Ni Humano ni Kraj.

Los chicos llegaron al lugar designado con rapidez gracias a aquellos aviones no tripulados que eran bastante rápidos gracias a que funcionaban con magia. Eran muy útiles para misiones pequeñas o para los refuerzos. Y claro, era necesario uno de esos para llegar al Castillo del Cielo, la otra gran fortaleza de la humanidad.

—La entrada está aquí— Los llamo Bella acercándose a un montón de rocas que escondían la entrada— Aunque no parece que alguien haya entrado a la fuerza y tampoco escucho ruidos dentro.

Gabino se agacho para tocar la tierra y lo confirmo. O todo había terminado o algo más estaba pasando ya que no podía sentir vibraciones debajo de él.

La entrada se abrió tras introducir un código y de nuevo, no pudieron evitar sentirse extraños.

Amapola ya les había advertido que algo raro estaba pasando pero hasta ese punto, pudieron sentir el peligro real.

Los chicos abordaron el elevador que los llevaría abajo.

La mayoría de los laboratorios eran subterráneos en la actualidad, aunque si había excepciones como aquel que defendieron Gabino y José y como se esperaba, la mayoría estaban bien escondidos de los Krajs y de The End.

Aunque de vez en cuando, como ahora, los tipos de The End atacaban por sorpresa.

Aun no sabían si era porque los tipos eran buenos buscando o porque en realidad alguien estaba filtrando información y aunque estaban haciendo algo para evitar ambas, con la guerra contra el verdadero enemigo, era difícil.

El elevador bajo con rapidez hasta el laboratorio, abriéndose para mostrar un pasillo de color blanco con una iluminación blanca.

—Vaya, me siento como en Alien— Dijo Gabino para cortar el tenso ambiente.

—No es hora para referencias de viejos— Le dijo Celeste.

Gabino no pudo evitar reírse ante su comentario mientras comenzaban a avanzar por aquel claustrofóbico lugar.

—El silencio no me gusta— Susurró Celeste— ¡¿Hay alguien aquí?! ¡Vinimos a ayudar o a lo que sea!

Gabino quería regañarla pero se detuvo al darse cuenta de que no recibió respuesta de ningún tipo.

Siguieron avanzando hasta llegar a las zonas de investigación, el cuerpo del lugar, pero de nuevo, no había nadie, ni rastros de sangre, ni rastros de que haya habido pelea. Todo estaba sumergido en un silencio sepulcral.

La zona era de cuatro pisos, circular y que cada uno de ellos llevaba a cuatro pasillos donde se harían las pruebas. En el centro de la gran sala desde donde se alzaban las escaleras, había computadoras que seguro servían como su central de información.

Al ver en los cubículos, se dieron cuenta de que muchos papeles estaban en el suelo, regados.

— ¿Dónde están todos?— Pregunto Edward tomando un papel— ¿Qué demonios?

— ¿Qué pasa?— Celeste se acercó a este.

—La hoja está llena de polvo, como si esto tuviera años tirado— A Edward esto le parecía raro, entonces Gabino fue a tocar varias cosas para darse cuenta de que todo estaba polvoriento.

—Este lugar está abandonado desde hace años— Dijo Bella, mirándolos a todos— ¿Estás viendo esto, Amapola?

—Si pero es imposible, ese lugar ha mandado sus informes semanales como siempre. Es imposible que lleve tiempo abandonado, de hecho, su última trasmisión fue hace tres días— Dijo Amapola.

—Hay luz así que al menos no la cortaron— Gabino se encogió de hombros­— ¿Será una trampa?

Todos se pusieron en guardia.

—Hay que dividirnos para investigar— Gabino dio un salto hasta el segundo piso— Divídanse los pisos, sería lo mejor, si encuentran a alguien, ya sea amigo o enemigo, deténganlo.

—O elimínenlo— Sugirió Amapola en el comunicador de todos.

Celeste escogió el último piso mientras Bella saltaba hasta el tercero, por lo que Edward terminaría de investigar esa zona.

Edward recorrió los pasillos de su zona pero no encontró nada, solo maquinas sucias, llenas de polvo, computadoras apagadas y algunos papales que dejaban en claro que se investigaba al Kraj, aunque también encontró algunas marcas de sangre que parecían llevar a pisos arriba.

Pero ya estaban secas.

—Estas marcas son viejas ¿Qué paso?— Preguntó Edward a si mismo mientras un escalofrió lo recorría, como si alguien lo estuviera observando.

Por otro lado lo que encontró Gabino era más fresco.

En el primer pasillo fue que encontró cartuchos de munición mágica que acaban de ser disparados e incluso armas completas sin munición. Estas no estaban cubiertas de polvo y por las marcas en las paredes, eran recientes.

¿Dónde estaban los que dispararon? ¿Y el resto de gente?

— ¿Puedes revisar el código del arma?— Pregunto Amapola a lo que el chico tomo un arma para escanearla con sus lentes, entonces los datos llegaron a Amapola— Estas son… Un lote perdido hace tiempo.

— ¿La robaron?

—The End ha robado muchos de nuestros cargamentos buscando armarse así que puede ser y tampoco parecen las armas asignadas a esa instalación— Amapola estaba revisando los registros de la base.