Capítulo 15: La Entrevista con el Muerto

Laura no pudo dormir. Revisó una y otra vez las fotos que tomó dentro de la bóveda. La inscripción en latín en la pared le llamaba la atención:
“Nihil latet in flumine.”
Nada permanece oculto en el río.

Al día siguiente, Salazar la llamó. Tenía algo que mostrarle.

En su despacho, le entregó una grabadora antigua y un casete etiquetado simplemente como "H.P."

—Hernán Palacios grabó esto tres días antes de morir —dijo el capitán—. Me lo enviaron por correo anónimo esta mañana.

Laura presionó el botón de reproducción.

Una voz temblorosa, pero lúcida, comenzó a hablar:

"Si estás escuchando esto, es porque ya no estoy. Hice lo que pude para detenerlos, pero fracasé. El pacto fue sellado en 1975. Cinco nombres. Un juramento de silencio. A cambio… poder. Prosperidad para Santa Elena. Pero no sin un precio. Cada 25 años, el río reclama. Y este es el año."

La cinta se detuvo bruscamente.

—¿Cada 25 años...? —dijo Laura, con la garganta seca.

—Exacto. Palacios murió hace exactamente 25 años —dijo Salazar—. ¿Y sabes qué más?
Ese año también desapareció una familia entera. Los Rivas. Borrados. Nunca se resolvió.

Laura sintió que algo giraba en su estómago. Era como si Santa Elena hubiese estado construida sobre una tumba. Y ahora, los muertos pedían su turno