no queremos revelar nunca

—Tienes razón, ahora Theo es un misterio que podrías descubrir

—No lo creo, me odia