Capitulo veintisiete

La mera realidad de las cosas es que para que exista el equilibrio en este planeta, las personas buenas y malas deben existir, sin embargo está es una batalla sin fin, entre especies, entre todas las razas, ya sea con otra o con uno mismo, la maldad viene de dónde menos lo esperas.

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★ROSE★

Nunca creí que Gaius tendría hermanos, y menos que tendría una hermana tan sádica como Madeleine comparando a Gaius y a Madeleine ambos se ven diferentes tanto en físico como en carácter los ojos de Madeleine solo posee un electrizante color azul distinto de los esmeralda que posee el Alpha, quien iba a pensar que alguien tan cruel como ella es la hermana de el.

La situación no era nada agradable desde minutos atrás cuando Madeleine mato a diestra y siniestra a cada chica que huía, los lobos que había dentro del lugar se burlan y se ríen del sufrimiento de muchas alentado a la loba a seguir matando por pura diversión para buena o mala suerte Lucía y Carmen se encuentra entre aquella lista de chicas que ahora yacen muerta a excepción de Lucía a quien pude notar en el último minuto que sigue viva, oculta entre ese baño de sangre fingiendo haber muerto.

Por eso creí probable despertar a Evae de un dolor que aún no llega y ver la posibilidad de salvar a Lucia, estoy segura que Hazel se percató de eso, porque no ha dejado de reprender a Madeleine dispuesta a atacarla, las demás chicas huyeron al otro harem con mucho miedo tal vez buscando salvarse de las garras de la loba.

—Oh vamos Hazel, admitelo es divertido.—expresó la loba con diversión—Además que mueran unos cuantos humanos le harán bien al mundo.

—Todas esas mujeres que mataste lo trajo el Alpha, y tú hermano es el único que decide si ellas viven o mueren.—escupió La loba mayor—Lo que has hecho es una ofensa para el Alpha Gaius.

—Mi hermano no me hará nada, llegaremos a un acuerdo cómo siempre.—esbozo una sonrisa, fijando su vista finalmente en nosotros—para mi hermano como para mí, los humanos son como presas que merecen ser cazadas y devoradas hasta el final.

—La forma de pensar de Alpha cambio.—contestó Hazel—Aunque sea tu hermano, le has faltado el respeto, llegas al palacio y ni bien te hospedas comienzas a matar a todas las humanas que se encuentran aquí. 

—Recalco, estaba aburrida.—volvió a expresar—Solo mate unos cuantos, no son nada, aún queda bastante mujeres no se notará la diferencia.

Madeleine se acercó a Hazel con la mirada puesta en mi persona, levanto su rostro hacia arriba como olfateando algo hasta volver a ver con un astibo de sorpresa en sus ojos, la note sonreír ladinamente.

—Con que una humana. Que bajo ha caído mi hermano—habló mientras Hazel se interpuso entre nosotras.

—Rose vete con tu amiga.—ordenó Hazel atento a los movimientos de Madeleine.

—¿Qué pasa Hazel? ¿Tu protegiendo a una humana? deja que se quede quiero conversar algo con ella.—su forma de mirar removió cada parte de mi cuerpo en el vivo terror, es tan hermosa como espeluznantes, siento que me asfixio de pavor con tan solo tenerla a unos metros de mí.

Solté un grito cuando su piel caliente tomo mi brazo apartándome de Evae y de Hazel, la loba mayor no dudo en acercarse a mí—Esta impregnada en el aroma de mi hermano. Hazel ¿Acaso esta chica es...?

Yo sé a lo que se refiere, a lo que ella piensa y lo que acaba de confirmar con solo ver qué Hazel intenta protegerme, la risa de Madeleine es escalofriante para mí. de solo imaginar cómo mato a cada una de las chicas, siento que el mismo destino me ocurrirá, tiemblo bajo su tacto, su mano aprieta mi brazo con fuerza tanto que comienzo a quejarme del dolor, siento pánico y mi mente no deja de repetir el nombre de una sola bestia en mi cabeza.

¿Desde cuándo pienso tanto en él?

Desde que se fue, desde que siento que mi vida depende de un hilo.

—No le hagas daño, Madeleine—pidió Hazel tomando mi otro brazo—No la lastimes.

—Es una humana Hazel, mi hermano no puede estar con una raza inferior como ella, lo hace débil, lo mejor será matarla—sonrió.

—¡No!—cerré los ojos esperando el golpe que debe acabar conmigo de parte de la hermana de Gaius, sin embargo escucho un estruendo al instante que mi brazo se siente ligero por haberse liberado.

—Rose—abró los ojos cuando Hazel me habla estando cerca mío, me percató que Madeleine no se encuentra a mi lado.

—¡Rose!—María se acerca con una expresión preocupada, Evae a su lado busca con desespero a Lucía en medio de aquel escenario que María no tarda en ver y ponerse pálida, su mirada vuelve hacia mi buscando alguna herida en mi cuerpo—¿No te hizo nada verdad?

Negué con la cabeza, desvíe mi vista hacia Hazel que examina mi brazo—Hazel busca a Lucía por favor.

—¿Segura que estás bien? Tu brazo se ha puesto morado.

—Es solo un apretón—conteste para que se tranquilize, Hazel asintió caminando hacia todas aquellas almohadas bañada en sangre.

—¿Quién es ella Rose?—preguntó María señalando a Madeleine quien ahora se encuentra contra la pared mientras Callum le gruñe con furia.

—Es la hermana de Gaius—murmure temblando—Y sabe quién soy.

—Ella no puede ser su hermana.—dijo María apretando mi mano izquierda, mientras mira la pelea que hay entre Callum y Madeleine.

Los gruñidos entre esos dos, Madeleine le gruñe como Alpha pero este se impone como un beta y según recuerdo las Jerarquia dice que un Alpha está por encima de un Beta, pero para Callum que es un lobo tan antigüo y puro como Gaius su poder está por encima de un Alpha común, más no de un pura sangre.

Finalmente notó como este le dirige un último gruñido que hace que la loba agacha la cabeza con rabia, apretando sus manos en un puño—Pagarás está humillación.

—Tu pagarás está ofensa frente a tu hermano.—informó hostil el lobo que normalmente es cálido y juguetón. Luego añadió—Por muy hermana que seas el no perdonará lo que has hecho Madeleine, prepárate para las consecuencias que están por venir.