21

Apenas abría los ojos cuando escuchó el timbre de su móvil sonando, busco con la mano hasta que lo encontró, se levantó despacio y no se preocupó al leer el nombre en el identificador de llamadas al contrario se emocionó pues él también quería hablar con su madre, miró a un lado, la chica que dormía con ambas manos debajo de la almohada y no evitó sonreír, necesitaba convertirse en su esposo. Atendió la llamada, la voz de su madre parecía perderse en algunas partes de la conversación la que al parecer sonaba extraña pues no solía hacer preguntas tan personales como las que hacía en ese momento.

NamJoon solía llevar una relación estable con sus padres, sobre todo con su mamá a la que creía casi como su confidente en aquel momento sintió que algo más se escondía en su voz, algo que no quería decirle pero que sin duda le preocupaba.

—Tengo algo importante que decirles, iré a casa el fin de semana y les daré la sorpresa, esta todo bien, esta más que bien.

Su madre del otro lado del teléfono continuaba queriendo obtener información que de pronto Nam intuyo alguien más le había informado aunque  le causo curiosidad saber, prefirió no preguntar nada aún así intuyo de quien se trataba. Ya alguna vez él había actuado de aquella manera desesperada intentando separar al más joven del grupo de la chica que creía estaba llegando más lejos de lo esperado, ese era su momento y ahora él era quién se sentía vigilado y algo molesto. No siguió hablando solo se despidió insistiendo en que pronto visitaría la casa y les daría una gran sorpresa que de cierta manera sentía que su madre ya sabía de que se trataba.

Emma abrió los ojos y en seguida sonrió al ver a su novio al frente de ella con una gran sonrisa. Nam se acercó a ella y alcanzo su rostro, en verdad le gustaba besarla y continuo luego dejo que se levantara, ambos debían llegar a la empresa por lo que Emma necesitaba irse en ese momento.

Nam le pidió que esperara en la sala mientras él realizaba un asunto pendiente. Emma bajó las escaleras encontró a JHope y V en la estancia ya listos para salir aún así le hicieron compañía en lo que NamJoon bajaba.

Pero Nam tenía otros planes, entró a la habitación de Jin sin siquiera llamar antes, no solía actuar de esa manera ni mucho menos con él a quien respetaba más que a ningún otro pero aquella llamada de su madre habían finalmente desbordado el vaso de su paciencia.

Jin volvió el rostro hasta la puerta y lo encontró sabía lo molesto que estaba pues su gesto no era más que de desagrado, siguió vistiéndose cuando sintió la fuerte pinza de NamJoon sujetándole por el cuello del suéter, entonces sintió temor al verlo tan de cerca y tan furioso, jamás llegó a pensar en verlo de aquella manera, pero ahora al verlo, solo podía culpar a la chica de haberlo vuelto aquella bestia irracional en la que se había convertido.

—Fuiste tu ¿cierto? Tu llamaste a mi madre, creíste que no me daría cuenta de lo mucho que desprecias a Emma, de tu forma tan despectiva de tratarla, qué sucede contigo Jin, qué te está pasando por qué no puedo entender lo que haces, acaso yo te herí de alguna forma para que te vengaras, para que te molestara tanto mi felicidad. Dímelo ahora Jin, por qué me duele que tu no estés de mi lado.

—Sigues estando ciego Nam es todo —sé soltó del agarre, —tienes razón tu novia no me cae bien pero no envidio tu felicidad es solo que...

—¿Es solo qué Jin? Te volverás a quedar callado como siempre lo haces, como un cobarde.

Jin se acerco a NamJoon más que decidido a demostrar que no era un cobarde, levantó las manos hasta su rostro y después en un arranque simplemente lo besó en los labios entrelazandolos con los de él. RM quedó sorprendido,  reaccionó luego de un par de segundos en los que se alejó de su amigo sin poder creer lo que acababa de suceder.

SeokJin lo miraba con dulzura, no se atrevía a decir nada pero no estaba avergonzado finalmente se había atrevido a dar aquel paso que siempre se negaba a dar, solo esperaba no haberse equivocado por que era cierto que el no toleraría perder su relación solo por sus sentimientos.

—¿Qué fue eso? —dijo Nam secándose los labios, —¿Por qué lo hiciste?

—Tu porque crees NamJoon, acaso sigues sin darte cuenta de lo que está pasando, te lo he dicho muchas veces te amo, te amo más que a nadie sintió que su cuerpo temblaba.

Nam negaba con la cabeza alejándose cada vez más de Jin.

—Solo quería que te dieras cuenta de que sí hay alguien para ti, yo siempre estuve aquí para ti, siempre sostuve tu mano en tus peores momentos, fui yo quien secó tus lágrimas cuando las cosas se complicaron, he sido tu cómplice en tantas cosas, solo esperando a que me notaras a que te dieras cuenta de que alguien te veía, de que yo era esa persona pero entonces apareció una desconocida y dices amarla solo por que puedes hablar con ella cuando siempre has podido hablar conmigo.

—No Jin, tu confundes las cosas, no es así sabes que también te quiero pero no así, no de esa manera por algo me enamoré de Emma, pero eso no quiere decir que dejemos de ser amigos, seremos compañeros para siempre yo te apoyaré en...en todo Jin pero mi relación contigo no es así no puedo.

—¿No me amas NamJonnie? —soltó Jin con ternura.

—Te amo hyung, pero no de esa manera, lo siento, me casaré con Emma y solo espero que tu puedas entenderme, si sientes eso que dices sentir por mi entonces sabras a lo que me refiero.

Abrió la puerta y salio completamente consternado y con la sensación de la boca de Jin sobre sus labios, encontró a su chica sentada mientras charlaba con sus amigos, trató de disimular que todo estaba bien cuando tomo la mano de Emma y entraron al auto. En todo el camino no logró decir nada, quería ser sincero pero solo guardo silencio y con eso su secreto de lo que acababa de pasar.