Capítulo 20

Raiden

Recibí una llamada de Caín hace 10 minutos. Note que está un poco ebrio, pero aun así me dijo el lugar donde están y ya estoy por llegar.

Estoy muy nervioso y tengo miedo de que Celine este molesta conmigo y no quiera saber de mí, pero con tan solo charlar un poco me daré por satisfecho.

Estacione el auto y mire el salón el cual esta calmado para tratarse de una fiesta de graduación. Baje del auto después de respirar profundo y espere a Caín.

—Maldita sea. — unos chicos se acercaron corriendo y miraron la carretera.

—La señal es pésima.

—Mierda. — una chica me miro —¿Tiene señal señor? — mire mi celular e intente hacer una llamada la cual entro.

—Si tengo.

—Llame a emergencias rápido, informe que una chica cayo al mar. — pidió nerviosa. —¡Apúrese!

Rápidamente hice la llamada y dije lo mismo que la chica y di la dirección.

—Viene en camino una ambulancia y una patrulla. — los chicos miraron hacia el lugar y uno de ellos se rasco la cabeza nervioso.

—¡Ya la sacaron! — grito la chica. —Caín ya la saco. — mire de inmediato hacia donde lo hacen y mi corazón se congelo un momento.

—Me quedare aquí para hacer señas cuando vea a la ambulancia, vayan ustedes.

Los demás corrieron y los gritos comenzaron cuando Caín llego a la orilla con el cuerpo de Celine.

Estaba paralizado, pero sabía que tenía que moverme y forcé a mis piernas a correr. Las malditas temblaban y caí a los pocos metros, pero me levanté y seguí corriendo.

—¡Celine! — los chicos del día de la fiesta corrieron hacia Caín quien estaba dándole leves golpes a Celine para que reaccione.

—¡Caín! — llegue y él me miro —¿Como sucedió esto?

—¡Fue Claudia! ¡Ella la empujo en la terraza! — contesto un chico mirando a una rubia que está siendo retenido por un chico.

Un momento, ¿Ellos son la pareja del centro comercial?

—Esta helada, el agua esta helada. ¡Celine! — me quite el saco y cobije su pecho.

Caín siguió gritando su nombre y Celine no reacciono por lo que comenzó a darle RCP y respiración de boca a boca.

—¡Pheope basta!

—¡Suéltame, la voy a matar! ¡Como te atreves a tocar a mi amiga maldita!

—¡Ahh! ¡Si Celine muere te mato!

Era todo un caos, pero toda mi atención está en Celine. Me sentía frustrado ya que no puedo hacer nada más que ver como Caín hace hasta lo imposible por que Celine reacción.

Y después de unos segundos Celine por fin mostró signos de reacción y tosió sacando toda el agua que trago.

—Celine. — la ayude a levantar su cuerpo y Caín suspiro y poco a poco el color regreso a su cara.

—Frio... Tengo mucho frio... — pronuncio con el cuerpo temblando.

Carlo se quitó el saco y lo colocamos sobre el mío mientras yo la abrazaba para transmitirle calor.

Las sirenas de la ambulancia y la policía se escuchaban cerca. La tez de Celine está demasiado mal y ahora mismo hay un viento frio un poco fuerte.

La abrace por completo tapando su rostro y pecho. Caín también está temblando, pero no parece estar muy afectado.

Los paramédicos llegaron y taparon a ambos chicos con mantas, Celine está asustada y pregunta lo que ocurrió.

Por otra parte, Caín se recostó y expreso estar muy cansado. A ambos chicos los subieron a la ambulancia y la chica rubia de nombre Claudia fue arrestada ya que todos la señalaban como la culpable.

La fiesta de graduación termino casi en tragedia, las amigas de Celine no paraban de llorar y el chico trataba de consolarlas, pero él también está al borde de colapsar.

—Vamos al hospital. — asintieron y me siguieron a paso rápido.

En el camino llamaron a sus padres entre llantos. Lo más difícil fue llamar al padre de Celine, lo cual hizo Carlo ya que era el más calmado de los tres.

Llegamos al hospital y nos informaron que los chicos ya están siendo atendidos y solo hay que esperar al doctor que nos dará información.

Los chicos están realmente alterados y pedí que revisaran a los tres, así que se los llevaron para ser atendidos.

Me mente en este momento esta echa una mierda, nunca en mi vida había sentido tanto miedo. La imagen de Caín sacado a Celine del mar sigue en mi cabeza y me da escalofríos. Celine no reaccionaba y su piel extremadamente pálida... No quiero pensar más en eso.

Los minutos pasaron y un grupo de adultos apareció alterado. Una mujer grito el nombre de Carlo y supe que se trataba de los padres de los chicos por lo que me levanté del asiento y cuando vieron que me acercaba a ellos me miraron.

—Buenas noches, sus hijos están siendo atendidos por un médico ya que debido al accidente están realmente alterados.

—¡Caín! ¿sabe cómo está mi hijo? — pregunto una mujer y quien supongo es su esposo se acercó también.

—Caín ya está siendo atendido, él fue quien saco a Celine del mar. — la mujer suspiro, pero aún está nerviosa y su esposo la tomo de los hombros.

—¡Celine! — un adulto más entro gritando un nombre. —¡Mi hija! ¿Cómo esta? — le pregunto a la enfermera y ella le dijo lo mismo que a mí.

—Leo. — un hombre lo llamo y al verlos se acercó alterado.

—¿Saben algo de mi hija? — negaron y él se preocupó más.

—Señor… — me miro y se acercó.

—¿Señor Donovan? ¿Qué hace aquí? Mi hija me dijo que como ya no trabajaba en su edición perdió contacto con usted. — asentí.

—Si, eso paso. Pero tenía algo que decirle y Caín me ayudo a encontrarme con ella, pero paso esto…

—¿Usted estuvo ahí?

—Llegue cuando Caín la saco del mar.

—¿Cómo estaba? — pregunto preocupado y agarrándome de la camisa. —¿Cómo estaba mi pequeña?

—Eso…

—¡Por favor dígamelo!

—Leo cálmate. — una mujer trato de calmarlo, pero el me seguía mirando con desesperación y tuve que decirle.