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Ya había pasado una semana entera desde que me enteré sobre el embarazo, y seguía sin saber qué hacer.

¿Acaso abortar era una buena idea?

Tal vez, si solo pensara en mí, pero el simple hecho de saber que una pequeña vida se formaba dentro de mí, me haría sentir culpable si tomaba esa decisión.

Y como todas las mañanas desde aquel día en el hospital, recibí un mensaje de Kate, eso me hacía sentir más segura con la decisión que estaba tratando de tomar.

Kate. 
Nyx, recuerda que la decisión final es tuya y que estaré a tu lado sin importar qué decidas hacer. Es tu vida y tu cuerpo, y tienes el derecho de elegir lo que sea mejor para ti.

A pesar de que eso era cierto, no solo era mi vida con la que sentía que estaba atentando, también era la vida del pequeño ser humano y yo no tenía la valentía suficiente como para hacer eso.

Él o ella era inocente como para sufrir las consecuencias de mis acciones.

A través de estos días, me había colocado en la tarea de investigar en internet y con médicos para obtener información de cómo sería esto.

Calcularon que tenía al rededor de unas cinco semanas de embarazo y a pesar de considerar, desde mi situación personal hasta mis metas y planes para el futuro, llegué a una decisión.

—Voy a tener al bebé —teclee rápido en el chat de Kate.

Aunque aún debía de hacerme la idea sobre que iba a ser mamá, sentía también que no me arrepentiría de mi decisión, a pesar de las responsabilidades que tendría, intentaré que todo funcione de la mejor manera.

Sonreí al obtener la respuesta de Kate, la cual volvía a confirmarme su apoyo en todo momento.

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—Entonces, ese día tú y el chico... —se cubrió la boca con sus manos para no soltar un chillido—, eres una tonta por no contarme la verdad, ¿sabes?

—No pensé que traería estas consecuencias, así que tampoco pensé en contártelo, lo siento.

—Vale, eso no importa por ahora. Pero dime, aunque sea, ¿sabes el nombre del chico?

—Si y tal parece que tú y Kyle lo conocen.

—Mierda. ¿Quién es?

Suspiré, temiendo su reacción, aún no había planeado contárselo a Asher, eso ni siquiera pasó por mi mente en esta semana.

—El padre es alguien llamado Asher, Asher Harper... Perdón de nuevo, por no habértelo dicho antes.

Kate me miró con incredulidad y luego soltó una risa nerviosa.

—Triple mierda. ¿Asher Harper? ¿El chico guapo, compañero de Kyle? Hasta yo quería estar con él la primera vez que lo vi.

—Creo que sí, es él.

—Esto se pone cada vez más complicado. No podremos contarle sobre esto a Kyle por ahora, podría ir a decírselo a Asher enseguida.

—Lo sé, lo sé, pero a la vez no sé que hacer —oculté mi cara con mis manos, sintiéndome con una carga encima.

—¿Piensas decirle a Harper?

—Aún no lo he decidido. Necesito tiempo para pensar en cómo hacerlo. No quiero tomar una decisión apresurada y luego arrepentirme.

—Todo estará bien, ya verás —aunque la situación era complicada y sentía una gran presión, su apoyo me daba algo de tranquilidad.

Sentí que también era importante discutirlo con Asher, después de todo él es el padre y yo no podía cambiar eso.

Decidí tomar un tiempo corto para pensar con claridad y planificar lo que iba a decirle, Kate logró convencer a Kyle para que le diera el número de Asher, aunque teníamos la duda de que lo podría haber cambiado.

Y como sabía que tarde o temprano debía hablar con él, no lo aplacé más y con Kate a mi lado, marcamos los números que ella había conseguido.

—No está disponible —le dije y ella me pasó otro papel.

—Prueba con ese.

Volví a marcar y esperé a que alguien contestara.

Estaba dispuesta a colgar cuando alguien respondió al teléfono, pero no era la voz de Asher la que escuché al otro lado de la línea. En su lugar, era una mujer desconocida que preguntó quién era.

—Disculpa, ¿está Asher Harper? —pregunté, tratando de ocultar mi nerviosismo.

—Él no está disponible ahora, ¿Quién lo necesita?

—Se podría decir que soy una amiga suya. Necesito hablar urgentemente con él. ¿Sabes cuándo estará disponible?

La mujer pareció dudar por un momento y luego respondió con cautela.

—Lo lamento mucho, pero no puedo darle esa información. Él está bastante ocupado y sinceramente... si eres algo más que su amiga, porque conociendo a Asher, él no le daría su número a cualquier mujer, te pediré que por ahora no lo distraigas, está preparándose para avanzar con su trabajo y necesita estar concentrado. 

¿Distracción? Esta noticia era mucho más que una simple distracción.

—Si realmente necesitas hablar con él, te sugiero que intentes contactarlo después. Ahora no es el momento adecuado. Y por favor, no le des alguna distracción si logras hablar con él, es lo menos que necesita ahora. Lamento si no es lo que querías escuchar.

Me sentí frustrada y desalentada ya que era consiente de que esta noticia podía afectar su vida de manera significativa, al igual que la mía y temía que pudiera culparme por no abortar o algo parecido. 

Agradecí a la mujer por su tiempo y terminé la llamada con una sensación de impotencia.

Miré a Kate, buscando algún tipo de consuelo o consejo, pero creo que las dos no teníamos ni idea de qué hacer ahora.

—Esto se está volviendo cada vez más complicado. No sé cómo manejarlo. Tengo miedo de su reacción y ahora esta mujer me está diciendo que lo deje tranquilo y que no le cause ninguna distracción. ¿Qué debo hacer? 

Kate me miró y me envolvió con sus brazos en un fuerte abrazo, el cual hizo que me sintiera mejor.

—Tal vez sea mejor esperar hasta que las cosas se calmen un poco.  Recuerda que tomar la decisión de tener al bebé fue valiente, sé que serás una gran mamá. Por ahora no te preocupes por eso y trata de mantenerte saludable por ti y por mi ahijado.