CAPÍTULO 12

—Maldita sea —murmuro al sentarme en la mesa junto a los otros para desayunar.

—Buenos días para ti también Brooke —pronuncio Hades con asqueroso buen humor, sólo faltaba las aves cantando a su alrededor para que provocará mi vomito.

—Oh cállate que no estoy de humor para nada ni nadie —refunfuñe posando mi mirada en Luke quien se encontraba haciendo tostadas.

 Me levanté, o más bien Luke me tumbo de la cama, a las seis de la mañana puesto que hoy es el primer día de universidad.

No tengo nervios por el primer día en la universidad, lo que tengo en mi ser es querer faltar a clases para seguir durmiendo o comer pero el molesto rubio no lo aceptó y me obligó a despertar para no faltar. Genial no está la abuela para obligarme a estudiar, pero esta Luke.

El rubio al fin pone el plato de tostadas en mi plato y comienzo a devorarlos de inmediato.

—De nada Brooke, por prepararte el desayuno y que no mueras de hambre—. Miro a Luke con la boca llena de mi desayuno y asiento frenéticamente.

Tal vez el día no sea tan malo, después de todo ya desayune, quizás esta vez ninguna loca intente atropellarme y marcar mi cuerpo de por vida.

Estaba en el asiento trasero mientras Hades va de copiloto y Luke conduce, me encontraba dándole unos ajustes a mi cámara por el aburrimiento mientras que el idiota de Hades va revisando su teléfono.

Maldito presumido.

La abuela se niega rotundamente a mantenerme, dice que ya estoy grande y todo el estúpido sermón de madurar, y Logan, él muy desgraciado me dio la espalda, alegando que aún no me perdona lo de el otro día, se que todas son malditas excusas porque no quieren seguir manteniéndome.

—Necesito un trabajo —suelto de la nada inclinadme entre los dos asientos del frente. Luke quien ya había empezado a conducir frena de repente.

—¿Tu? ¿trabajar? —exagero Luke —si claro, tu eres tan buena trabajando como Hades lo es bailando.

—¡Oye! —gritamos al unisón.

—No me condenen por la verdad —indicó volviendo a poner en marcha el vehículo.

—Ni siquiera me has visto trabajar. —Proteste volviendo a mi asiento

—No hace falta se que lo arruinaras o te aburrirás en una semana. —Rebatió con simpleza. Desgraciado tiene un punto.

—¿Cómo estas tan seguro de eso? —cuestione.

—Porque te conozco. No lo entiendo Brooks ¿Por qué simplemente no tomas el dinero que te pertenece y ya?

El maldito y asqueroso dinero, sabía muy buen que esa era una de las razones por las que la abuela dejó de mantenerme para que tome la herencia y por primera vez sea responsable y deje de evadir el asunto, pero no lo haré no hay ni una moneda de ese dinero que me pertenezca y por más que lo intente ningún lujo podrá devolverme lo que hace años perdí, prefiero mil veces trabajar antes que tomar algo que sinceramente he ganado.

—De ese dinero no tocare nada.

—Pero.

—Bien —intervino el pelinegro —te conseguiré un empleo donde trabajo.

Oh si, olvide que Hades trabajaba cada fin de semana en un bar exclusivo él a diferencia de Luke no nació de una familia con mucho dinero y aunque su universidad está cubierta por una beca necesita trabajo para sus gastos diarios.

Irónico que yo rechace tanto dinero cuando hay millones de personas necesitándolo.

—Ahí tienes entonces, problemas resuelto —señala el rubio. —Quiero ver si alcanza al mes. —Entorne los ojos por las ridículas acusaciones del rubio agradeciéndole Al pelinegro.

El auto se detuvo haciendo que las imponente estructura se hiciera presente, De nuevo enormes jardines cubren mi visión, Salí de mis diváguese en cuanto el sonido de las dos puertas siendo abierta se instalo en mis oídos.

No había señal alguna de los chicos, era como si la tierras se los hubiera tragado. De igual forma baje del vehículo dándome cuenta que estaba totalmente perdida. Hace meses tuve un recorrido por las instalaciones sin embargo no me acuerdo de nada.