El Perfume

Capítulo 15: "Nuestra amistad sigue creciendo"

Ya había pasado un mes desde que todos los jovencitos del último año de preparatoria habían presentado sus trabajos de equipo. Adrián fiel a su palabra, mantuvo su amistad con Julieth, a pesar de que su cercanía a ella, incremento las habladurías en contra de está, y de él, quién era calificado como la nueva victima de los poderes de ella.

Adrián no hacía caso a los absurdos comentarios, y le pidió a Julieth, que ignorara los mismos, de esa manera, ambos pudieron seguir adelante son su amistad, una amistad que cada día que pasaba crecía más y más; ello se notaba en el tiempo que ambos compartían juntos, no solo dentro del aula, sino también fuera de la misma. Adrián casi siempre la buscaba a la hora del receso para compartir algo en el cafetín, a pesar de que sus amigos le decían que juntarse con la fantasmita por lastima le haría bajar a su popularidad; también la había llevado en su auto en algunas oportunidades hasta su casa, acción que había incrementado la molestia en sus fans, quienes no habían sido invitadas por él a subir a su auto hasta ese momento, a pesar de pedírselo descaradamente.

Franks, por su parte, continuaba también con su amistad con Julieth, incrementando aún más el odio de sus compañeras hacia ella; a pesar de ello, ella no podía rechazar la amistad forjada con ninguno de los dos jóvenes, pues esta la hacía feliz, tan feliz que a veces tenía miedo de tanta felicidad, sin embargo, a pesar de su temor, ella no estaba dispuesta a volver a aislarse, ella ya no quería estar sola, ella quería volver a confiar, y tanto Adrián como Franks, le habían demostrado ser personas respetuosas, amables, sinceras, confiables, y que sobre todo no se avergonzaban de ser sus amigos a pesar de su apariencia; por ello, ella los consideraba también sus amigos, pero había algo que uno de ellos le hacía sentir con su cercanía, era aquel sentimiento que ya había tenido la experiencia de sentir antes y que le había ocasionado mucho dolor, pero la castaña a pesar de reconocerlo, aún no quería aceptarlo por temor a sentir nuevamente el mismo dolor que sintió hace algunos años; y por ello aprovechando su nueva apariencia y estando segura que así ella no despertaba nada más que amistad en este, decidió seguir adelante con su amistad con él; aunque había alguien más que se había unido a su reducido grupo de amigos, y esta persona, era alguien bastante intuitiva, incluso había notado los sentimientos de Julieth, y estaba dispuesta a ayudarla a conquistar al chico que le gustaba, no porque ello sea conveniente para ella, sino por amistad, pues ella de verdad la apreciaba.

—Lo digo con sinceridad, creo que siempre es bueno arriesgar — decía Priscila.

—Arriesgar…

—Si Julieth, un cambio de look, siempre es bueno…— añadía la rubia.

—Yo estoy bien así — contesto Julieth, con calma.

—¿A qué le temes?, yo estoy segura que un cambio de imagen te favorecía mucho….

—No lo necesito — pronunció la joven de lentes tratando de sonar calmada.

—Julieth, si no quieres algo drástico, al menos empecemos por tu vestuario…

—¿Qué tiene mi vestuario?, yo me siento cómoda así, además pensé que sentías vergüenza de ser mi amiga, por ser….

—Julieth no confundas las cosas, yo no avergüenzo de ti, te estimo muchísimo, pues se lo bella persona que eres, y por lo mismo, quiero apoyarte con tu vestuario, yo estoy segura que si vistes un poco más a la moda, y te dejarás arreglar un poquito, callarías muchas bocas…

Mientras Priscila trataba de convencer Julieth con sus argumentos para que ella cambie su forma de vestir y de arreglarse; Adrián platicaba con uno de sus amigos en otro de los ambientes de la preparatoria.

—Creo que no te conviene seguir con esa actitud amigo, ahora solo falta que a la fiesta de primavera vayas con la fantasmita — dijo Daniel, con ironía.

—Pues no es mala idea, pero no creo que le guste asistir a fiestas....

—¡Estás bromeando!, ¿Verdad? — contesto el joven, posando su mirada en Adrián.

—¡Eh¡ ¿Bromeando?, pues no, Julieth, es mi amiga, ¿Qué tienes de malo que vaya con ella a la fiesta de primavera?...

—¿Es que aún no te das cuenta?, tú, ella, ¡Amigos!, son polos completamente opuestos serían como el bello y la bestia — respondió Daniel, echando a reír.

—¡Ya Daniel!, ¡No seas exagerado!, además te recuerdo que la bestia no era exactamente eso — dijo Adrián con calma.

—¿Qué me estás tratando de decir?, que detrás de ese patito feo hay un bello cisne — contesto riendo Daniel.

—Sabes, no siempre lo más valioso en una persona es la apariencia física; también hay otros detalles que hace a una persona valiosa, y bella — pronunció Adrián, sin darse cuenta que su repuesta había sido escuchada por la castaña de lentes, que sintió una enorme felicidad al escuchar la misma.

Julieth, pasó a paso rápido junto a Adrián y Daniel; creyendo que así pasaría desapercibida, pero ello no fue así.

—¡Hola Julieth¡ — expreso Adrián, con cordialidad.

—¡Hola Adrián¡ — dijo la castaña, deteniendo sus pasos; mientras Daniel, hacía como si no la viera.

—Voy a ver a mi hermanita — pronunció Daniel, para retirarse del lugar.

—Ve, ve — respondió Adrián, sonriendo, al tiempo que una rubia llegaba también al lugar.




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