Invitaciones

Andrei se acercó a la cafetería y vio el escándalo de su amiga.

—Oye, Emilly. Tranquilízate.

La chica dejó de patear el bote y cruzó los brazos…

—¡¿Qué quieres?! —preguntó, aún molesta.

—Nada, solo que me dejes pasar. Si tanto quieres invitar a Johann, ¿Por qué no le dices?

—¡Cállate! Eres el menos indicado para hablarme de esas cosas. Por cierto, ¿sabes de qué me enteré?

—Sí que tienes tiempo para chismes.

—Ellie va a ir con Michael al baile. Todo el mundo lo está diciendo porque él es famoso —trató de descargar su ira en algo.

—¿Qué? —ahora el sorprendido, y molesto, era él— ¡Eso no puede ser cierto!

—Eso fue lo que pensé con Johann, pero luego vi que era verdad.

—Solo lo dices para molestarme.

Emilly no dijo nada. En eso, Jeremy se acercó.

—Creí que ya habías invitado a Ellie al baile —reclamó—. Todos dicen que va a ir con Michael. ¿Qué demonios está pasando?

—Si Jeremy lo dice es verdad —dijo Andrei, mientras Emilly estaba muy molesta—. La iba a invitar, pero pasaron muchas cosas…

—Tranquilo, tengo la solución para esto.

—¿La tienes? —preguntó la chica.

—Tú vas a ir al baile con alguien más —sugirió Jeremy.

—¿Cuál es el punto? —preguntó Andrei.

—Poner celosa a Ellie.

—Eso podría funcionar… —dijo Emilly— ¡Claro! ¡Eso podría funcionar!

La chica se alejó, pensando en hacer lo mismo para poner celoso a Johann.

—Y… ¿a quién voy a invitar? —preguntó Andrei, sin darle importancia a Emilly.

—A Marcy, ella es perfecta ¿no lo crees? —respondió Jeremy.

—No, no lo creo… Javier está enamorado de ella.

—Cierto… lo había olvidado. Invita a una de sus amigas, de sus nuevas amigas.

Andrei consideró esta opción.

—Invitaré a la porrista. Es la chica traicionera que sería capaz de salir con el novio de una amiga.

—Para Ellie ahora eres su ‘exnovio’ —aclaró—. Pero sí… buena idea.

—Como sea, va a aceptar solo por eso.

Mientras tanto, Emilly caminó hacia otro salón.

—¡Hola! —saludó— Eddie Cardona, ¿cierto?

El chico rubio de primer grado volteó hacia ella.

—Y tú eres…

—¡Emilly! Soy Emilly Marín de 3er grado.

—Hola, Emilly. ¿Vienes por lo del Festival Musical?

—No. Ya sé que no tenías ganas de participar este año.

—No participé porque era en parejas, yo siempre me presento solo.

—Lo sé. Soy gran admiradora tuya, me gustaría invitarte un café a la salida.

—Las chicas no invitan a los chicos, es al revés.

—Lo hago porque tú eres la estrella —Emilly sabía cómo alentarlo.

Eddie sonrió, le gustaba que lo trataran como una gran estrella. Era un prodigio de la guitarra después de todo.

Sabrina estaba buscando a Ellie, pero en lugar de encontrarse con ella, se encontró con Andrei.

—¿Ya sabes que Ellie saldrá con Michael?

—Sí, sí. Ya todo el mundo lo dijo hoy.

—No te preocupes —dijo Sabrina, tocando su largo cabello negro—. Aún me queda una carta bajo la manga.

—¿Qué significa eso?

—Ya tengo pensado un plan para unirlos en el baile de graduación, todo lo que tuve que hacer fue fallar a propósito en el examen para que Ellie fuera la única que sacara 100. Eso y modificar las preguntas…

—¿Quieres decir que utilizaste tu magia para que ella lograra esa puntuación?

—No, yo no puedo hacer esas cosas. Ellie estudió y se esforzó, realmente lo logró. Lo que quiero decir es que influí en la dirección del baile para que les dieran un premio especial.

—¿Con ‘influir’ te refieres a manipularlos con magia?

—Pude haber sacado 100, el examen estaba muy fácil, pero Ellie debía alcanzar tu puntuación para que mi plan funcionara.

—No entiendo… ¿Por qué estás ayudando a Ellie? Siendo del Mundo de la Oscuridad… deberías actuar diferente.

—Y tú no deberías creer en la magia, pero ya ves… ahora estamos tomando papeles que no nos pertenecen.

Ellie se reunió con sus amigas.

—¿Ya todas tienen pareja para el baile? —preguntó.

—Yo sí, Brad irá conmigo —respondió Madyson.

—Aún no tengo pareja y no sé por qué —se lamentó Imelda.

—Debe ser por la odiosa actitud que tienen los Warton —supuso Ellie.

—¿Qué? —la chica se sorprendió por esa respuesta.

—No he aceptado ninguna invitación —dijo Suzanne—. Todos los que me invitan son unos completos losers, una porrista como yo no puede salir con cualquiera.