Capítulo 6:No estaba lista, pero no tuve opción

Liam

No debí acercarme. Lo supe desde el primer segundo en la biblioteca. Pero verla ahí, tan cerca, tan real… fue demasiado.

Estuve tenso todo el tiempo. Cada palabra que pronunciaba me llegaba con demasiada fuerza, como si el universo me estuviera empujando a revelarlo todo. Pero ella no estaba lista.

No podía entenderlo aún.

Mi plan era alejarme de nuevo. Pero entonces sucedió.

Salía de la biblioteca cuando la vi: Isla caminando hacia su auto sola, con el celular en la mano. Y detrás de ella… lo sentí. Un hedor a lobo ajeno, ácido y agresivo.

Un Hollowfang.

Me moví sin pensar. Salté la verja trasera, me escabullí entre autos. El lobo, en su forma humana, se acercaba a ella con la sonrisa torcida de los que creen tener poder. Uno de los menores. Inexperto. Creyó que podía acercarse a mi pareja sin consecuencias.

—¿Estás perdida, princesa? —le dijo, rozando su hombro.

Ella retrocedió, nerviosa. No sabía quién era ni lo que él era.

—Aléjate —le dije, apareciendo detrás. Mi voz fue más profunda, casi inhumana. Él me reconoció de inmediato.

—Blackthorne… —masculló, retrocediendo un paso.

—Te di una orden. Lárgate.

Sus ojos brillaron dorados por un instante. Isla no lo vio. Estaba demasiado confundida, asustada. El Hollowfang se marchó sin más.

Ella me miró, alterada.

—¿Quién era ese? ¿Lo conoces?

No podía mentirle otra vez.

—Gente con la que no deberías cruzarte —dije simplemente.

Ella me observó largo rato.

—¿Qué está pasando, Liam? ¿Por qué siento que hay algo más detrás de todo esto?

Mirarla dolía. El vínculo se fortalecía a cada segundo. Mi lobo rugía por marcarla, protegerla, amarla.

Pero todavía no.

Y sin embargo…

—¿Confías en mí? —le pregunté.

Ella dudó. Bajó la mirada. Y entonces asintió.

Y ese fue el principio del fin.