Capitulo 26: Lo lamento

Narra Jessica

Luego de terminar mis horas de trabajo, camino hacia la salida después de haberme despedido de Elizabeth, al llegar al estacionamiento me encuentro con mi novio esperándome para poder irnos a la casa de sus padres.

-Ya les avise que llegaremos – me avisa para después abrazarme, evito que me lastime donde me colocan el catéter, subimos a la motocicleta y nos dirigimos a nuestro destino, en el camino no hablamos ya que se siente muy raro por el viento, estoy nerviosa ya que casi no los he visto y siento miedo de sufrir un malestar malo allá y se den cuenta de lo que sucede.

Al llegar a la mansión donde se hospedan por vacaciones, subimos en el elevador agarrados de la mano como aquella vez, llegamos a la habitación de ello, ya que siempre son donde se reciben, es una sala bastante grande.

Jackson toca con delicadeza, se ve muy bien con su traje de trabajo, pero también se le ve bien su chamarra que combina con su cabello negro y sus ojos, alguien abre la puerta y no es la señora Roberts si no que una mucama, nos sonríe y yo hago lo mismo para luego entrar donde están parados en unos sofás cerca de una chimenea el señor y señora Roberts con una sonrisa en sus labios.

-¡Jessica! – Exclama contenta la señora - ¡qué alegría verte de nuevo!

-El placer es mío – me dirijo a ellos para abrazarlos.

-Qué bueno que hayan venido a arreglar las cosas – me mantenía inquieta a su comentario – supimos todo lo que paso.

-Padre, ya hemos hablado de eso – Jackson habla entre dientes – ahora queremos disfrutar de esta reunión.

-Estoy realmente de acuerdo – exclama la señora – vengan vamos a comer.

Nos dirigimos a la mesa grande donde había un delicioso banquete pero para mi sorpresa era carne roja, una de las comidas que tengo prohibidas, antes de sentarnos le toco el brazo a Jackson para que me volteara a ver.

Le hago una seña diciéndole que debo hablar con él, obedece al instante llamando la atención de sus padres, sentía pena pero debo evitar esto, nos alejamos de ellos para conversar.

-Mira cariño… - digo pero en seguida corto la voz porque no sé cómo decir esto – lo que pasa es que la carne roja no me gusta… es decir que no quiero hacer sentir mal a tus padres… pero… - me interrumpe poniendo su dedo índice en mis labios.

-No te preocupes cielo – se acerca a mi oído haciendo que me de nerviosismo – yo les diré eso, pero… ¿Qué quieres comer?

-Quiero brócoli – el me mira confundido y sorprendido a la vez – con limón – Jackson  comienza a reír como si le he contado un chiste.

-¿No hablas en serio o sí? – dice riéndose mientras que yo lo fulmino con la mirada – de acuerdo Jessica, hablare con la señorita cocinera.

Nos movimos hasta los asientos sin dejar atrás que los señores Roberts no nos dejaban de ver, en seguida Jackson les explico lo que me pasaba y me trajeron lo que quería, comencé a comer con poco apetito pero debo hacerlo para tener fuerzas.

Después tuvimos una conversación bastante abierta sobre nuestra relación, los negocios, las marcas. Jackson se mantenía sentado a mi lado sujetándome la mano con fuerza, me comento que le molestaba que no hablaran de Vanessa, él siempre la recuerda porque fue una maravillosa hermana, siempre quise tener una pero no debo quejarme porque tengo  a Elizabeth.

Comencé a sentirme mal, sentía fatiga y a la vez dolor en los huesos, debía soportar todo ya que estaba en un momento importante, en un momento no lo aguantaba y apreté con fuerza la mano de Jackson, quien se miraba confundido y preocupado pero le regale una de mis mejore sonrisas para que pensara que estaba bien.

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Era hora de irnos así que debíamos despedirnos y al abrazar a la señora Roberts, ella me mantuvo en sus brazos hasta que me dijo.

-Lo siento mucho por lo que te hizo mi hijo – me lo comentó en un susurro, me sentía mal y ahora con esto peor, no quería que me lo mencionara pero ya era pasado así que debía superarlo, solo asentí con la cabeza sonriéndole ya que parte de ello no tenía la culpa Jackson.

Nos fuimos en la motocicleta sin comentar nada, solo quería descansar y relajarme ya que los dolores son seguidos y algunas veces no me dejan dormir pero pronto recibiré la noticia.

Espero que el tratamiento funcione así le cuento antes a Jackson pero si no es posible quiero pasar esos tres día con el antes que pase lo que creo que pase.

Al llegar, Jackson se despidió de mi con un beso apasionado dejándome sin aliento, realmente me encantaban esos besos. Ha cambiado bastante y eso me alegra.

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